Conociendo a Enrique

Capítulo veintitrés

Elena le sobó suavemente la mejilla a Enrique, y trató de besarlo, pero Enrique se levantó del lugar en donde se encontraba y se dirigió hasta la puerta.

 

 

 

-Esto no está bien, sabes que estoy con Cindy y ella no se merece esto...

 

 

 

-Lo sé y no te imaginas como me duele eso, fue un grave error haberte dejado Enrique – respondió Elena bajando la mirada nuevamente...

 

 

 

-Creo que lo mejor será que le pidas ayuda a otra persona, yo ya no puedo, temo a que esta situación se salga de mis manos. Por favor ya no me llames, ni me busques Elena... – esto último sonó muy frío, y él lo sabía, pero si no le aclaraba las cosas a Elena ella seguiría con lo mismo.

 

 

 

Sin decir nada y sin esperar a que ella dijera algo se retiró del apartamento.

 

 

 

Elena en cambio, se quedó paralizada, lo tuvo tan cerca pero tan cerca...

 

 

 

(...)

 

 

Carlos estaba limpiando un poco la casa de su amigo (Enrique), que otra vez había tomado ese aspecto desagradable, Enrique se preocupaba por otras cosas y no por su propia casa.

 

 

 

Él escuchó un coche, vió por las cámaras de seguridad que apuntaban hacia el portón principal y se trataba de Enrique que estaba llegando, Carlos aún estaba molesto con él, así que volvió a hacer lo que estaba haciendo como si nada.

 

 

 

Enrique al entrar lo miró extrañado.

-¿Qué haces limpiando?, deberías ir a tu casa a descansar Carlos. – reprochó Enrique.

 

 

 

Carlos lo miró con una expresión de aburrimiento por la falta de gratitud por parte de su amigo.

 

 

 

-Un gracias no estaría nada mal. – respondió. - ¿siempre tienes que ser desagradecido con los demás después de discutir con alguien? – reprochó molesto Carlos.

 

 

 

-¿Discutir?, y tú como sabes si discutí o no con alguien? – preguntó frunciendo el ceño.

 

 

 

-No trates de engañarme te conozco perfectamente y se que tuviste una disputa con esa arpía. – dijo entrecruzando los brazos como para demostrar que él tenía razón.

 

 

 

Enrique dejó escapar un resoplo, Carlos tenía razón.

 

 

 

-Yo... Yo le dije a Elena que ya no me buscara más, hoy trató de besarme, - dijo mirando fijamente a Carlos para ver sus expresiones faciales, y sí, al oír que Elena trató de besarlo, él sobresaltó los ojos. – pero... Obviamente yo no lo permití. – terminó.

 

 

 

Enrique pudo ver la calma nuevamente en el rostro de Carlos.

 

 

 

-Qué bueno que la hayas detenido, esa mujer anda inventato cosas para acercarse a ti, y a toda costa, debes darte cuenta Enrique – dijo Carlos.

 

 

 

Enrique no estaba de acuerdo con él, “tal vez Elena sólo trata de sentirse amada o protegida”, pensaba él.

-Iré a descansar un momento junto a Cindy , si? – le dijo Enrique. - ¿sigue en casa, cierto? – preguntó.

 

 

 

Carlos negó con la cabeza.

 

 

 

-¿Qué?, pero si no he tardado mucho tiempo... – reprochó Enrique.

 

 

 

-Ella se fue hace unos pocos minutos, ah y por cierto, dijo que la llamaras cuando hayas llegado aquí. – le comunicó Carlos.

 

 

 

-Oh sí claro, iré a llamarla. – respondió Enrique dirigiéndose a su habitación...

 

 

 

Le marcó a Cindy, el teléfono sonó tres veces y ella no contestaba, volvió a insistir y nada, intentó una vez más y ella respondió.

 

 

-¿Hola?

 

 

-Hola querida, acabo de llegar a casa y ya no te encontré, Carlos me dijo que ya te habías ido... – contestó Enrique.

 

 

 

-Así es, tengo unos pendientes, tal vez vaya a visitarte mañana por la mañana – dijo ella.

 

 

 

-Claro – respondió él.

 

 

 

-Bueno acabo de llegar a mi apartamento, tengo que dejarte, cuidate te amo. – dijo ella y seguidamente colgó el móvil.

 

 

 

Enrique se quedó en la línea, pensando en aquel “te amo”, que venía de la persona que estaba empezando a amar también.

 

 

 

-“Yo también te amo” – respondió en voz baja.

 

 

 

Enrique se recostó en su cama y se quedó dormido, Carlos subió para despedirse e irse a empezar con el nuevo trabajo que Enrique le había dado, pero al verlo ahí dormido tan plácidamente, no quizo despertarlo...

 

 

 

(...)

 

 

Cindy estaba entrando al hotel en donde se quedaba, a lo lejos Lucas la estaba espiando desde su coche esperando la oportunidad para poder emboscarla.

 

 

 

Después de un tiempo Carlos llegó a la puerta del hotel, bien vestido, (con traje de gala, para ser más claros), Lucas también lo vió pero como no lo conocía aún, no le tomó mucha importancia.

 

 

 

Lucas no sabía que estaba frente a la persona a la cual había amenazado, y con respecto a Carlos... Él si notó la presencia de Lucas, pero actuó como si no lo hubiera visto, para no levantar sospecha alguna.

 

 

 

Carlos lo conocía por la foto que había visto de él cuando contestó el móvil de Cindy.

 

 

 

Habían altas probabilidades de que esto acabara en una gran discusión, pero Carlos estaría ahí para proteger a Cindy a como de lugar.

 

 

 

Carlos entró y le preguntó al recepcionista si se encontraba la Srta. James, a lo cual este respondió que sí, Carlos le dijo que quería verla.

 

 

 

El recepcionista le dijo que le avisaría a Cindy, a lo cual Carlos respondió que no, que quería visitarla de sorpresa. Pero el muchacho de recepción no tenía permitido dejar entrar a alguien así como si nada.



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En el texto hay: crimen, romance, drama

Editado: 31.01.2023

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