Capítulo 45

Carter

—¿Nervioso? —cuestionó Derek

Siento las piernas temblorosas al mirar a través de aquel cristal los diferentes aviones disponibles en el aeropuerto. 

Nunca esperé que Sebastián y la policía de Kiwiah City solicitarán mi regreso para dar una declaración de los hechos. Todo el tiempo creía que estaría viviendo en elextranjero hasta nuevo aviso indefinido, sé que capturar a los criminales pertenecientes de la cereza es complicado porque son personas con un poder económico ilimitado.

Estoy a un segundo de soltar una mentira piadosa, pero prometí ser honesto con el señor Ashford no merece recibir más mentiras en su vida después de conocer la verdadera historia familiar.

—Señor Ashford, lo estoy —respondí

Colocó su mano sobre mi cintura e intentó brindar apoyo moral ante la situación. Realmente, estoy nervioso porque tengo miles de enemigos esperando una oportunidad de tener mi cabeza en su pared.

—Seré un mentiroso si uso la frase cliché, “todo está bien” —comentó Derek—. No debe preocuparse saldrá el resultado que esté destinado.

Increíble, el señor Ashford transmite nerviosismo. Ambos nos encontramos nerviosos porque sentimos incertidumbre ante una situación que no tenemos información concreta, aún me preocupa encontrarme con el detective Heredia, ya que, tenemos una pésima relación.

—Me encanta su honestidad —dije

Es extraño hallar a un hombre sincero en los momentos de crisis, Derek demostraba ser una excepción su caballerosidad, amabilidad y educación que fueron enseñadas lo han convertido en una persona buena que puede resultar fácil de manipular dependiendo de las circunstancias.

—¿A dónde iremos primero? —preguntó Derek

Dudó en recorrer aquella ciudad pequeña  donde viví momentos difíciles, todavía no me siento preparado para caminar con libertad por las calles, tengo gente esperando con malas intenciones y no quiero volver a ser una víctima hasta que mi seguridad esté garantizada.

—No lo sé, aún no me siento seguro —repliqué—. Puedo invitarlo a cenar o ver una película en casa.

—Es una estupenda idea —dijo 

Hubo un momento de silencio que se volvió insoportable, por lo tanto, desconocía que tema de conversación tener a pesar de que, Derek es mi novio a veces se me agotan las ideas de temas, y es cuando terminó mudo sin mencionar una sola palabra provocando una incomodidad.

Al contrario, Derek tomó mi mano dejando el silencio entre los dos, me gusta que no intentará involucrar a situaciones que fueran desagradables y aceptaba la opinión que proporcionó del momento.

—Una disculpa por interrumpir su momento cursi, pero necesitamos subir a nuestro avión —pidió Deborah

—No arruinaste nada —dije

—Estamos tan distraídos que no medimos el tiempo —dijo Derek

🍁🍁🍁

Las siguientes doce horas de vuelo fueron estresantes no dejaba de pensar en todo lo que haré al aterrizar e inclusive estaba a punto de consultarle a una gitana del asiento de enfrente una lectura de cartas intentando adivinar el futuro que me depara a partir de que ponga un pie en tierras mexicanas.

Siento una ligera tensión por sentir una curiosidad de tener las novedades de Sebastián, he escuchado rumores entre la policía española y mexicana que han estado haciendo operativos para detener a los líderes criminales de la cereza en cada continente puesto que, han estado moviendo sus actividades ilícitas paulatinamente a otra parte del mundo.

—Pasajeros con destino a Kiwiah City favor de abrochar su cinturón de seguridad estamos a cinco minutos de aterrizar —comentó un piloto

Y volver de nuevo a Kiwiah City me causa ansiedad por el futuro incierto. Siempre he sido una persona que le gusta tener un control en cada acción de su vida dejándose llevar por las circunstancias e intento no pensar en ello sino que toda la estabilidad conseguida durante la terapia terminará yéndose a la basura todo el trabajo duro hecho durante estos meses.

Lo que me preocupa son las palabras que usará el juez que atenderá el caso y siento que no tendré las palabras adecuadas para defender mis derechos al sentirme indefenso. 

En el pasado permití humillaciones e insultos que fui incapaz de poner un límite adecuado cuando ocurrió la situación legal que me ha perseguido por años. No cometí ningún crimen de asesinato, además no encaja con el perfil criminal obtenido durante la adolescencia.

—Carter, hemos llegado —dijo Derek

Parpadeo repetidamente para regresar a la realidad que me rodea. Miro a mi alrededor y todos los pasajeros han bajado del avión a excepción de nosotros por haberme quedado pensando en el limbo.

—Lo siento, estoy nervioso —repliqué

Derek me dedicó una sonrisa y extendió su mano para que pueda levantarme de aquel asiento con las piernas temblorosas.

—Es normal solamente intenta mantener la calma —dijo Derek—. Ambos estaremos bien y después podremos mirar una obra de teatro.

El señor Ashford no pierde su encanto masculino que toda chica adora al proponer citas recreativas sin caer en borracheras ni directo a la acción, Derek se toma la molestia de invitarme a una salida cultural que estoy encantado en aceptar después de que termine toda la miseria que vivo.