Cuando las luces se apaguen (terminado)

CAPÍTULO DIECIOCHO – MIN HO

 

CAPÍTULO DIECIOCHO – MIN HO

“Opening Sequence”

 

Cantar es un don que tengo desde pequeño. Siempre era el protagonista que daba la nota alta en cada actuación, me gustaba pero no para utilizarlo como carrera, me gustaba muchos los números que mi vida se dedicaba a eso.

No pienso cambiarlo, para nada.

Me detengo al observar el río Han, es mi lugar favorito cuando algo se sale de control y pienso de cualquier cosa. Estoy estresado que mis papás me sigan cuestionando que tengo que tener una pareja, no aceptan que su hijo sea gay, aunque no lo soy, espero que me dejen tranquilo esperando a la persona que quiera y ame mucho durante mi vida.

Cierto, todavía no me perdono que la haya bloqueado a Daila en Flindi.

Flindi.

Flindi.

¿Qué hubiera sido de mi vida si no lo hubiera descargado?  Ya no sé que era mi vida después de ella. Tiene que utilizar ese chico que para en fiesta buscando una presa para cada noche, ya debería empezar a plantarse tener un futuro con una esposa… creo que es lo siguente después de terminar la universidad y empezar el trabajo ¿no?

Mis prioridades son simples pero complicadas: Tener una novia y presentarlas, superar a Daila y seguir con mi vida,  plantearme sueños, tener una familia, casarme… son muchos muy complicadas.

Vuelvo a casa, lo primero que hago es quitarme los zapatos y sacarme el abrigo, camino y me asusto al encontrar a mi madre con el cabello despeinado, nunca la había visto tan… desarreglada.

—Mamá, ¿Qué pasa? —digo con el corazón en el pecho

—¿Dónde está tu novia?

—No… mamá, yo…

—¿Eres gay? Tu papá no lo aceptaría pero yo… eres mi pequeño y te quiero como eres, no tienes que tener miedo de salir del armario

—No soy gay. Sólo que… —pienso decirle la verdad. Tengo una maldición que la chicas no me ven como un amigo más, cuando el timbre de la puerta suena, me apresuro en abrir mientras que mi mamá se va a su habitación. Se niega a que la vean mal vestida.

Al abrir veo que Taeyung está con botellas de soju en una bolsa y en la otra unos tapers de ramen. Lo observo por un momento y lo dejo pasar, es mi mejor después de todo.

—¿Estás bien? —pregunta dejando las bolsas en la mesita

—Mamá está aquí, no hagas bulla

—Quiero confesarte algo. Cuando conocí a tu mamá, lo primero que vino a mi mente era casarme con ella pero luego me enteré que era tu mamá y… mis ganas de ser su esposo desaparecieron, no quiero ser papá tan joven y mucho menos de mi mejor amigo.

—Cállate. Das asco

El celular vibra. Un mensaje de instagram.

—¿Quién es? —pregunta acercándose a mirar

—No sé, no conozco este perfil

—Tal vez sea una cita. Tienes una cita de una anónima

—No quiero citas

—Ok, dame esto. Yo me encargo —me quita el teléfono y se lo lleva al baño, maldita sea.

—Abre la puerta. No quiero una cita —digo bajito, no quiero que mi madre escuche eso

—Me acaba de decir tu dirección y se lo he dado. Ya viene, dice que está cerca, reza porque sea el amor de tu vida

¿El amor de mi vida? ¡Una locura!

—La que vendrá será tu cita, tu pareja y tu futuro. Lo he dicho, espero que no la malogres engañando con otra

—Yo no haría eso

—Entonces todo bien —dice saliendo del baño, —Eliminé la conversación para que no la veas, es súper guapa. Tu momento llegó.

 

☆♡☆♡☆♡

 

Ya son las diez cuando tocan la puerta. Estoy furioso con Taeyung que al momento en que lo hizo, lo boté de la casa, mientras que mi mamá me dijo que se iba a una ceremonia con unas amigas de la universidad.

Así que estoy solo de nuevo. Y algo impaciente. Pero lo bueno es que han llegado por fin.

Cuando abro la puerta, me encuentro con Silvia. ¿Silvia? ¿Ella quiere una cita?

—Silvia…

—Que bueno que seas tu casa, necesito ayuda con esto —señala las maletas. No entiendo nada

—¿Qué haces aquí?

—Ir por ti. ¿Somos amigos, no? —dice

—Si…claro que lo somos. Pero, ¿qué pasó con Daila? —digo de pronto, no pensaba que ella sería de traicionar la amistad por un chico

—Está abajo, nerviosa porque te va ver después de un mes y algo

No lo pienso dos veces y me adelanto en bajar las escaleras y efectivamente, está ahí, vestida de invierno, con el cabello amarrado y… muy linda.

—Hola —lo digo, estoy impresionado. Ella se sobresalta y me observa por fin, está roja. Pero luego viene mi duda ¿no debería estar con su novio? ¿terminaron?




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.