Capítulo1: "Un rumor que genera incomodidad"

En un pasillo, de una institución educativa, cinco jóvenes cuyos rangos de edad oscilaban entre los 18 a 20 años, se encontraban reunidos sosteniendo una acalorada discusión, al menos tres de ellos, ya que dos de estos permanecían en silencio solo mirándose por momentos mientras se regalaban sonrisas cómplices, sin prestarle la más mínima atención a la conversación que sostenían los demás jóvenes.

—Haber, haber, mejor que nos den su opinión Mati y Dani — dijo uno de los jóvenes, posando su mirada en los nombrados, mientras elevaba una ceja y fijaba aún más su mirada en estos, poniéndolos un tanto nerviosos.

—¿Opinión?, ¿opinión de qué Lulú? — respondió un tanto nerviosa una joven de cabello negro, recogido en dos trenzas, posando su mirada en la persona que nombro y que era una de sus mejores amigas.

—¿Cómo qué de qué Dani?, del último chisme del salón, y que digo del salón, de toda la institución — acotaba una joven de lentes y cabello ensortijado largo, mientras una sonrisa de lado se plasmaba en su rostro, al tiempo que miraba fijamente a la joven de trenzas poniéndola aún más nerviosa.

—Cris, creo que Dani, no está al tanto de nada — respondía un joven de piel bronceada, cabellos rubios y ojos verdes, mientras llevaba una mano a sus cabellos para acomodárselos, al tiempo que añadía — Pero no importa, ahora te pongo al tanto de todo muñeca y a ti también primo, porque por lo visto ninguno está al tanto de nada.

—¡Roby¡ — dijo Dani, un tanto ruborizada ante como la llamo el nombrado, mientras un joven de cabello negro de corte militar, con el que minutos antes habían estado teniendo un intercambio de sonrisas y miradas cómplices, al ver la reacción de ella, sonreía con disimulo.

—Roby, siempre tan coqueto — respondió con cierto reproche una de las jóvenes.

—¿Te parezco coqueto Lulú? — contesto el nombrado sonriendo, mientras un pensamiento surgió en su cabeza —  «Tal vez deba cambiar de estrategia, creo que la que estoy poniendo en marcha no está funcionando»

—Creo que nos estamos desviando del tema — acoto el joven de cabello militar, con una ligera sonrisa en su rostro.

—Cierto, mejor yo les pongo al tanto de todo — pronunció la joven de cabello ensortijado, mientras volvía a posar su mirada en la más bajita del grupo para añadir — Por allí dicen que dos del aula que se dicen amigos, andan en amoríos.

—Ah, sí, ¿y saben quiénes son Cris? — respondió Mati, con mucha serenidad.

—No, ¿ustedes lo saben? — dijo la joven de cabello ensortijado, con cierto sarcasmo, posando su mirada en el joven de corte militar.

—¿Nosotros?, ¿por qué tendríamos que saberlo? — contestó a la defensiva Mati, mientras la mirada de la joven de trenzas entristecía.

—Solo decía, no es para ofenderse — dijo Cris mientras sonreía de manera irónica, agregando — ¿no lo crees Dani?

—Bueno, yo….

—No me ofendo, no tendría ¿por qué hacerlo? — respondió Mati, tratando de mantener la calma, y dándole un respiro a su amiga.

—Es cierto, no hay porque ofenderse, ni que fueran Dani y tú los protagonistas del rumor—añadió la joven con cierta ironía.

—Pues no somos nosotros, ¡cómo se te ocurre Cris! — respondió Mati con cierto reproche, sin notar que la mirada de la joven de trenzas entristeció.

—Bueno volvamos al salón, el receso ya está por terminar — acoto Lulú.

—Sí, volvamos — respondieron a coro los jóvenes, terminando así con la discusión.

Los cinco jóvenes se dirigieron al aula, tres de ellos iban platicando sobre la clase que tendrían, mientras los otros dos jóvenes caminaban un poco más atrás del grupo en completo silencio, cada uno inmensos en sus propios pensamientos, sin siquiera posar su mirada en el otro..

—«¿Quién pudo vernos?, ¿quién?, ¿quién?» — pensaba el joven de corte militar, mientras caminaba ensimismado en su pensamiento hacia el aula.

—«Me pareció molesto por el rumor» — pensaba la joven de trenzas al tiempo que su mirada se tornaba aún más triste, mientras caminaba cabizbaja hacia el aula.

Una vez que llegaron al aula, cada quién tomo su lugar. Del grupo de los cinco jóvenes dos de ellos eran los que tenían más tiempo de conocerse, ambos eran amigos desde niños, habían estudiado juntos desde la escuela primaria, forjando así una gran complicidad y amistad entre los dos, una amistad que con el paso de los años había incrementado los sentimientos de uno de ellos por el otro, aunque debido a la inexperiencia en temas de amor no había notado ello hasta que hace algunos días paso algo entre los dos, que hizo que esta persona comprendiera lo que estaba sintiendo, pero a la vez se sienta un tanto confundida, pues pese a lo que pasó nada había cambiado entre los dos, todo parecía seguir siendo igual, al menos hasta ese día, en que aquel rumor pareció producir incomodidad en uno de ellos, incomodidad que se reflejaba en su manera de actuar desde el momento en que uno de los jóvenes de su grupo hablo del rumor que estaba corriendo no solo en su aula, sino en todo su centro de estudios.