En un principio… todo era caos.
Y de este caos nacieron las Deidades, dioses y diosas, portadores de la magia más pura. Almas inmortales que reinaron en el mundo, caminando entre mortales, observando cómo de la magia nacían otras criaturas, ninguna tan poderosa como ellos mismos.
Pero cometieron errores, se involucraron con los humanos que habían considerado inferiores; y de esta unión, surgieron los Caminantes. Seres portadores de magia terrenal, bastardos de dioses. Y por siempre esclavos de éstos.
Condenados a vagar por la tierra sirviendo a sus creadores, a jurar lealtad…
O morir.