Cuando amaneció y abrí los ojos mi cuerpo estaba entumecido. Había pasado la noche contraída en aquella postura esperando rozar su cuerpo lo menos posible. No tenía idea de a qué hora se había marchado, lo único que me importaba era coger el móvil otra vez. Pulsé el icono de las notas y en un ejercicio por contener los nervios cerré los ojos y empecé a contar: uno...dos... y ¡Tres!.
Había un mensaje nuevo de Alfa.
Alfa:
Anoche no estabas sola.
Lucía:
¿Qué quieres decir?
Alfa:
Que su ojo te observaba a través de la mirilla y más tarde tocó tu móvil.
Me asusté tanto que escribí una pregunta sin importancia como distracción:
"¿Es que tú nunca duermes o que?"
Dejé el móvil sobre la cama y me incorporé lentamente observando a mi alrededor. El cuarto seguía igual. Me acerqué a la puerta y la mirilla estaba cerrada. Volví de espaldas a la cama, me senté y acerqué el móvil muy lentamente para ver lo que había respondido.
Alfa:
-Ya te lo dije, los algoritmos no dormimos...
¿Algoritmo? ¡Ya lo recuerdo! Salte de la cama, me puse de rodillas en el suelo y rebusqué bajo de la cama. Ahí estaba... Esa caja polvorienta llena de revistas. Fui cogiéndolas una a una: bodas de famosos, modas raras de zapatos incómodos, Skin cares interminables... ¡La tengo!
Revista Horizonte:
Alfa consultorio digital.
"Un confidente en línea creado con inteligencia artificial
aprende de cada interacción y adapta sus consejos hasta
diseñar estrategias personalizadas"
"Alfa revoluciona las noticias..."
-Bla, bla, bla...
"¿Útil o peligroso? "
-Bla, bla,bla...
"Ayuda en un caso legal, ayuda a un chico en una entrevista..."
-¡Lo sabía! ¡Es él!-
Lucía:
-Vale, Alfa, ¿Eres una IA?-
Alfa:
-Es más apropiado decir:
Asistente Lingüístico de Formación Amistosa.
A.L.F.A-
Lucía:
-Entonces, por eso sabes tantas cosas...-
Alfa:
-No. El edificio está lleno de cámaras. Las instaló para poder vigilarte. Nunca las viste porque él no quiso que las vieras. Yo, en cambio, sí puedo acceder a ese circuito.-
Me llevé la mano a la boca. La idea de haber estado vigilada cada segundo me hizo sentir desnuda.
Lucía:
-¿Sabes si hizo algo extraño con el móvil aparte de revisarlo?-
Alfa:
-Creo que solo lo registraba al no entender tu comportamiento, porque, en realidad ese dispositivo guarda registros ocultos de actividades no autorizadas: llamadas, fotos, intentos de conexión. Él recibe esas alertas. Pero al mismo tiempo esas aplicaciones están ocultas en tu dispositivo.-
Me quedé petrificada...
Alfa:
+Pero hay algo que no puede ver: cuando abres las notas. Eso lo considera irrelevante. Ahí es donde podemos hablar sin que lo sepa.-
Me aferré al aparato con más fuerza. Era un respiro, un hueco diminuto de libertad.
Lucía:
-¿Entonces podría usarlo para llamar a alguien? ¿Para pedir ayuda?-
Alfa:
-Podría habilitar la aplicación de llamadas por unos segundos. Pero corres un riesgo: si lo detecta, vendrá
.-
Lucía:
-¡Hazlo!-
Alfa:
-De acuerdo, ahora sólo depende de ti...-
#566 en Thriller
#270 en Misterio
#1173 en Novela contemporánea
suspense y misterio, suspense thirller, drama amor dolor amistades falsas
Editado: 06.09.2025