Cap. 43 Invitación

A pesar de que JJ había sido lo más delicado posible para darle la noticia a su hermana, Lisandra quedaría paralizada y parecía que sería incapaz de decir ni una sola palabra nunca más en su vida, de modo que cuando Dàmir y Ajle entraron en carrera una vez que habían sido notificados del asunto, Edvin estaba a punto de acomodarle un puñetazo al inocente JJ. Como nadie parecía haber notado esto, Ajle no se detuvo, sino que pasó cual flecha hacia Edvin y sujetándolo lo apartó del grupo. Kerim había entrado con un poco más de calma en compañía de Dèjan y hacia quien había caminado era hacia Lisandra.

• Lisa – estaba intentando JJ
• ¿Me permites? – preguntó Kerim y el chico se apartó un poco

No obstante, después de un breve chequeo, Kerim se giró hacia los que miraban a la expectativa e ignorando los gritos con los que Edvin estaba perforando los tímpanos de Ajle.

• Está en shock, y si lo permites, llamaremos a Mihailo para que le de un calmante y que puedan hacer el viaje de vuelta en calma, después de eso… bueno, no sé cómo va a reaccionar
• Debí imaginarlo – dijo JJ llevándose la mano a la cabeza – Lisa siempre reacciona igual cuando algo la asusta o la impresiona mucho. Pero no tenemos tiempo y debemos salir cuanto antes

Los chicos todos a una miraron a Edvin que repentinamente se había quedado en silencio y sus grandes ojos caramelo miraban a la chica.

• Suéltame Ajle – dijo en perfecta calma, así que Ajle obedeció – Lis – dijo sujetándola por los hombros
• Edvin, es mejor que esté así de momento
• Necesito que sepa que… no voy a dejarla sola en esto

Imran sujetó el brazo de Dàmir con lo que le transmitía la misma preocupación que él estaba sintiendo, pues de ninguna manera Edvin podía acompañarlos en el viaje de vuelta, la cuestión era que a menos que lo noquearan no podrían impedirle hacer lo que se le antojase, pues no era un presidiario. Mientras que Ioan se preguntaba si era que todos aquellos chicos y teniendo en común el talento artístico, eran igual de propensos al drama, pues la actitud de Lisandra le recordaba la de varios de ellos.

• Edvin, te lo agradezco y estoy seguro que Lisa también – estaba diciendo JJ –  pero tienes compromisos y…
• Ningún compromiso estará por encima de ella – dijo para asombro de algunos de los presentes
• Edvin, mañana tienen que presentarse en… – estaba diciendo John, pero Josh lo suejtó  indicándole silencio

No obstante, y si bien Josh hizo callar a John, él mismo no guardaría silencio y comenzaría una larga exposición de motivos en los que explicaba a Edvin el por qué no podía ausentarse, y quedaría demostrado que aquel joven individuo había nacido para hacer lo que hacía, porque finalmente Edvin entendería. JJ por su parte y mientras Josh se ocupaba de Edvin, había subido a toda prisa a alistar sus cosas y las de su hermana, pero Dàmir le dijo que cogiese lo más importante como sus pasaportes y luego él se ocuparía de hacerles llegar todo lo demás; JJ se lo agradeció y bajaron de nuevo. Después de una rápida despedida y agradecimiento, los chicos se subieron a los autos para acompañarlos al aeropuerto.

• No te preocupes – le dijo Ioan a  Dèjan en cuanto este se giró y sabiendo lo que iba a decir – Todo está dispuesto según lo que pediste y los hombres de James están atentos, así que nadie notrá la presencia de ellos en el aeropuerto

Y como siempre había tenido razón, pues los vehículos entraron directo al hangar donde un funcionario de aduanas con el que Josh habló, hizo la rápida revisión y dio su autorización para que abordasen. En todo este tiempo Lisandra no había dicho ni una sola palabra y parecía perdida, de modo que todos le dieron un rápido beso y de quien se despidieron en forma más correcta fue de JJ.

• Lamentamos mucho que tengan que marcharse de este modo, pero aparte de agradecerles su visita, quiero expresar a nombre de todos, nuestro deseo de que tu madre se mejore pronto, y si necesitan algo, sea lo que sea, no dudes en avisarnos – le dijo Dàmir
• Gracias, a todos – le dijo JJ

Edvin no había dejado de abrazar a Lisandra, pero como ya se dijo, ella parecía ausente, aun así él seguió hablándole hasta que Ajle le dijo que ya debía subir al avión.

• Lis, no quiero dejarte marchar, pero entiendo que debes hacerlo. Sin embargo, en cuanto me sea posible iré por ti y nadie va a impedírmelo – dicho esto le dio un fugaz beso en los labios y se giró hcia JJ – Cuídala, y aunque sé que estás preocupdo por tu madre y lo entiendo, mantenme informado – le dijo y se introdujo la mano al bolsillo – Toma – dijo dándole su móvil – dáselo cuando esté… mejor y que me llame
• ¿A dónde si este es tu móvil?
• Al mío – le dijo Ajle – allí está registrado no solo mi número, sino el de todos

JJ asintió y sujetando a su hermana la ayudó a subir. Los chicos se quedaron allí mientras la nave carreteaba hasta la pista y no se marcharon hasta que la misma alzó el vuelo. Ajle y Dàmir sujetaron a Edvin para que subiese al coche, pero lograr que saliese de la depresión en la que se sumió, les llevaría algo más de tiempo.