Capítulo 25º La pequeña cabaña.

Emma se despertó con el sonido de la lluvia golpeando suavemente contra las ventanas. La tormenta de la noche anterior había dejado el aire fresco y ese aroma a tierra mojada que tanto le recordaba su infancia. Se giró en la cama y abrazó la sábana, dejando que su mente se dividiera entre el presente y el pasado.

El rancho, con su inmensidad y su calma engañosa, había logrado atraparla más de lo que nunca imaginó. Pero lo que más la alteraba era la sensación de que Cole guardaba secretos. Secretos que estaban allí, a la vista de todos, que muchas personas sabían,pero que nadie mencionaba.

Con un suspiro, se levantó, se puso un suéter ligero y salió al porche. El sol apenas asomaba entre las nubes grises que aún cubrían el cielo. Desde allí, vio a Mike ajustando la silla de montar de uno de los caballos. El viejo capataz, como siempre, parecía saber más de lo que decía.

—Mañana habrá otra tormenta —comentó sin levantar la vista—. El viento lo dice.

Emma sonrió levemente. Mike tenía esa extraña habilidad de leer el clima y acertar.

—¿Cole está en la vieja cabaña?

Mike asintió.

—Desde el amanecer. Ha estado allí mucho últimamente.

Las palabras del capataz hicieron que un escalofrío recorriera su cuerpo. Emma sabía que la cabaña, alejada del rancho principal, era un refugio para Cole. Un lugar donde se encerraba con sus pensamientos y recuerdos. Y ella quería saber en qué pensaba.

Sin pensarlo demasiado, tomó el sendero hacia la cabaña. Las hojas húmedas crujían bajo sus botas mientras avanzaba entre los árboles. Al acercarse, notó que la puerta estaba entreabierta y un hilo de música sonaba en su interior. Era una melodía suave , de esas que te envuelven en los recuerdos.

Empujó la puerta con suavidad.

Cole estaba de espaldas, sosteniendo un pequeño objeto entre sus manos.

—Emma —dijo en voz baja, sin girarse—. No esperaba verte aquí.

Ella avanzó con cautela, sintiendo que acababa de cruzar el límite.

—Quería verte.

Entonces, Cole cerró la mano en torno al objeto y se giró hacia ella.

—A veces hay cosas que es mejor no descubrir, Emma.

Su voz tenía un matiz que hizó que un escalofrío recorriera todo su cuerpo,sintiéndose extraña..

Emma preguntó.

—¿De qué hablas?

Cole la observó en silencio, como si estuviera midiendo hasta dónde podía contarle. Como si los recuerdos de su pasado estuvieran a punto de arrastrarlos a ambos.

Ella bajó la mirada hacia su mano cerrada y sintió un nudo en la garganta.

—¿Qué tienes ahí?

Cole pareció dudar por un instante. Luego, con un suspiro, abrió la mano y le mostró lo que sostenía.

Era una pequeña medalla de oro con una inscripción en la parte trasera.

El nombre de Grace brillaba bajo la suave luz de la cabaña.

Emma tragó saliva.

—Es de tu esposa…

Cole asintió, pero su mirada estaba perdida.

—Era su amuleto de la suerte. Lo llevaba siempre.

Emma sintió un escalofrío.

—¿Por qué lo tienes aquí?

Cole cerró los ojos por un instante.

—Porque a veces, cuando la vida nos arrebata lo que más amamos… nos deja cosas en su lugar.Y en un lugar donde vamos y nos sentimos protegidos...venir aquí me hace sentir bien...

Emma sintió tristeza al escuchar a Cole, aquí en esa pequeña cabaña , era dónde Cole estaba solo junto a sus recuerdos .Solo junto a Grace.

¿Qué más le ocultaba Cole?¿Y por qué sentía que su pasado estaba lejos de terminar?

Esa pequeña cabaña alejada del rancho , era una cabaña especial que guardaba muchos secretos , muchos recuerdos que Cole todavía no podía olvidar.

Por que el amor por Grace no habia terminado, fue el destino quien los separó , el destino que fue cruel y lastimó su corazón.

Un corazón que todavía no había cicatrizado .

¿Por qué su corazón ahora latía de repente por el pasado?

Cuando Emma llegó simplemente era frío,distante al igual que ahora,pero pasaba las horas en el establo con los caballos y con los trabajadores,preocupándose del rancho y los problemas,de que todo estaría bien.

Aún recordaba sus palabras cuando le dijo que ella no era mujer para vivir en esas tierras,que se volvería a la ciudad que era a donde pertenecía.

Pero ahora todo era distinto.

¿Por que Cole,recordaba tanto a Grace,que había cambiado?

Las dudas en Emma cada vez eran mayores..