Crónicas de un amor imposible

Polos opuestos

 

— ¡Oh por Dios! Puedes ya bajarte de esa nube por favor — decía Sergio indignado — no entiendes que la diferencia de las clases sociales entre ustedes es abismal —

— Quizás tengas razón, pero no puedo renunciar a este sentimiento. Y haré todo lo humanamente posible para vencer cualquier obstáculo, con tal de estar a su lado —

— Pero es que una relación así tiene todo en contra, la familia no lo aceptará, mucho menos la sociedad y lo único que lograrás será llenarte de sufrimiento —

— Puedes pensar lo que tú quieras y seguir hablando hasta el cansancio, pero ya te lo dije, no voy a renunciar a este amor y lucharé hasta la muerte si es necesario para poder estar juntos para siempre —

Ella era una mujer extremadamente hermosa, de sublime belleza, su rostro angelical y su divino cuerpo de musa celestial, hacía que cualquier hombre cayera rendido a sus pies. Su mirada hipnotizaba y su dulce voz, hacía caer como en un encantamiento a aquellos que la escuchaban, sin importar si era hombre o mujer.

Sus padres, empresarios adinerados en exceso, más que cualquier otra familia en Costa Rica, tienen una casa en extremo lujosa en Escazú, el lugar más caro del país, que cuenta con doce habitaciones, quince baños, tres piscinas, sala de juegos, un pequeño cine y una cocina que casi parece un lujoso restaurante. Tanto es el lujo y las comodidades que poseen los residentes de Escazú, qué se le conoce como el “Beverly Hills de Costa Rica.”

Dueños del Grupo Financiero Spread, qué a su vez es dueño de diversas empresas en el país. Y aunque no tienen relación alguna con la farándula, constantemente aparecían en las noticias o al menos se les mencionaba en ellas, debido a asuntos corporativos de sus empresas. Incluyendo a su preciosa hija Katie James.

Por lo que eran muy conocidos en gran parte del territorio nacional, tanto por familias adineradas como por otras no tanto.

Por otro lado, él era todo lo opuesto a ella, aunque no en apariencia física, pues era un joven apuesto y fornido, aunque no tenía clase, preparación académica.. Eso sí, muy trabajador, responsable y bueno para luchar.

Creciendo bajo la tutela de padres en extrema pobreza, o más bien en el seno de una familia bastante numerosa, por lo que se era difícil de mantener. Su padre tenía que trabajar duras y largas jornadas en una empresa de construcción, para poder apenas suplir las necesidades de su hogar.

Analizando la situación con total sinceridad, nadie jamás en la vida, habría pensado que una pareja tan dispareja terminarían por encontrar lo que todo el mundo sueña, un final feliz con la persona que siempre has soñado. Pero para llegar hasta ahí, tuvieron que pasar muchas cosas y superar muchos obstáculos que les quiero relatar.

Pero antes me gustaría hablarles un poco más acerca de ellos.

Katie James, con tan solo 16 años de edad ya estaba ganando gran popularidad a nivel nacional, debido a la clase social de sus padres y la influencia que estos ejercían sobre los medios de comunicación.

Katherine María James Olsen, ese es su nombre completo, pero de cariño le dicen Katie James o Katie a secas, nació el 16 de marzo de 1981 en el Hospital Cima San José.

Pero desde muy temprana edad demostró ser una niña superdotada, acerca de sus estudios, desde que inició en primaria, sobresalía en todas las materias, por lo qué sus padres, Frederick James Chapman e Isabella Olsen Maldonado, siendo personas acaudaladas y dueños de una de las empresas multinacionales más prestigiosas de Costa Rica, decidieron hacer todo lo que estuviera a su alcance para darle a su hija la mejor preparación académica y apoyarla en cualquier carrera que quisiera llevar en el futuro.

Además de darle todo eso, que ya era demasiado, también la consentían bastante, pues pensaban que lo merecía, debido a su sobresaliente rendimiento académico. No había cosa que ella pudiera, que no le fuera dada.

Thiago en cambio fue criado de manera más sencilla y humilde, sus años de estudio los cursaba solo en instituciones públicas, con becas y otras ayudas que le brindaban el IMAS y FONABE. De igual manera tuvieron que hacer el resto de sus hermanos.

Sus padres, Eduardo Green Bonilla y María del Carmen Morris Lane, vivían en un barrio pobre de San Miguel de Desamparados, tenían la responsabilidad de 6 hijos, en dónde Thiago es el cuarto, el primogénito es José Eduardo, Jazmín es la segunda y el tercero es Axel Fernando, el quinto Javier y Daniela la sexta. Por lo que la situación era muy difícil.

Aunque José Eduardo y Jazmín ya habían terminado sus estudios y le ayudaban mucho a sus padres, no dejaban de ser una familia de clase muy baja en comparación con la familia de Katie James.

La primera vez que Katie James, apareció en televisión, fue en una entrevista que le hacían a sus padres. Durante esta, la periodista se dirigió un momento a la joven adolescente y comenzó a hacer preguntas e interactuar con ella también.

— ¡Guao! ¡Qué chica tan hermosa! — exclamó con gran admiración Thiago Dariel — Y su voz es bellísima, debería ir a conocerla e invitarla a salir.—

— Ja jajajaja. No me hagas reír. Y no te hagas ilusiones, no existe ni la más mínima posibilidad de que ella llegue a ser tu pareja — le responde en un tono de burla, su mejor amigo, Sergio Joel — aún suponiendo que tuvieras alguna oportunidad de acercarte a ella, jamás se fijaría en tí, la diferencia social es demasiado grande. Pensar en algo así sería como esperar que Superman viniera a salvarnos en una situación crítica.—

— Lo sé Sergio, pero tengo derecho a soñar ¿No? Con eso no le hago daño a nadie ¿Verdad? —

— Pues sí. En eso tienes razón. Mientras no te vayas a aferrar a eso y empieces a pensar que es posible todo está bien, porque si lo haces, llegará el momento en que tendrás aterrizar de nuevo y vas a ser muy, pero muy duro para ti —

— Lo sé — exclamó Thiago con ligero tono de tristeza — Pero como no enamorarse de esa hermosa voz y soñar con ella.—




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