Buscando a mi madre

Capítulo 26: ¡Es urgente!

 


 

-----Narra Mulan-----

 

Estoy en la cocina de mi futuro esposo Jun, haciéndome una sopa wantán, mi preferida para cuando estoy melancólica, mientras, escucho la música de k-pop lo mejor para llorar.

 

Estoy lavando los platos del día anterior y cantando a todo pulmón, con llanto y mocos sueltos, extraño a mi niña, me da tanto miedo que esté yendo a otro país sola, porque Isabella es alguien tan irresponsable en ella no se puede confiar, las lágrimas no me dejan ver, así que me limpio con mi hombro, la taza de vidrio que está en mis manos se cae al suelo y un dolor en mi corazón me dice que algo malo sucedió, ese presentimiento que tenía desde temprano lo siento como si me quemara el pecho. 

 

Recojo todos los pedazos de vidrios. Apago la música y continuo limpiando la cocina. Luego de haber terminado, me dirijo al cuarto que comparto con Jun, necesito darme un baño con agua tibia, me siento muy tensa.

 

Después de varios minutos metida en el baño, salgo y me pongo un Jean a las caderas y una chaqueta marrón dentro de un rato, debo ir a buscar algunas cosas que se me quedaron en la casa del señor Oliver, me recuesto en la cama y coloco una serie coreana, siempre cuando me siento algo preocupada, esto me ayuda a despejar la mente. 

 

Estaba tan concentrada en el dorama, que no me había dado cuenta de que el teléfono estaba sonando, en la pantalla dice “mi amorcito”. Jun me está llamando, espero que no haya pasado nada malo, todavía no se me quita este presentimiento que tengo. 

 

—¡Hola amor! ¿Cuéntame, qué tal tu día? ¿Por qué lloras? Habla con calma, no entiendo lo que dices. —Pregunto.

 

—¿Cómo así?, ¿qué le pasó a la niña?

 

—¿cómo que tuvo un accidente? Ya mismo salga para allá. —Grito con el corazón en la garganta.

 

Le cuelgo a Jun, tomo mi cartera y salgo al hospital. No entiendo nada de lo que me dijo Jun. Jazmín debería estar a esta hora montada en el avión, ya son las 4 de la tarde. Es imposible que haya estado en un accidente, ¿será verdad o estará confundido? Pido un taxi, yo no poseo un auto y tampoco sé cómo manejar. 

 

—Buenas tardes, por favor, ¡lléveme al hospital Kaiser, lo más rápido que pueda! — Exclamo al taxista mientras me acomodo en el asiento.

 

—Como usted mande, señorita. — Responde el hombre, mientras maneja como loco.

 

En 10 minutos llegamos, me bajo del taxi, le pago al hombre y salgo corriendo, paso por la entrada de emergencia y preguntó por el doctor Jun Wu. Me dejan esperando aproximadamente 10 minutos, luego escucho una voz conocida.

 

—Món âme sœur, gracias por venir, acaban de llegar con Jazmín y enseguida la llevaron al quirófano. —Expresa rápidamente, él siempre lo hace cuando está asustado.

 

—Jun, explicarme ¿qué pasó con la niña? —Pregunto asustada, las manos y la voz me tiemblan.

 

—La niña nos mintió a todos, se iba para China y Oliver la descubrió, así que mandó a sus escoltas por ella y en la autopista ocurrió el accidente, realmente ¡no sé por qué ocurrió el accidente! —Habla Jun con la voz quebrada.

 

— Y ¿cómo está ella? —Pregunto con dificultad, mientras coloco una mano en mi boca y empiezo a comerme mis uñas.

 

—Acaban de hacerle la revisión. Y tiene una fractura en el fémur. —Murmura casi sin voz.

 

—Oh Dios, no lo puedo creer, pobrecita mi niña, ¿Oliver, dónde está? —Digo mientras lo veo a sus ojos, no puedo creer lo que está pasando, siempre que tengo un mal presentimiento, algo pasa.

 

—Vamos al piso donde se esté realizando la cirugía, Oliver se encuentra allí. —Concluye Jun tomando una bocanada de aire.

 

Llegamos al piso 2, hay están los quirófanos y entramos a la sala de espera, veo al señor Oliver sentado con la cabeza agachada, le aprieto su hombro y él toma mi mano, me siento a su lado y le doy un abrazo.

 

—Gracias Mulan, por estar aquí, por nunca dejar sola a mi niña. —Comenta Oliver, una lágrima cae por su rostro.

 

—No se preocupe, señor Oliver, ella es una hija para mí. Pero por favor ¿Cuénteme qué sucedió?

 

—Todo esto es culpa mía. No debí dejarla ir a ese maldito aeropuerto. —Dice él mientras se golpea la frente.

 

—No maldiga, por favor. —Le digo mientras resoplo y hago una mueca de fastidio, no me gusta, que las personas maldigan, eso me incomoda.

 

—Disculpa Mulan, yo sé, que eso no te gusta, pero tengo una rabia. —Expresa rascándose la cabeza.

 

—Si es normal que esté así, pero tranquilo todo va a salir bien. —Siempre hay que ser optimista.

 

Me levanto y me siento al lado de Jun, está muy triste, no deja de llorar. Me duele tanto verlo así, pero ¡no entiendo por qué le ha pegado tan fuerte lo que le sucedió a Jazmín!, lo abrazó y le empiezo a dar palmada en su espalda, después de una hora de esperar a que alguien nos diera alguna información sale un doctor. Jun y yo nos levantamos rápidamente. Y más atrás se acerca Oliver.

 

—Amigo, ¿cómo salió la operación? ¿Cómo está mi niña? —Pregunta Jun casi sin aire, está tan angustiado.

 

—Ella está bien, la operación fue todo un éxito. Tuvimos que hacerle una incisión en el lado de la cadera para permitir el acceso a la parte superior del fémur y poder colocar la varilla, no fue nada fácil, pero todo salió bien. El problema es que ella perdió mucha sangre y necesitamos un donante, pero su tipo de sangre es O negativo y no tenemos ese tipo de sangre en el hospital. —Dice con calma y serenidad, al doctor ya lo he visto en varias ocasiones, su nombre es Richard.

 

—¿Necesita un donante O negativo? —Pregunta Oliver preocupado y algo desorientado.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.