Buscando a mi madre

Capítulo 46: Por favor no me mate

--------Narra Narrador---------

Jazmín en el aeropuerto se despide por teléfono de su secretario, el cual está muy triste, por no acompañar a su jefa, sus empleados más cercanos piensan que Jazmín va a China a abrir la sucursal, pero solo Isabella sabe la verdad.

El avión ha despegado, Jazmín siente mucha felicidad y una gran emoción, razón de que dentro de poco volverá a ver su mamá, eso es lo que ella cree, lo que ella no sabe es que en China el pobre detective la está pasando muy mal.

***************

China 15 de julio 2021

En un bonito hotel de la ciudad de Shanghái, el hombre canoso recibe un mensaje de su jefa. Él tiene una carpeta que no deja de ver, no puede procesar lo que ha descubierto y sabe que esta información vale oro.

En su computadora está terminando de guardar la información que descubrió de Jia Wu, la mamá de Jazmín. El hombre revisa el teléfono y ve el mensaje:

*Francisco voy saliendo, por favor reserva una habitación en el mismo hotel que tú estás, y mañana a las nueve de la noche me buscas en el aeropuerto, a esa hora aproximadamente estaré llegando. No respondas porque estoy por entrar al avión. Gracias por tu apoyo.

El hombre agotado se levanta del mueble y coloca la computadora y los documentos en la mesa. Decide tomarse un baño con agua fría, ya que al pensar en lo que le tocará decirle a su jefa, se estresa mucho. Él no sabe cómo tomará Jazmín dicha información o lo mucho que le afectará enterarse de la verdad. Después de media hora sale un poco más relajado y tranquilo, gracias a que su temperatura corporal se ha regulado.

Al salir del baño ve todo en completa oscuridad, hasta el mismo baño se ha ido la luz, el hombre mayor muy confundido y con el corazón súper acelerado se acerca a pasos lentos al balcón del apartamento, su mirada va hacia los demás edificios y observa que no es un apagón, al entrar siente que la piel se le pone de gallina, una gran sombra se acerca velozmente hacia él, es un hombre alto y cuadrado el cual le hace un gancho con su propio brazo, el miedo se apodera del anciano, cuando va a gritar por ayuda, otra persona con la contextura más gruesa sale de la oscuridad.

El pobre hombre no distingue si hay más personas ocultas, su corazón está por estallar, él es una persona mayor que no debería de pasar por un susto como este.

—Si gritas, te corto la lengua. —Dice el hombre corpulento.

— ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué es lo que quieren conmigo? —Pregunta asustado Don Francisco, en tan solo un susurro.

—Me gusta que seas obediente. Lo que somos ya lo sabes, queremos, que no reveles nada sobre la mujer que has estado investigando. —Comunica el hombre en frente de él con dureza, mientras el otro le sostiene el brazo detrás de su espalda.

— ¿Ella los mandó? Su hija merece saber la verdad, lleva 20 años que no la ve. Por favor no me pidan eso.

—Todavía no es el momento. Eres un buen investigador, felicidades, veo que eres bueno en las computadoras y un extraordinario hacker. —Dice una mujer aplaudiendo, mientras sale de las sombras, ella destapa su cara y es la persona que el hombre imagina.

—Porque me hace esto, yo solo quiero ayudar a su hija. —Habla el hombre seguro de que es ella aunque no la ve con claridad.

—Has encontrado mucha información secreta de mí, ¡estoy sorprendida!, sabes que esta información es confidencial, nadie debe saber dónde estoy, mucho menos mi hija, ella puede correr mucho peligro si se entera de la verdad. —Dice ella mientras prende la computadora busca el archivo y lo elimina, toma los papeles y los guarda en su cintura.

—Señora, lo lamento, yo solo hacía mi trabajo. Por favor no me mate. —Tartamudea el hombre mayor, con lágrimas en sus ojos.

—Escorpión ¡SUÉLTALO! —Exclama la mujer al hombre alto y cuadrado—. Él se va a portar bien. ¿Verdad? —Dice la mujer al canoso, mientras este se soba su brazo—. Necesito que desaparezca por lo menos por un año, hasta que yo termine mi última misión. —Comenta la mujer.

—Sí, señora —responde el Investigador, uno de los hombres vuelve a colocar la luz en el apartamento.

—Aquí tienes un pasaporte nuevo y el boleto, dentro de tres horas, sales directo a tu nueva vida. —Pronuncia la mujer con firmeza.

— ¿Pero para Roma? —Pregunta el anciano algo desconfiado mientras revisa el boleto.

—Sí, empaca tus cosas y no te preocupes, yo desaparezco toda información de ti, ni en las cámaras del aeropuerto te van a poder encontrar. En Roma te van a estar esperando, vas a vivir en mi casa hasta el día que yo vuelva. —Puntualiza la mujer mientras me observa.

—Sí señora. —Concluye el hombre triste, ya que no volverá a ver a su hija y nieto.

En media hora el hombre se retira del edificio directo al aeropuerto. El hombre sale de China con sus pocas pertenencias. En Roma debe ocultarse de todo, para no meterse en más problemas. Pasado diez horas, él llega a la casa de Jia, él se encuentra solo y triste, hasta que un rayito de luz llega a su habitación, una niña de ocho años, muy hermosa lo saluda, y eso lo hace sentir feliz. Por lo menos estará acompañado en este año.

**********

Jazmín ha llegado a China, su detective debería de estar en la sala de embarque, pero nada que ella lo ve, hay una gran multitud de personas que esperan a sus familiares o amigos, pero entre estos no está quien ella busca, con la mirada seria y cansada decide esperar.

Por varios minutos permanece en el lugar sin moverse, al ver a todos irse, ella empieza a preocuparse, decide comprar una línea telefónica y llamar a don Francisco.

-------Narra Jazmín---------

Me parece muy extraño que don Francisco no me haya buscado, y lo peor es que no me acuerdo el nombre del hotel donde se encuentra él, llamo y llamo a su número y no me cae la llamada. Tendré que pasar la noche en otro hotel.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.