Al los siguientes días, eran momentos cruciales para Dimitri que vivía de dolores de cabeza todo el tiempo.
— Vamos Dimitri debes ir al médico, te lo he dicho mil veces y tú sin hacer caso.
— Ya basta mamá, te he dicho que solo son dolores de cabeza normal.
— Normales no son, te la pasas así todo el tiempo. Así que hoy vamos a médico y sin chistiar.
— Mamá ya no soy un niño pequeño.
— Para mi sigues siendo mi hijo, así que te espero en el lobi del hotel y ya está hablado.
Dimitri salió del estudio molesto había ido a el hotel de su madre, para hablar de otras cosas y ella le salió con visitar al médico.
— Hey porque andas molesto hermano.
— Como si no lo supieras mamá quiere llevarme al médico como si fuera un niño pequeño.
— Bueno que te puedo decir sabes que mamá es así ella nunca se le lleva la contraria.
— Deja de fastidiarme y dime qué hay con John donde está, necesito hablar con el.
— Tengo días que no lo veo, de seguro anda por allí con sus amigos.
— Está bien cuando lo veas le dices que necesito hablar con el sobre algo importante.
— Claro hermanito, la niñera tiene a Irina dijo que iba al parque con rato con ella, que por favor vaya por ellas dijo ella.
— Está bien ya me voy a buscar a mi hija.
Mientras en aquel parque estaba la niñera con la pequeña, de pronto salió de un arbusto un perrito. Y Irina se fue detrás de el y más atrás la niñera.
— Vamos Irina es hora, tu padre estará pronto por llegar.
La niña seguía al perrito hasta que llegó al lado de una hermosa mujer, ella era Anya. Cuando ve a la niña y el perrito se sorprendió mucho, aquella pequeña se dijo que era igual a su hija.
— Hola qué haces.
— Mami... —fueron las palabras de la niña que le partio el corazón a Anya.
— Vamos pequeña no soy tu madre, donde están tus padres.
En ese momento llegó la niñera y le dice.
— Disculpe señora, la pequeña es muy traviesa y se vino detras del perrito.
— No se preocupe, y bueno debería tener un poco más de cuidado.
— Lo sé señora, pero está niña es un vendaval. Muy interactiva vamos Irina tu padre estará por llegar al estacionamiento para irnos a casa.
— Mami, mami no me dejes.
La niña agarró la mano de Anya fuerte, no quería que la dejara ir con aquella mujer. Entoces Anya se puso al nivel de la niña y le dice.
— Vamos pequeña debes irte con ella, te llevará donde tú papi y tú mamá.
— No quiero quedarme contigo mami.
— Vamos pequeña, si quieres yo te llevo con tu padre si no quieres ir con ella.
La niñera le dice, ya resignada.
— Si Irina, la señora nos acompañara, así que vamos.
La pequeña brinco se la felicidad de que Anya, la tomará de nuevo por la mano y la llevara al estacionamiento del parque. Cuando ya estaban allí, Anya le dice a la pequeña que tenía que irse.
— No... Noooo quiero a mami.
— Vamos linda tu padre viene por ti no te pongas así, es mejor que te vayas.
— Mami...
— Ya mi linda, anda con ella no a tu niñera y debe de cuidarte, y tú padre viene por ti.
La niña se pone a llorar con desespero, y gritar que ella era su mami. Anya seguía caminando lejos de ella y la niñera. Cuando la niña se suelta de la mano de la niñera y sale corriendo a donde está Anya. Está la abraza y la acaricia cuando la alza en sus brazos.
— Vamos linda tu padre viene por ti, tienes que ir con la niñera ella es tu cuidadora.
— No quiero, quiero estar contigo.
— Vamos haces algo muy bonito, me quedaré a esperar a tu padre contigo para que te sientas más cómodas que me dice.
— Está bien, pero eres mi mami.
— Bueno solo hasta que llegue tu padre, eres mi hija.
Las tres estaban allí esperando a que llegara Dimitri. Anya no sabía que la pequeña era la hija que el le había hablado. Cuando a acerca un auto negro y dale de allí Dimitri. La niña suelta la mano de Anya y corre donde estaba su padre.
— Papi encontré a mami, mami...
— Que estás diciendo Irina, cual mami.
Cuando Dimitri mira a donde estaba la niñera este dice.
— Vayaaa...
Entoces deja a la pequeña en el suelo y se va acercando a las mujeres. Y al mirar a Anya dice.
— Hola Mia, que haces aquí.
— Como estás Dimitri, estaba en el parque un rato y vi...
— Señor usted sabe cómo es su hija de traviesa, fue detrás de un cachorrito y se encontró con esta amable señora.
— La niña llegó a mi lado, estaba jugando con un perrito y se ha encariñado contigo.