Más temprano y cuando aun estaban en Inside Hill, Giuliana había recibido una llamada de Jack quejándose del infeliz al que le había asignado Giuliana su custodia, porque éste no lo dejaba salir, Giuliana se puso a su vez en rápida comunicación con Brian, uno de sus asistentes para que corriese hasta el departamento de Jack y se ocupase de resolver lo que hubiese que resolver, porque de momento ella tenía que encontrar a Imran. Ahora que ya habían resuelto el misterio de dónde estaba Imran y antes de iniciar la apretada agenda de ese día, Giuliana le hizo una rápida llamada a Brian para enterarse de cómo iba con Jack, y el asistente le informó que el problema era que la entrada del edificio estaba completamente obstruida y que era por eso que Tom, el individuo que habían contratado para la seguridad, no dejaba salir a Jack.
La observación obedecía a que el primer sujeto que habían contratado, terminó con varias costillas rotas al intentar impedirle a Jack salir con Charlie para ir por unas pizzas. Giuliana había montado en cólera y había tenido un pleito horroroso con ambos; con Jack por apalear al pobre infeliz, y con Charlie por no impedirlo, pero a raíz de aquello, Giuliana había recurrido a James, y aunque naturalmente no iba a disponer del personal de CZ, James la puso en contacto con un individuo que le aseguró tenía la preparación necesaria.
Después de asegurarse que todo estaba bien con Jack, se concentró en las actividades de Zora. Al menos con ellos tenía poco o nada qué hacer, porque ellos sabían cómo conducirse en todo momento y los problemas los daban a nivel personal. Aunque bien mirado eso no tendría por qué afectarla, lo hacía porque eran sus amigos y no solo sus clientes, así que pensando en eso, emitió un suspiro de resignación, ya que si se involucraba tanto en los asuntos personales de Zora al completo, sin duda le esperaba un futuro muy negro con Jck debido a que a él lo conocía desde que era pácticamente un bebé, y aunque habían perdido el contacto por mucho tiempo, éste chico seguía siendo casi parte de la familia. Pero sacó eso de su cabeza, pues estaban llegando al canal y debía ocuparse de lo inmediato.
Las actividades de ese día iniciaban con una entrevista en vivo, y aunque se suponía que la misma se centraría en Lisandra, los chicos estarían presentes y debían ir a cambirse a toda carrera, pero lo que preocupaba a Giuliana era que con la inconveniente indisposición que había sufrido Edvin el día anterior, la chica se había negado a otra cosa que no fuese cuidarlo y ella no había tenido oportunidad de prepararla en forma adecuada. De modo que mientras se dirigían hacia la sala de maquillaje, apartó a Ajle que iba discutiendo con Kerim sabía Dios por qué, y quiso alcanzar a Lisandra. La cuestión fue que Edvin lo había hecho primero que ella y ahora estaba mirno a la niña como si quisiera golpearla.
Sin embargo, Evin no parecía estar prestando atención a nadie, pues al escuchar a Dàmir, había juntado las cejas como si no comprendiese, algo bastante seguro, de modo que Dàmir le había hecho una seña hacia la mano donde tenía el dulce. El chico no dijo nada más, sino que se giró y continuó su camino.
Cuando ya estaban en la sala de mquillaje, Giulina se acercó a Lisandra que la miró con aprensión.
Lisandra asintió, aunque no entendía muy bien, y mientras terminban de colocarle una cantidad indecente de algo que la hacía parecer tan pálida como un vampiro, rio ante ese pensamiento haciendo que Giuliana pensase que estaba demasiado nerviosa, de modo que comenzó a hurgar en una mochila que llevaba a todas partes y que les recordaba de forma extraordinaria al departamento de Ajle, porque en la misma podían encontrar dese maquillaje hasta un saco de dormir.
Editado: 12.02.2022