CAPÍTULO TREINTA y DOS – MIN HO
“_WORD”
Que alguien me explique como es amar a una persona sin llegar a la toxicidad, porque lo que yo tengo claro, es que hay varias formas de amar a una persona, a su manera pero siempre mantener el aura “amor” en nuestros corazones.
No siento obsesión. Tampoco soy tóxico con ella.
Sólo soy yo mismo frente al amor, me muestro como soy y no trato de ser alguien quien no soy. Y tener a Daila me hizo pensar así.
Al principio pensaba que tener un amor era como querer un producto que más te gusta utilizar, pensaba que conseguir a alguien para mostrarle a mi familia sería como fingir algo que no tenía precio ni valor, pero con Daila aprendí muchas cosas. Me hizo pensar en mi pasado y volver a esos recuerdos que se veían borroso y me hizo pensar en muchas cosas que me sentí bien. Nadie merece sentirse mal, nadie merece que la gente te diera hate, nadie merece que no seas feliz, nadie merece que no conozcas al amor de verdad.
Me sorprendió cuando la ví en mi puerta, Ha-neul había venido para dejarme algunas verduras de sus cosechas y me había dicho que va explorar en otros lugares de Corea, me invitó pero le dije que no y le dije que puede proponerle a Taeyang, que últimamente para en fiestas hasta el día siguiente.
Al verla me dio un vuelco al corazón, latía demasiado que dolía. Estaba contento de verla con esos ojos brilloso, con esa sonrisa que jamás quisiera quitarlo de ella. Es perfecta y lo he dicho, es un diamante puro y para mí, vale mucho tenerla a mi lado.
☆♡☆♡☆♡
Entre beso y beso terminamos en la cama, no podía pero quería. Y saben a lo que me refiero. Estaba tan liado con Daila que detuve el beso.
—No creo que sea lo correcto…
—Quiero, digo… yo, sí.
Creo que diría la mejor noche de mi vida, pero para que mentir. Fue… algo que no esperaba hacer con ella, al menos no en una noche como hoy.