CAPÍTULO 25: Gélida invitación
Las cosas en la academia habían estado tensas, aunque las personas se abstuvieran de hacer preguntas se notaban en sus ojos el deseo de saber lo que había pasado; realmente no tenía mucho que contar, estar congelado no es una sensación con la que me familiarice, no recuerdo más que frio viniendo hacia mí. Pero quien realmente me preocupaba era Alek, los de su reino ya no hacían nada a escondidas o sutilmente, eran de verdad crueles e indiferentes, hubo muchas sanciones y suspensiones del director a los del reino de hielo e incluso tuvieron que hacer cambios de maestros. Mientras que los de otros reinos miraban a Alek con temor Hana, Aideen, María y yo eran las únicas personas de primer año con las que hablaba, para nuestra suerte contábamos con el apoyo de Aqua, Tsubasa y Sheed de grados superiores, keegan y el director.
Otro factor que contribuía a que la situación estuviera tensa era que mis padres y la reina Alaine seguían en la academia, aun después de que el torneo fuera cancelado y pospuesto para final del año. Por otro lado, la hermana de Alek se retiró en cuanto el acuerdo quedo estipulado, se marchó para atender lo concerniente a la celebración que se llevaría a cabo.
Durante los días de espera Aideen llego a un acuerdo con Connor donde el seria uno sus pretendientes junto con keegan y Dylan (que aún no se había presentado), aunque al principio no quiso aceptarlo era lo único que podían hacer para que el anillo desapareciera sin dejar marcas. Hana, por otro lado seguía teniendo problemas para mantener a sus amigas unidas. Mientras que Alek se encontraba suspendido temporalmente de las clases donde solo había estudiantes de su reino.
………….
El momento de partir llego, mi madre se aseguró de que me llevara todo lo necesario y de advertirme de todo lo que me podría pasar, mi padre por otro lado solo me puso una mano en el hombro y dijo “mucha suerte”. Aunque yo estaba listo y no me sentía fuera de lo normal sabía que para Aideen y Alek era una gran presión, Alek por el hecho de que aquella acción podría o no enmendar sus errores y Aideen la presión de que si fracasaba no solo quedaría como inútil si no también afectaría la delgada línea de amistad entre los reino de hielo y fuego.
Estábamos listos para partir, la reina Alaine se despido de Aideen justo frente al carruaje y le coloco el collar que había utilizado para descongelarme pero con nuevas gemas para remplazar las que fueron utilizadas aun que de un color rojo más claro. Hana también fue a despedirnos en compañía de María y justo antes de partir Aqua y Tsubasa aparecieron. Tsubasa me pidió que cuidara bien de ambos y que intentara evitar que se metieran en problemas (lo cual parecía casi imposible) Aqua más que hablar con Alek simplemente cruzaron miradas mientras ella lo tomaba de la mano y después de eso le dio un beso en la mejilla, instintivamente me voltee, mientras Tsubasa los miraba y se reía. Una vez dentro del carruaje podíamos ver cómo nos despedían nuestras familias y amigos.
Durante la primer parte del camino Aideen no paro de burlarse de Alek por lo colorado que se había puesto tras el beso de Aqua y el no dejaba de molestarla con un montón de cosas más. El resto del viaje fue todo muy tranquilo y en veces un poco tenso ya que tanto Alek como Aideen se perdían demasiado en sus pensamientos. Aideen no dejaba de tocar su collar y Alek miraba tristemente por la ventana. Cuando llegábamos a bajar para que los caballos descansaran pasaban dos cosas, que ellos se quedaran pensativos y apenas se dieran cuenta del tiempo que pasaba o que estuvieran al pendiente de mí. Constantemente me miraba rodeado por ellos mientras hacía dibujos en mi libreta atosigándome con preguntas de lo que hacía y por qué lo hacía. Al llegar al borde del reino del hielo se podía sentir como la temperatura cambiaba, nos cambiamos de ropa a unas más adecuadas, yo usaba unos pantalones negros con botas gruesas de piel, una capucha de piel de oso, guantes y gorro, Alek en vez de ponerse ropa más cálida se quedó con su ropa normal, que era su camisa azul de cuello tortuga, pantalones café bombachos y botas. Aideen por otro lado usaba ropa más cálida, tenía puesto un vestido de terciopelo rojo corto de manga larga, mallones blancos y botas altas de color café con detalles dorados.
Una vez dentro del reino no podía creer la gran vista. Todo era de un color blanco puro, las colinas, montañas, árboles y todo alrededor estaba cubierto por la nieve blanca, sentía como mi nariz estaba fría y vapor salía de mi boca. Al ir más dentro y justo arriba de una colina observamos una enorme casa de madera con una base de piedra alta y un horno tirando humo. Cuando llegamos a la sima pudimos ver a lo lejos el reino del hielo, grandes construcciones de hielo solido de un color azul pálido se extendían y rodeaban el castillo que era de una estructura majestuosa y estaba situaba justo en una montaña en el centro del reino, no había calles de piedra ni arboles grandes y verdes, desde la distancia apenas y se podía notar la diferencia entre la gente y la nieve. Mientras seguía admirando aquella vista atónito Aideen me llamo, ella y Alek ya estaban hablando con los dueños de aquella gran casa.
- Fred, te presento a Yasmin y Andrey ellos son los dueños de esta posada y quienes cuidaron de mi hasta que entre en la academia.
El hombre era exactamente el estereotipo del ciudadano de hielo, piel pálida, ojos azules y cabello blanco, mientras que la mujer era definitivamente proveniente del reino de la luz, cabello largo y lacio de color rubio- castaño, ojos ámbar y piel oscura. Ambos me saludaron de muy buena manera y jugueteaban con Alek tratándolo como un niño pequeño, el parecía muy feliz de verlos.