Acordes del Corazón (libros 6. Беспомоћан)

Cap. 24 Somos las voces de la libertad

 

Dàmir había decidido no ver los periódicos después de la rueda de prensa, y los chicos lo apoyaron no viéndolos tampoco, así que Dàmir se había pasado el día siguiente descansando y luego había bajado al estudio a componer un poco. Ese día, los únicos que habían estado en casa habían sido Kerim y Mix, pues Imran había ido con Maggi a ver a sus suegros, mientras que Ajle no sabían muy bien dónde estaba, pero seguramente amargándole la existencia a Heikki, pues desde que había comenzado su relación con Erkki, ella podía estar muy feliz, pero el pobre Heikki era quien sufría a Ajle que lo hacía responsable de cualquier cosa que encontrase mal y que en el pasado hubiese sufrido Erkki. Y Edvin sin duda estaba en la casa que les habían habilitado a los Altamirano, y no necesariamente con Lisandra, pues a últimas fechas y desde que Joseph había sido oficialmente dado de alta, el pelirrojo tenía una cruzada de lo más intensa, para hacerlo desistir de volver a América. Al día siguiente, y si bien todos hicieron acto de presencia, se pasaron el día intentando que Dàmir no saliese corriendo tras su padre cuando consideró que ya hacía mucho que había ido a hablar con Jesse, y las cosas se complicaron cuando Dèjan no le contestó el teléfono, aunque afortunadamente todo había finalizado bien.

Los chicos se reunieron muy temprano al día siguiente, pues debían ensayar para el concierto.

  • ¿Imran, has visto a John? - le preguntó Dàmir

Kerim elevó la vista al cielo pensando que aquel individuo si no tenía preocupaciones se las fabricaba, pues reconoció en forma inmediata el tono y pensó que aquella había sido la única cosa en la que su amigo le mintiese con descaro, porque cuando se conocieron, Dàmir le dijo que él no se preocupaba, sino que se ocupaba de los problemas cuando se presentaban. Aunque un segundo después estaba riñéndose mentalmente, porque Dàmir no había mentido, sino que no era consciente del hecho, y ciertamente se ocupaba, quizá en demasía, hasta de lo que en principio, no era asunto suyo.

  • No, originalmente iba con nosotros a Surrey, pero a última hora llamó y dijo que estaba muy ocupado
  • Vamos hombre, sabemos que la nuestra no es la única campaña publicitaria de John - le dijo Kerim al verlo juntar las cejas
  • Lo sé, pero no es normal que pase más de dos días sin llamar o aparecer, aunque solo sea para incordiar y… ¡Ey! - exclamó cuando vio a Ajle con el móvil,
  • ¿Qué? Solo voy a llamarlo para asegurarme…
  • Déjalo en paz, como dijo Imran, debe estar muy ocupado y solo espero que no aparezca con una de sus ideas brillantes
  • Bien, pero es nuestro publicista y…
  • Y nada, ya vendrá cuando pueda hacerlo

Ajle desistió a regañadientes y se fueron al estudio. Aunque en realidad no necesitaban ensayar, Dàmir y Mix eran igualmente obsesivos, así que los demás ya no discutían, sin embargo, un poco más tarde concluirían que el instinto de Dàmir era inmejorable, o al menos lo era con relación a John y sus ideas, porque a media tarde, el sujeto en cuestión apareció, pero no lo hizo solo, sino en compañía de Steven y Giuliana, a quien por cierto, tampoco habían visto desde la rueda de prensa, pero como su agencia había crecido, se preocupaban menos cuando no la veían.

  • Hola todo el mundo - saludó John - traigo grandes noticias
  • ¡Ay no! - murmuró Kerim al verle la cara
  • No sé si quiero escuchar las grandes noticias - dijo Imran
  • Vamos hombre, cualquiera diría…
  • Cualquier cosa que digan será acertada y posiblemente se quede corta - lo interrumpió Ajle
  • Escuchen, tenemos que anunciarles unos pequeños cambios para el próximo concierto
  • Define pequeños - dijo Dàmir con aprensión
  • Por empezar, estoy bastante seguro que estarán lejos de ser pequeños - dijo Kerim
  • Bueno, nada que los involucre puede serlo y…
  • Ya deja la payasada - lo interrumpió ahora Steven y miró a Dàmir - En principio, pensé que estabas jugando con fuego y arriesgando la carrera de la banda con la última producción; hace un par de días, lo que hice fue preocuparme por tu terca cabeza cuando leí la prensa y…
  • ¿Tan mal nos fue? - preguntó Ajle, pues él siempre hablaba en plural, aunque en apariencia se refiriesen a solo uno de ellos
  • Depende de quien lo mire - dijo Giuliana
  • ¿Cómo está eso, lady ice?
  • La prensa especializada los destrozó, y por especializada me estoy refiriendo a la política, pues tacharon a Dàmir de niño malcriado en busca de atención. Un vocero del CDN [1] dijo que le parecía como mínimo irresponsable, que un niño que nada sabía de política internacional, emitiese opiniones tan arriesgadas, y más aún que la prensa le diese una palestra pública para hacerlo. Sin embargo, cuando le preguntaron si era la posición oficial del CDN, evadió la respuesta, algo normal, pues ese sujeto es un político de larga trayectoria.

Los chicos se habían girado a mirar a Dàmir, pero él parecía de lo más tranquilo.

  • ¿Algo más? – preguntó
  • ¡Ah sí! - dijo John - Nuestra Lena tuvo un furioso altercado con un sujeto llamado…
  • Leonard Salievsky - completó Giuliana
  • ¿Y ese quién es? - preguntó Edvin
  • Un periodista de la fuente política - aclaró ella
  • Y autor de la odiosa frase que mencionó Guliana - agregó John y luego continuó - El asunto es que se agarró con este sujeto y al menos yo, estaba seguro que iba a darle un puñetazo, pues el infeliz le dijo que entendía su indignación debido a que ella no tenía el suficiente cerebro para escribir acerca de cosas serias, y por tanto, era lógico que hubiese terminado como una vulgar reportera de farándula
  • ¡¿Qué?! - exclamaron los chicos
  • Tranquilos, dudo que ese cretino vuelva a molestarla ni a ella ni a ustedes, o al menos no muy pronto
  • John, dime que no hiciste… - comenzó Dàmir pensando que tal vez su amigo había apaleado al tipo aquel y se había metido en un lío mayúsculo y por eso no lo habían visto
  • Yo no hice nada - dijo y ellos tuvieron dificultad para creerle - y no porque no quisiera - eso sí lo creían sin duda alguna - pero tu primo no es de la clase paciente, así que apaleó al desgraciado, y si no lo mató, fue porque su guardaespaldas se lo impidió, aunque tampoco le iría muy bien al pobre tipo, pues se rifó un puñetazo que con seguridad le fracturó la nariz; el asunto es que el otro idiota terminó en el hospital
  • ¿Cuando dices tu primo te refieres a Drasko? - preguntó Dàmir
  • ¿En serio preguntas eso? Porque si es así, eres el único que no ha notado que Drasko perdió su antipática cabeza por nuestra asistente de prensa




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