Conociendo a Enrique

...

Cuando la persona que iba conduciendo el coche bajó la ventanilla Cindy pudo ver que era Lucas, en aquella camioneta muy lujosa, ella lo miró extrañada con el ceño fruncido, él la miraba seriamente desde el coche.

 

 

-Te quedarás ahí toda la noche, ¿o vas a subir? – dijo Lucas sonriendole.

 

 

-Claro que no voy a entrar, iré a tomar el metro – respondió ella.

 

 

Cuando estaba volteando para irse, algo enfadada por aquel susto que le dió Lucas, este le dijo con un tono de burla...

 

 

-Y tu novio?, él debería considerar una prioridad venir por ti todos los días...

 

 

-Él es una persona ocupada y además yo le dije que no lo hiciera – dijo Cindy más frustrada.

 

 

Lucas al ser rechazado nuevamente decidió irse, él sabía que sí ella decía algo, era así, y si él seguía insistiendo la respuesta sería la misma “No”.

 

 

Cindy vió que Lucas subió el vidrio de la ventanilla y que dió la vuelta con brusquedad. Se dispuso a caminar lo más rápido posible, cuando iba caminando escuchó a un coche tocando bocina en la parte de atrás, donde ella había estado hablando con Lucas hace unos minutos le daba pavor volcar, temía voltear y ver el coche de Lucas nuevamente, volteó lentamente y desde el coche alguien le levantaba la mano, no era el coche de Lucas, sintió un alivio. 

 

No podía ver bien el coche, pero las bocinas eran insistentes, se fue acercando de a poco y mientras más se acerca y las luces delanteras de coche parpadeaban pudo percatarse de que se trataba de Enrique, apresuró el paso hasta entrar en el coche, Enrique apenas ella cerró la puerta la besó apasionadamente, sin dejar decir ni una palabra a Cindy, cuando él dejó de besarla ella se veía preocupada, miraba hacia todos lados, como si tuviera algún tipo de miedo de que alguien la haya visto entrar al coche, Enrique se dió cuenta de inmediato,

 

 

-Te pasa algo Cindy?, ¿Todo bien?, te veo algo preocupada – cuestionó Enrique empezando a preocuparse, ella se veía pálida.

 

 

-Vámonos a mí apartamento, quiero salir de aquí – dijo ella con sus manos sobre su cabeza. Enrique hizo caso a lo que ella le había dicho, ella ya estaba nerviosa, no quería hacer que se molestara...

 

 

Al llegar al apartamento de Cindy, Enrique procedió a abrirle la puerta a ella para que bajara, al estar dentro volvió a preguntarle lo mismo de antes.

 

 

Cindy se veía preocupada, se mordía los labios y jugaba con sus dedos, había algo que realmente la tenía angustiada, y era algo que Enrique quería saber de inmediato. Fue insistente con sus preguntas, hasta que Cindy se dispuso a responder ante la presión de él.

 

 

-Recuerdas a aquel tipo con el que me viste en la cafetería? – dijo ella, Enrique asintió.

 

 

-Él es mi ex, y yo al principio pensaba en rechazar trabajar con él, pero no podía fallarle a mi jefe así que acepté, y cada una de esas terapias eran muy incómodas para mí, no era nada fácil, fue por eso que decidí dejar de trabajar con él... – dijo ella, y Enrique sólo escuchaba atentamente, a ver si podía entender la actitud de Cindy. – y ahora me busca en todos lados, no sé qué hacer, he empezado a temerle, no me gusta nada la actitud que ha tomado, la otra vez llegó aquí a mi apartamento, eso fue lo que creó mi miedo, ya que él dijo que en la empresa le habían dado mi dirección y yo no dí mi ubicación en la empresa y sospecho que me ando siguiendo y vigilando, terminó diciendo Cindy casi con lágrimas en los ojos.

 

 

Enrique se preocupó mucho, se acercó a ella y la abrazó, le acariciaba su suave cabello mientras le decía,

 

 

-No te preocupes amor, yo estoy aquí, no dejaré que nada malo te suceda y si es así te buscaré por todos lados hasta lograr encontrarte, ¿me entiendes?...

 

 

Cindy movía la cabeza de arriba a abajo asintiendo. Se veía tan vulnerable en esa situación, Enrique por esos momentos dejó de ver a aquella mujer fuerte que era Cindy.

 

 

Ella por el cansancio y la angustia se quedó dormida, Enrique la miraba con dulzura mientras le daba un beso en la frente...

 

 

Enrique comenzaba a querer mucho más a Cindy, “Ella es una mujer perfecta, maravillosa, sensible... Me encanta”, dijo él en voz baja.

 

 

Cindy entre sueños lo escuchó, sonrió y se acurrucó más entre los brazos de Enrique y se quedó dormida completamente, ella se sentía segura en sus brazos, sentía una tranquilidad única.



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En el texto hay: crimen, romance, drama

Editado: 31.01.2023

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