—¿No lo entiendes? Yo no puedo tener hijos - Gritó llorando- Después de la última noche juntos, un mes después me enteré de que estaba embarazada de nuevo y lo perdí, yo no puedo tener hijos -Declaró llorando-
-Eso no puede ser verdad -Habló sorprendido, envolviéndola con sus brazos- Lo siento mucho mi amor.
<<Flashback>>
-Buenas noches -Saludó Sky entrando a su casa- ¿Paso algo? -Preguntó extrañada al encontrarse aún con la señora que le ayudaba en su casa-
-Buenas noches, no nada solo que el señor llegó hace un par de minutos y me quedé por si necesitaba algo. -Le respondió tomando su abrigo-
-Está bien, ya puedes irte.
-Gracias, que descanses.
-Tú también, ve con cuidado de que está empezando a nevar. -Le advirtió antes de subir a la segunda planta-
Mijaíl, había vuelto, seguro se dio cuenta que era un error separarse amándose tanto, pensó emocionada, hacía tres días que se había ido, pero no se llevó nada.
-Jaíl -Lo llamó entrando a la habitación- ¡Regresaste! -Exclamó cuando lo vio parado en la puerta del vestidor- Que bueno que regresaste -Dijo alegremente acercándose a él con una gran sonrisa-
-Regrese solo por mis cosas, tengo que irme a Moscú mañana. -Le dijo serio-
- ¡Oh! Pensé que venias hablar conmigo, Mijaíl, no podemos separarnos, yo te amo. -Declaró tomando una de las manos del ruso-
-También te amo, pero no puedo vivir contigo.
-Claro que sí, podemos superar esto los dos, sé que te duele por que perdimos a nuestro hijo, pero podemos superarlo juntos. -Habló Sky, abrazándolo-
-No, no puedo...
-Por favor, Jaíl, por favor - Pidió aferrándose a él-
-Lo siento, Moya.... -Lo interrumpió besándolo, por supuesto el ruso no opuso mucha resistencia y la tomo por la cintura como siempre lo hacía-
-Has como que aún me amas, luego puedes marcharte -Susurró entre el beso, antes de profundizarlo-
Las manos de Mijaíl recorrieron todo su cuerpo mientras caminaban hasta la cama, donde la deposito con cuidado.
-Quítate esto -Pidió Sky dejando sus labios tirando de su camisa-
Mijaíl, volvió a besarla, antes de incorporarse y sacarse toda la ropa, para luego volver a su lado y volverla a besar. En un par de segundos la ropa de Sky, había desaparecido de su cuerpo y se encontraba regada por toda la habitación, los labios del ruso bajaron por su cuello hasta el comienzo de sus tetas dejando un camino húmedo de besos, antes de adueñarse de uno de sus pezones, lamiéndolo con delicadeza antes de darle paso a sus dientes.
-Jaíl... -Gimió Sky, y él amaba como lo llamaba-
Dejo sus pezones, para bajar por su abdomen, lamiendo cada centímetro de su suave piel, dibujado figuras con su lengua en su monte de venus, antes de bajar hasta sus pliegues húmedos y saborearlos, su lengua se detiene en su inflamado botón, haciendo presión sobre él, arrancándole una serie de gemidos.
-Oh Dios...Jaíl... Voy...dios.... Más... -Gimió mientras la lengua del ruso no daba tregua a su clítoris y las caderas de Sky se movían al mismo ritmo que su lengua- Jaíl.... - Lo llamó en un gemido al momento de correrse-
Dejo sus pliegues dando una última lamida antes de regresar de nuevo por su cuerpo hasta sus labios robándole el poco oxigeno que le quedaba en los pulmones.
- ¿Estas bien, dikiy zver' (Fiera)? -Preguntó besando su cuello-
-Si -Respondio con voz apenas audible- Te amo, jaíl. -Habló acariciando su espalda y mirándolo a los ojos-
-YA lyublyu tebya moya dusha (Te amo mi alma) -Confirmó volviendo a tomar sus labios de forma lenta, mientras entraba lentamente en ella-
La embistió de forma lenta, mientras sus lenguas bailaban al mismo ritmo, era un beso lleno amor, como siempre habían sido, desde el primer día que se besaron, sabía que ella era su alma gemela, su media naranja, el otro extremo de su hilo rojo. Aumento la embestida al tiempo que el beso se hacía más pasional, más salvaje.
-Jaíl...más... Voy... Dios... - Gimió dejando sus labios, echando la cabeza hacia atrás, aruñando su espalda-
Las caderas del ruso se encendieron arremetiendo con más fuerzas contra ella, estocadas fuertes y profunda, haciéndola gemir alto su nombre como si de un ensalmo se tratada.
-Jaíl... Jaíl... Jaíl... Mas... Jaíl... -Gimió Sky, corriendose mordiendo su barbilla-
Unas estocadas más y Mijaíl se corrió dentro de ella con violencia podía sentir su liquido caliente mezclándose con el de ella, beso su cuello para luego succionar con fuerza dejándole una marca.
-YA lyublyu tebya moya dusha -Susurró sobre su piel, por última vez Mijaíl-
-Ti amo, anima mía (Te amo, mi alma) -Correspondió Sky, en italiano que era de lo poco que había aprendido en Italia y solo se lo decía a él después de hacer el amor-
Volvió a besarla, una y otra vez, pasaron toda la noche haciendo el amor, hasta que ambos cayeron en brazos de Morfeo. Mijaíl fue el primero que despertó, con cuidado salió de la cama para no despertarla, se dio un rápido baño se vistió y terminó la maleta con las cosas más importantes.
-Te amo, mi hermosa fiera -Susurró antes de besar su frente y salir de la habitación y de su vida-
(...)
<<Un mes después>>
- ¿Que pasa contigo, Sky? -Preguntó su mamá cuando la vio bostezar por cuarta vez en menos de diez minutos-
- ¿De qué hablas, mamá? -Inquirió volviendo a bostezar-
-Que es la quinta vez que bostezas en menos de diez minutos ¿Estás durmiendo bien?
-Si, de hecho, en cuanto toco la almohada caigo en brazos de Morfeo.
- ¿Segura? ¿No estarás deprimida porque Mijaíl, se fue?
-Estoy triste, pero cuando recapacite va a volver, él es mi hogar y yo el de él, así que volverá. - Dijo convencida-
Tal vez, solo se estaba engañando y Mijaíl, no volvería, sobre todo después de haberla dejado sin despedirse, después de hacer el amor toda la noche, pero no perdía la fe.