-¡Déjame en paz, nena! -dice, rodeándome para salir a la piscina. Inmediatamente la tomé en un abrazo y la obligué a mirarme.
-¿Puedes explicarme qué demonios te pasa? -pregunta furiosa.
Me miró, viendo algo profundamente oscuro en sus ojos que estaba escondiendo: Sin embargo, me sonrió sin alegría.
-Este es tu mundo diferente, Amaris- explicó con calma. Yo solo estoy viviendo tu vida, disfrutando de tus amigos y sintiéndome libre de problemas, pero no como una escritora exitosa. -Esto es lo que haces y eso es lo que se supone que debo hacer yo- dijo y dio un paso atrás de mí.
Debía dar crédito a lo que escuché venir.
En algún -Has perdido completamente el control- la esperé bajando el tono de su voz tonta. No me importaba porque me gustaba descubrir en quién se estaba convirtiendo la criada de la que creía que Teo estaba enamorado. Pero pensándolo bien... lo que hacía y lo que necesitaba... era lo mismo que la había visto involucrada en todas esas cosas:
En ese momento habíamos intercambiado los papeles. Ella estaba ansiosa y me había sacado del agujero oscuro en el que me había metido, una nueva vida, nuevos amigos y una escuela de élite, encontrando un mundo de lujos muy diferente al suyo. Sin embargo, pronto descubre un club para bailarinas, el J, donde no solo pone a prueba su habilidad con los patines, sino también su talento para cantar sobre el escenario. Durante esta nueva etapa en su vida, su pasión por el patinaje y el baile florecerá en ella, encontrando nuevos amigos en el camino, y también el amor, enamorándose de alguien completamente diferente a ella, triangulando a Teo y Eros, mientras que Nicole Blanch, la alumna más popular de la escuela y novia de Teo, le hará la vida imposible pero con eso, su tiempo para ocupar mi lugar se acabó.