CAPÍTULO TREINTA Y SEIS – DAILA
“I Think He Knows”
Han pasado dos días después del beso bajo la lluvia, ahora me encuentro cocinando con Min ho cuando me dice, no estaba preparada para escucharlo.
—¿Si vuelves a escribir? Digo, podrías volver a escribir en un diario. Todos los que tenías, había muchas cosas malas. ¿Y si vuelves a escribir una en que tengas sólo cosas bonitas? Dudo que vaya a pasar algo malo.
—Nunca lo he pensado. Voy a comprar uno, ahora vuelvo.
Voy hacia la puerta y cierro, respiro profundo y voy a una tienda cerca de la casa. Al entrar, una señora me recibe con una sonrisa en el rostro, me pregunta en coreano pero no la entiendo.
¡Diablos!
—Quiero una libreta de hojas blancas —dije en inglés pero la señora no entiende.
—Una libreta de hojas blancas, por favor —dijo un chico detrás, tenía el mismo peinado de Min ho pero era más bajo que él, —Nim (la persona mayor) no habla inglés, sólo coreano. Me llamo Lee Hyun, tengo 19 años y soy de Corea.
—Un gusto, me llamo Daila y soy de Los Ángeles, tengo 19 años… —digo sorprendida.
—¿Sabes español? —pregunta
—No… muy poco.
—A ver… que digo, ¡Joder! Eres tan linda y estoy emocionado de conocer a alguien muy buena onda. ¿Qué dije? —dice con un tono de broma
—Que tengo que aprender español y te tengo que pagar por ser mi traductor por lo que hiciste… ¿fue eso? —no entendí pero supongo que se refería a ello
—Exacto. Eso es lo quise decir —sonríe —Sé español, italiano, francés, japonés, chino, inglés y coreano, obvio.
¿Con qué persona me había cruzado? ¿Un Alien? ¿Cómo puede saber tanto idiomas?
—Estudio idiomas —dice de pronto, se acerca a la señora y dice, —Una libreta de hojas blancas y un folder transparente por favor
La señora ya tiene las cosas y le cobra al chico, que paga sin más. Espera, ¿también pagó el mío?
—No, yo pago lo mio
—Piña. Ya está pagado, toma, esto es tuyo —dice dando una pequeña libreta de hojas blancas y líneas
—Te debo, déjame pagarte.
—No, no me pagues. Hasta que nos volvamos a encontrar, te invito algo. ¿vale? Adiós —dice sin escuchar lo que quiero decir.
☆♡☆♡☆♡
—¿Alguien te ayudó? Eso es lo que estás diciendo —dice Silvia, al otro lado de línea, —Tal vez se impresionó por tu belleza pura y se fue, ¡que viva el amor!
—¡Hey! Yo tengo novio, tengo a Min ho y soy feliz con él. Además no sé que tienes, andas hablando de amor y lo bonito que podría ser cuando antes me decías que el amor es algo sobrevalorado.
—Daila, cuando me fui de Argentina fue por una ruptura, quise estudiar y olvidarme de ese imbécil, alquilé la primera habitación y jamás pensé que tendría una mejor amiga americana. Así que si yo cambié de país, también podré cambiar de pensamiento sobre el amor
—¿Por qué o quién será…? —dije observando por otro lado, no quería ser tan directa
—Por nadie, Daila. Ya ven aquí, te extraño mucho. Dormir con un chico cada noche no es lo mío pero a estar sola, prefiero eso.
—No sé si me vaya de nuevo, estoy bien por aquí…. Tú puedes venir aquí cuando quieras y hablar con Taeyang y Min ho.
—Min ho es un buen chico, si te hace daño, no dudaré en ir y mandarle todos los insultos latinos que tengo en la boca. Creo que estoy pensando en visitar a un chamán y decirle que embruje a Min ho. Una maldición, creo.
—No hagas nada, estoy bien. Debo cortar —dije sonriendo a la nada, esto es lo que quiero vivir, sin que nadie insulte a la otra persona, sin nadie que te recuerde un pasado.
—Vale, es mejor que anotes ya en tu diario. Besos, adiós —corta
Observo el lapicero y la libreta en la mesita de noche y lo agarro, dejo el celular en la cama y pienso. Tal vez estoy preparada para empezar una nueva etapa, tal vez estoy optima para rehacer con mi vida, tal vez me puedo juntar con la Daila pequeña.
Abro la libreta y quito la tapita del lapicero. Empiezo a escribir y siento que esto jamás va acabar. Escribir y leer son mis dos pasiones, mis dos hobbys en la vida.