Arcania : El Principe Exiliado Y La Heredera De Fuego

CAPITULO 46: Separación

Capítulo 46: separación

En una de las visitas al castillo, observábamos como se encontraba la reparación del mismo, constructores con grandes bloques y herramientas entraban y salían. Alek se encontraba sentado en un trono de hielo en lo que antes era el salón principal.  Usaba un traje elegante pero a la vez informal  el cual consistía en una camisa cuello alto de color blanco con borde plateado un pantalón negro azulado y una capa con capucha azul oscuro con diseño de escarcha.  Se encontraba recargando su mejilla en su mano, parecía bastante aburrido mientras que con la otra sostenía un cetro con un gran pedazo de hielo con gemas del mismo incrustadas en la parte superior.

- Parece que te has adaptado bien a tu nuevo rol –dije un poco burlona

- Y parece que tú has recuperado tu mal sentido del humor -  Estábamos mirándonos enojados mientras nos reíamos cuando Tsubasa interrumpió.

- Alek, pronto tendremos que marcharnos, debemos llegar lo antes posible al reino del rayo pedir armamento para tu reino y después debemos seguir en la búsqueda de tu hermano, sea como sea ahora corre peligro al ser perseguido por los noirs; además, es el único que sabe acerca de la ubicación y las intenciones del hombre sin rostro.

- Sí, mi hermana ya me ha informado sobre eso, es una lástima que no pueda acompañarlos, ahora mismo dedo concentrarme en la seguridad del reino y en su reconstrucción. Sería de gran ayuda contar con el armamento del rey del rayo, si es que está dispuesto a brindárnosla. He escrito una carta para que se la entreguen personalmente, si la envió por aire probablemente decline y no les permita la entrada.- Alek le entrego la carta a Tsubasa.

- Vaya, incluso te comportas como un rey de verdad, estoy impresionada –

- Deberías estarlo y agradecida también de que no te he echado del castillo todavía. Por cierto; Sven me ha pedido quedarse, dice que prefiere estar aquí que andar viajando por ahí acechado por el enemigo.  ¿Qué día tienen planeado partir?-

- A primera hora mañana -

- De acuerdo, cualquier cosa que necesiten infórmeme y se los conseguiré de inmediato. - Estábamos por salir de la habitación cuando note que Fred se quedó atrás.

- ¿Fred? ¿Ocurre algo?

- Solo necesito hablar con Alek a solas un momento, adelántense.

Lo mire un poco intrigada pero al final  me marche, Fred había estado yendo al castillo con regularidad junto con Sven, con el cual hablaba mucho últimamente, eso me hacía sentir un poco inquieta ya que se comportaba como si estuviera ocultándome algo.

Cuando la tarde llego Fred y Sven volvieron a la posada, Sven se fue a su habitación y Fred se quedó frente a la chimenea para obtener un poco de  calor. Fui a sentarme a su lado.

- ¿Está todo bien? Has estado comportándote extraño últimamente.

- Ciertamente Aideen no lo estoy, aunque mi pierna a mejorando no he sido más que una carga para ustedes durante todo el viaje.

- Eso no es verdad, te lastimarte protegiéndome sin ti yo…

- Creo que ya encontré mi sentimiento – me interrumpió – aquel que me permitirá sacar todo mi potencial, Sven me ayudo a encontrarlo y también puede entrenarme para desarrollar mejor mis habilidades.

Le dije que eso era genial, así ya no tenía que preocuparse y que cuando regresáramos del reino del rayo podría entrenar y mejorar para no sentirse como una carga. Fred me volteo a ver con unos ojos llenos de tristeza.

- Aideen yo no voy a volver, porque no voy a irme, me quedare aquí entrenado con Sven, además aún que no lo parezca Alek está sufriendo, fue algo chocante todo lo sucedido en los últimos días y se encuentra bajo una gran presión, lo ideal sería que me quedara ya que no tiene a nadie en que confiar aquí.

- Entonces me quedare con ustedes así yo…- el negó.

- Tsubasa y Hana no podrán realizar el viaje solos. Recuerda que Tsubasa menciono que solo nos ayudaría la mitad del viaje y ya se ha excedido; además, estando fuera necesaria tu ayuda para proteger a Hana.

Agache la vista, todo se quedó en silencio lo único que se podía escuchar era el crujir  de la madera en el fuego.

- Nunca hemos estado separados…

- Lo hemos estado varias veces durante este viaje

- ¡Pero no de este modo! – me gire para verlo con ojos de ira – nunca hemos estado lejos el uno del otro por un periodo tan largo de tiempo, no sé si quiera si volveré al reino de hielo. ¡Podríamos dejar de vernos para siempre!

- No digas eso Aideen, eso no pasara

- ¡¿Como puedes estar tan seguro de eso?!

- Porque yo siempre querré verte. Y cuando esté listo si tu no vienes  yo iré a buscarte.- Dijo mientras me tomaban la mano.

- ¿Lo prometes?

- Lo prometo

- ¿Por el anillo de fuego?

- ¿El anillo de fuego? ¿puedo hacer algo así? ¿No es algo único del reino del fuego?

- No lo sé, abra que intentarlo.

Cree el anillo y colocamos las manos, Fred se quejó más de una vez que lo estaba quemando. Hicimos un juramento, Fred prometió  desarrollar mejor sus habilidades y cuando esté listo me buscaría. Yo prometí esperar ansiosa su regreso. El anillo fue colocado en nuestras muñecas  era mucho más tenue y delgado, Fred menciono que sentía cálido y después sonrió.



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En el texto hay: dioses, habilidades especiales, aventura y amor

Editado: 29.04.2020

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