Capítulo1

- Me despertó una llamada telefónica.

- Kira, hola.

- Hola Alice, ¿qué pasa? - Pregunté con voz soñolienta.

- Oh, te desperté. Oh, lo siento.

- Pedido urgente. El jefe me obligó a escribir dos artículos, de lo contrario me amenazó con privarme del premio. Todos se fueron de vacaciones. Eso es lo que escribí a medianoche. —dije bostezando—.

- Tu jefe sigue siendo un bastardo. Te estropea todas las fiestas.

- "Todo el mundo tiene una familia y tú eres libre". Este es su argumento. Suspiré profundamente.

- No entiendo por qué lo aguantas tanto tiempo.

- Generalmente es bueno, pero a veces hay saltos, sobre todo en vacaciones.

-Claro. - se rió un amigo - Te llamo para recordarte que tengo una boda mañana.

- Recuerdo, por supuesto, que todavía no había trabajado del todo. —respondí, conteniendo un profundo suspiro—. ¡Boda para el Año Nuevo! Era necesario pensar en tal cosa.

—Seguro que vendrás mañana, ¿verdad?

- Por supuesto que lo haré. Volvió a bostezar.

- Entonces, ¡serás dama de honor! —dijo Alicia solemnemente—.

-¿Qué? "Me desperté al instante y me senté en la cama.

- Bueno, por favor. Verás, Christina está enferma, ¡solo tú puedes salvarme!

- ¿Cómo te lo imaginas? No me preparé de ninguna manera. Ni siquiera tengo vestido. Pensé que vendría en pantalón y blusa. ¿Quizás encuentres a alguien más?

- ¿En un día? ¡No es real! Y tienes un día para prepararte.

-Bien, gracias.

- Kira, si no me ayudas, mi boda se arruinará. Al otro lado del teléfono, comenzaron a lloriquear.

-Bueno. Trataré de no defraudarte. Dije con voz alentadora. "Todo estará bien, no hurgues. Porque mañana habrá ojos hinchados.

- Gracias, gracias, gracias. Mañana a las seis y media te estoy esperando. Su voz se iluminó de inmediato.

-Hasta mañana.

Me recosté en las almohadas y me cubrí con una manta. ¡Qué horror! Mañana es el día de Año Nuevo. Es imposible ir a la peluquería a arreglarse el pelo, hay registros de un mes, o incluso más. Al menos las tiendas están funcionando, tal vez al menos compre un vestido apropiado. Pensé en tumbarme hoy, ver películas de Año Nuevo, relajarme. Y mañana en la boda para sentarnos unas horas e irnos a casa. Ahora tienes que inventar un discurso, ser el centro de atención y participar en concursos ridículos. Eso es lo que más no me gustó.