Capítulo 17

Capítulo 17

Desde ahora en adelante tengo que ser mas cuidadosa con lo que diga o haga delante de mis padres y en especial de mi madre.

En el momento justo se me presentaba la oportunidad, la aprovecharía al máximo antes que intente esfumarse. Y siendo realistas no sé cuándo la suerte volverá sonreírme.

Esta idea era descabellada por donde lo mirara, pero necesitaba respuestas y él estaba ahí justo donde lo necesitaba. No quería testigos.

Mi madre estaba ocupada en su oficina atendiendo pendientes de su trabajo y su agenda estaba repleta, no lo había escuchado directamente de mi madre sino del personal del servicio cuando me dijeron que subiera al segundo piso.

En cuanto al presente me encontraba bloqueando el paso de Axton para detenerlo y evitar que se marchara sin obtener lo que deseaba oír de sus labios. Axton la pieza clave para resolver algunos misterios.

Este sentimiento tan familiar al escuchar ese tono que usaba conmigo y que a su vez lo detestaba por ser tan serio y formal, como si con ello dibujara una frontera entre los dos. Era como si hubieran borrado al chico que conocí durante mi exilio. ¿Donde estaba esa sonrisa y ese tono amable ? . Tenia tantas preguntas que hacerle, pero el tiempo con cada respiración se me escapaba de las manos. Ser inteligente era la clave para manejar esta situación.

Frente a mis padres y los demás podía continuar pretendiendo que aun no recordaba nada. Ellos querían saber por ese periodo de ausencia y yo quería por lo sucedido antes de ese incidente. Si, los recuerdos estaban volviendo poco a poco y sabia que en lo mas profundo de mi subconsciente algo con todas sus fuerzas quería que estos recuerdos remontaran a la superficie. No estaba dispuesta a que se perdieran, eran mios, porque si lo hacia seria como olvidar a mis pequeñas. Una de las pastillas que Grace me daba ralentizaba el proceso y nadie se dio cuenta hasta que el medico de mi familia investigo mas allá. Imagino que Grace lo hizo para que me quedara con William, su hijo, no conto con el factor sorpresa que provocaba Cayden en mi. Mi madre regreso como si alguien le hubiera susurrado que si estaba cerca de Cayden de nuevo perdería a su hija.

No todo había vuelto completamente en su lugar fueron pequeños destellos, sensaciones y recordaba vagamente a Axton. Lo cual ya era un progreso. Frente a mi tenia a la única persona que me acompaño durante el tiempo que mis padres decidieron esconderme del mundo para así evitar que la gente hablara a sus espaldas ensuciando el buen nombre de la familia Massen.

Me escondieron y me exiliaron como si hubiera cometido una falta grave. Axton quien no me juzgo por ello e incluso me ofreció su amistad cuando ese servicio no entraba en su contrato de guardaespaldas. Con él cerca me sentía menos sola.

Desde que desperté en casa de William, Axton estuvo cerca pero en ese entonces no lo recordaba y llegue a pensar que estaba de parte de Grace cuando en realidad se quedo para cuidarme; me mantuvieron vigilada y eran contadas las ocasiones que permitieron que él se ocupara de mi seguridad. Les preocupaba que recordara y acudiera a Axton, la madre de mi exnovio no lo consiguió.

No importa si lo que obtengo de esta conversación es poco o nada, sé que habrá valido la pena.

El silencio reinaba en la habitación salvo por el sonido de nuestras respiraciones. No era un silencio incomodo sino era agradable. Ambos nos miramos sin decir ni una sola palabra y quizás en otra ocasión me hubiera bastado con solo eso. Pero en esta ocasión alguien debía dar el primer paso aunque era incierto quien lo seria primero. Las facciones de Axton se suavizaron por unos segundos y enseguida su cuerpo se puso en alerta…

El tiempo corría con cada latido retumbando en mis oídos como queriendo advertirme que esta oportunidad pronto caducaría.

La postura de Axton se mantenía alerta como si esperara que alguien no deseado entrara y al vernos pudiera malinterpretar la situación. Lo entendía perfectamente aun así podía inventar cualquier pretexto, no estábamos haciendo nada malo solo hablar… aunque todavía no hubiéramos pronunciado alguna palabra. Debía hacerlo ahora.

— ¿ Recuerdas el puente en Paris? – mi pregunta fue directa sin rodeos, Axton me miraba serio – ¿El jardín de tulipanes en Amsterdam?

.Recuerdos que nos pertenecían a ambos de ese tiempo de exilio y lo que aquellas ciudades habían significado para nosotros. Recuerdos reales y él lo sabía, pero se perdió una atisbo de sonrisa.

— Tù... es imposible – su voz fue apenas un susurro de confusion – No...

La sorpresa en su mirada era evidente y Axton no pidia negarlo.

Habia dado el primer paso y eso era todo lo que recibí de él, estaba segura que esto le habia tomado por sorpresa. Axton se paso la mano por el cabello y en el proceso lo despeino; recordaba este gesto muy propio de él como si con ello pudiera poner en orden sus pensamientos e ideas. Retrocedio un par de pasos para poner distancia entre ambos.

Ambos sabíamos que esas ciudades habían dejado huella en nosotros. Durante ese tiempo hubo cambios Axton ya no era mi guardaespaldas y en su lugar se convirtió en mi amigo; ese amigo que hizo que la soledad no se sintiera como una mañana de invierno. Acudía a él cuando sentía que ya no podía más con la situación y un abrazo suyo me hacia sentir mejor. Las veces que Axton le hablo a mi vientre abultado y mis pequeñas se movían como si estuvieran felices de escucharlo, llegue a pensar que Axton era su persona favorita. Instintivamente mi mano fue a mi vientre ahora plano, recuerdos que eran como pequeñas luces.

— Señorita Elisabeth – su tono volvió a ser frio y distante – Lo siento, pero no entiendo lo que me está diciendo.

Me miraba como si tuviera un tercer ojo o incluso hubiera hablado en un idioma extranjero. Axton sabia a lo que me refería, él mentía.
— Lo sabes – repuse manteniendo la voz baja – Soy Lissa. No hay nadie aquí, –señale la habitación – deja de ser tan…tan formal conmigo.