Me fui a dormir con miles de cosas en mi cabeza.
Luego de que Dean se fuera me puse a ordenar, y entre los vidrios encontré fotos de muchos años atrás.
Esas fotos lograron que parte del pasado se hiciera presente en mi mente, cosa que no me agrado.
Doy vueltas en mi cama, inquieta, no puedo dormir. Debe ser por todo lo ocurrido. Mis padres no han vuelto de donde quiera que estén y no podría importarme menos.
Dean aparece en mi mente. Es un buen chico que no merece estar involucrado en toda esta mierda, se que quiere ayudarme y ya no me negare a ello. Pero por ningún motivo dejare que salga lastimado.
Con esos pensamientos caí dormida.
Esta oscuro, pero aun así logro ver lo que me rodea. Estoy metida en el armario de mi pieza, creo que tengo 7 años.
Mis brazos sangran por los golpes de mi padre, no debí jugar dentro de la casa, por eso quebré el jarrón.
- donde estas mocosa?- grita mi padre desde la puerta de mi habitación
No hago ningún ruido. De pronto, escucho como mi padre abre las puertas del armario, azotandolas contra la pared.
- Aquí estas- dice
- Papi... Yo... Lo siento...- no logro decir nada mas
Sonríe, eso hace que mi cuerpo tiemble. Acerca su gran mano y me jala del cabello.
Me arrastra hasta el primer piso de la caza, para en la sala donde mi mamá nos ve sin ninguna emoción en su rostro.
- Mami...- quiero correr a su brazos pero mi papá aun me tiene agarrada
Logro ver como mi mamá toma un cinturón que esta en el sillón y se lo pasa a mi papá.