Los chicos se habían despedido de sus padres y hermanos, pues no los verían hasta después de la premiación, pero naturalmente todos habían estado mirando la transmisión, de modo que cuando llegaron de nuevo a la casa para cambiarse, Ima miró a su esposo con expresión horrorizada.
Ima estaba muy avergonzada, tanto por haber sido escuchada, ya que había hablado en voz baja y en teoría solo para Hamed, como por lo que estaba escuchando.
En aquel momento la pantalla se había dividido en seis, pues había un camarógrafo siguiendo a cada uno. Dèjan por supuesto estaba mirando al suyo que acababa de sacarse la remera y estaba sacando la lengua a la cámara.
Sin embargo, y aunque Dèjan lo miró con evidente deseo de darle un buen puñetazo, no lo hizo ni agregó nada más. Después de un momento Ioan les recordó a todos que debían alistarse también o llegarían después que los chicos.
Giuliana había tenido una agotadora discusión con Jack, porque a pesar de que su imagen se estaba vendiendo muy bien, y aunque aun no había hablado con Sttefano Ferrara que podía ser la puerta de entrada a la internacionalización de Jack, pensó que la gala de los Dreams Metal podía serle de ayuda, pues siendo un evento de transmisión global, el mundo podría darle una primera mirada a Jack. A la gala eran invitadas algunas personas involucradas al medio del espectáculo, ya fuesen actores y productores de cine, cantantes y músicos no necesariamente metaleros, sino intérpretes de otros géneros, y modelos de fama internacional. En otras circuntancias Jack no habría sido incluido en esa lista, pues aun no alcanzaba la fama necesaria para ello, sin embargo, Giuliana tiró de agunos hilos y consiguió que él fuese como acompañante de Gina Lee, un cotizadísima modelo nacida en Nueva York, pero de padres asiáticos. Inicialmente Gina se había negado diciendo que no podía aparecer en público del brazo de un desconocido, pero cuando vio las fotos de Jack, las cosas cambiaron muy de prisa.
El problema para Giuliana no había sido convencer al RA de la modelo primero y a ella después, sino convencer al mismo Jack que de ninguna manera quería ir y menos si tendría que ver al roquerito que naturalmente seguía cayéndole muy mal. No obstante, y siendo que se había puesto en manos de Giuliana, terminaría aceptando. De modo que ahora estaba de pie frente a ella que lo miraba con ojo crítico.
Jack la miró mal y se volvió, pero Giuliana volvió a detenerlo, porque estaba segura que iba a tirarse en el sillón arruinando su traje.
Aquella era una de las mejores cosas de Jack en opinión de sus amigos, porque rara vez pensaba por sí mismo, y si lo hacía lo resumía todo de manera imposible, pero cuando se trataba de recordar cosas ya fuesen fechas, lugares, caras, nombres o números, tenía una memoria fantástica y no era de ninguna como le había dicho a Giuliana en una oportunidad, acerca de que no podía recordar todo lo que decía. Sin embargo, como Giuliana no sabía esto, aun le repitió algunas a las que él no prestó atención, pues a su juicio ya sabía todo lo que tenía que saber, y luego partieron.
Ioan y Dèjan podían ser encantadores en el caso del primero casi siempre, y en el del segundo cuando así lo quería, y aquel día fue una de esas ocasiones, pues al ver a los padres de Imran tan nerviosos, ya que no estaban acostumbrados a aquellas cosas, Dèjan se dedicó a distraerlos para lo que contaría con la ayuda de Johan que era tan hablador como su hijo Kerim. Samir no había resultado de mucha ayuda para sus abuelos, porque lo que tenía Imran de serio lo tenía Samir de payaso, de manera que solo logró ponerlos más nerviosos y fue cuando Dèjan se hizo cargo, mientras Samir se iba a incordiar a JJ a quien apenas conocía, pero eso le importaba poco.
Editado: 12.02.2022