Daniela Embarazada De Un Famoso [corrigiendo]

Capítulo 33 - La Llamada De Un Corazón.

Esperaba en uno de los pasillos del hospital, esperando los resultados de la revisión. Kevin hablaba con el doctor. 

 

- Daniela. - Escuché y mirando ví a una chica. - ¿Daniela, donde has estado?. 

 

- ¿Perdona, pero te conozco? - Le pregunté levantándome de unos de los asientos del pasillo. 

 

- Soy yo, Mía. - Se dirigió hacia mi al mismo tiempo que se me acercó. - Todos te están buscando. 

 

- Lo lamento... 

 

- ¿Pero que te ocurre?. - Me preguntó. Ella me conocía, me llamó Daniela... Daniela, como lo hizo la señora Sandra. - ¿Tú sabes quién soy?. - Pregunté mirándola. 

 

- Claro que lo se. - Me manifestó. Cuando Kevin me rodeó con sus brazos. 

 

- Nos tenemos que ir. - Me habló llevándome con él. 

 

- ¡Oye!. - Dijo Mía. - ¡Calvin te está buscando!. - Seguía diciendo y mi corazón dió un apretón, Calvin... 

 

- Kevin, ¿podemos hacerte unas preguntas para el programa?. - Se nos acercó una mujer con un micrófono. 

 

- Lo siento no responderé. - Respondió Kevin que me llevó directamente para el coche. 

 

- Con razón eres el caprichoso. - Gruñó la reportera. Fuimos rodeados por otros reporteros que nos rodearon con sus cámaras y micrófonos. Kevin me cubrió con el gorro de la sudadera que llevaba puesta. 

 

- ¡Daniela!. - Escuché de fondo a la chica, pero Kevin me hizo subir en el coche con las luces del flash. 

 

- Vámonos. - Ordenó Kevin al chofer. 

 

- Si, joven. - Contestó este y observé a Kevin. 

 

- ¿Que te a dicho esa chica?. - Me preguntó y negué. 

 

- Nada. - Mentí con el nombre de Calvin en mi cabeza. 

 

 

Una vez en la mansión me quedé mirando el jardín. 

 

- Te gustará vivir en el extranjero. - Me habló la señora Sandra que me entregó un vaso con limonada. 

 

- Gracias. - Agradecí por la bebida. - No me iré al extranjero, Kevin me prometió que... 

 

- No seas tonta, ¿que harás sola aquí?. - Me habló insistiendo luego. - Allí estarás de maravilla y no te faltará nada. 

 

- Hija. - Escuchamos a la abuela. La señora Sandra la miró. - Debemos de hablar. 

 

- Madre. Ahora me encuentro con mi... - Calló y me quedé extrañada. 

 

- ¿Con quien?. - Quise saber y ella me sonrió. 

 

- Invitada. - Respondió y caminó para la abuela. Por un momento creí que diría algo que me indicara por qué me llamó Daniela, como la chica de esta mañana. Observé el vaso con la limonada y entré en la mansión, viendo en la televisión la entrevista a un actor. Su rostro era tierno, sonreí mirándolo. 

 

- ¿Quiere decir que está enamorado, señor Calvin?. - Le preguntó la presentadora. Lo había llamado Calvin, sería acaso él quien me estaba buscando. 

 

- Si, en estos momento su familia y yo la estamos... - Decía el actor cuando se apagó la televisión, al mirar observé a Kevin con el mando en la mano. 

 

- Enciende la televisión. - Le pedí con una angustia que me apretaba en el pecho. 

 

- Será mejor que no. - Respondió. - Si lo hiciera recordarías. 

 

- Sandra. - Se escuchó a la abuela que seguía a la señora Sandra. 

 

- ¡Daniela se encuentra aquí conmigo, como te atreves a llamar a esas personas!. - Gritaba la señora Sandra entre lágrimas. Caminé pero Kevin me agarró del brazo y me giré mirándolo. 

 

- Perdona a tu madre. 

 

- Mi... Mi madre. - Pronuncié confundida, mis ojos empezaron a llorar y un fuerte dolor me dio en la cabeza. 

 

- Es su familia. - Decía la abuela molesta. - Así nunca recuperarás el amor de tus hijos. 

 

- Hija. - Me habló la señora Sandra que se me acercó cuando mis piernas me fallaron y caí al suelo, incando mis rodillas. Kevin me agarraba y aunque ella me hablaba, a mi mente empezaron a venir mis recuerdos. Me enamoré de Calvin sin darme ni cuenta y los dos traímos al mundo a una hermosa niña. Calvin consiguió ganarse el cariño de Carla. Con ella me encontré antes del accidente, mi propia madre quería alejarme de mi familia y amigos. 

 

- ¿Por qué?. - Le pregunté negando. - No te comprendo, mamá. - Dije llorando y mis ojos no dejaban de derramar lágrimas. Me solté de Kevin con brusquedad. 

 

- Solo quería tenerte conmigo, mi Daniela. - Me hablaba llorando y queriendo tocarme. 

 

- Así no se hacen las cosas. - Contesté y ella lloraba. 

 

- Lo siento, lo siento. - Era lo único que me decía y Kevin se acercó a ella agarrándola. 

 

- Madre. - Le habló levantándola del suelo. Ella solo seguía diciendo "lo siento". Me levanté secándome las lágrimas y viendo como Kevin se la llevó. 

 

- Daniela, lo lamento mucho, el comportamiento de mi nuera no a sido el adecuado. - Se disculpó la abuela. - Ella no a podido soportar la pérdida que tuvo con ustedes. 

 

- Fué ella quien se marchó. - Dije seria y la abuela asintió. 

 

- Mi hijo y ella hicieron mál las cosas. - Reconoció la abuela que me agarró las manos. - Pero ella os ama. 

 

- Lo sé. - Contesté y la abuela sonrió. Era madre y podía ponerme en sus zapatos, aunque yo nunca fuera abandonado a mi hija por Calvin ni por otra persona. 

 

 

El chofer me dejó frente al edificio. 

 

- Gracias. - Le agradecí antes de bajar del coche. El sonrió mirándome. Después bajé del vehículo y cerrando la puerta miré para la entrada, apreté el puño de mi mano no herida. Caminé entonces y me detuve al momento al encontrarme con Carla que se sorprendió. 

 

- Daniela... - Me llamó apretando el móvil en sus manos. 

 

- Hola, Carla. - Le hablé y ella se me acercó abrazándome. 



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En el texto hay: familia, romance, amor

Editado: 06.06.2021

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