Conociendo a Enrique

...

Iban los tres en el coche, Carlos definitivamente los había salvado de esa estremecedora situación, nadie decía ni una sola palabra, estaban atónitos...

 

 

 

(...)

 

 

Mientras tanto Lucas y sus hombres aún seguían afuera, ellos estaban a punto de entrar, tal y como lo dedujo Carlos.

 

 

 

Por suerte éste les había avisado a tiempo... En el momento que ellos estaban por salir por la puerta trasera, entraron los hombres de Lucas, dos de sus hombres entraron por delante y fueron directamente hacia el recepcionista, y este vió a Lucas con una enorme sonrisa en su rostro y sintió mucho miedo.

 

 

 

-¿Lo ves? – dijo Lucas con sarcasmo – te dije que esto no se quedaría así.

 

 

 

El muchacho no decía nada, no podía creer lo que le estaba pasando...

 

 

 

-Ahora, si no te molesta, iré a buscar a mi futura esposa – dijo Lucas soltando una carcajada.

 

 

 

Al recepcionista no le dió tiempo ni para poder llamar a los guardias, y Lucas pasó sin permiso hacia donde se encontraban las habitaciones.

 

 

 

Cuando Lucas estaba ya parado frente a la puerta de Cindy, respiró hondo y tocó la puerta delicadamente.

 

 

 

Tocó un par de veces y nada, nadie le respondía ni nada. Esto hizo que Lucas perdiera la cordura muy fácilmente, así que llamó a otros de sus hombres para que subieran, y cuando sus hombres llegaron les dijo que violentaran la puerta, esto hizo que los vecinos de Cindy se alarmaran por tanto ruido, y ellos al salir vieron a Lucas y sus hombres.

 

 

 

Lucas les hizo una seña llevándose el dedo índice frente a sus labios, como diciéndoles que se quedarán callados y volvieran a sus habitaciones o que si no tendrían problemas.

 

 

 

Los vecinos también con miedo de que les pasara algo, se volvieron a entrar a sus respectivas piezas.

 

 

 

Los hombres tumbaron la puerta y Lucas se dispuso a entrar, le pidió a los hombres que revisaran el lugar, pero no había nadie, ni Cindy, ni Enrique, y Lucas no se explicaba como habían podido escapar, o quién les había avisado... No pudo haber sido el de recepción, porque lo habían agarrado desprevenido, pensó.

 

 

“Definitivamente tuvo que ser alguien que se encontraba vigilando desde afuera”, se dijo Lucas en voz baja.

 

 

 

Se puso más nervioso y de nuevo le entró la ira y de tanta rabia golpeó una de las paredes con ambas manos, la impotencia lo había consumido...

 

 

 

(...)

 

 

Cuando por fin alguien se dispuso a hablar Carlos dijo:

 

-Creo que deberíamos ir a la policía, esto no se puede quedar así, imaginate que hubiera pasado si yo no hubiera estado por ahí, la suerte de ustedes sería otra, para mí que Lucas iba a tratar de raptarte y no quiero ni imaginarme lo que hubiera pasado con Enrique – Carlos habló despavorido, se podía escuchar el miedo en sus palabras...

 

 

 

-Lo sé y te lo agradezco mucho Carlos, ahora debemos ir a poner la denuncia a la policía... – comentó Enrique.

 

 

 

-¿Y tú que hacías por ahí Carlos? – preguntó Cindy intrigada, Carlos y Enrique en ese momento sobresaltaron los ojos, ambos se miraron y ésto le pareció más sospechoso a Cindy.

 

 

 

- Yo estaba de pasada ya que había ido a visitar a mi hermana que vive cerca del hotel donde te hospedas, y vi que Lucas estaba frente al edificio con otros hombres y se veían peligrosos, así que le avisé a Enrique ya que él me dijo que estaría contigo. – respondió Carlos, con una sonrisa incómoda.

 

 

 

Esta respuesta le pareció algo convincente a ella, pero la actitud de nerviosismo que tenían ambos, hacía que la versión de Carlos pareciera mentira.

 

 

-Está bien – respondió Cindy.

 

 

Llegaron hasta la estación de policía y pusieron la denuncia, y al salir no sabían para donde ir, así que Enrique sugirió ir a la casa de sus padres, ya que se encontraba un poco apartada de la ciudad, y ahí tendrían algo de paz por unas horas.

 

 

 

A Cindy esa idea no le gustó para nada, ya que sabía que ella no le agradaba a su madre, pero Enrique tenía razón, ahí estarían apartados de la ciudad y descansarían de las persecuciones de Lucas por unas horas.

 

 

 

Carlos les dijo que fueran ellos solos, ya que él no quería ser una molestia, y Enrique le dijo que no era para nada una molestia, y quería que él los acompañara, entonces así fue, los tres se dirigieron a la mansión de los padres de Enrique...

 

 

 

Mientras tanto Lucas ya se iba retirando del lugar, dándole unas pequeñas indicaciones al recepcionista antes de irse de ahí...

 

 

 

Luego de eso se marchó del edificio, el recepcionista vió como tres coches negros aceleraron con fuerza.



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En el texto hay: crimen, romance, drama

Editado: 31.01.2023

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