Capítulo 4 ~ Atrapada.

Estoy atrapada en este cuerpo, odiaría pensar que para siempre, pero tengo esperanzas que algo cambie a mi favor, aunque siendo sincera, después de lo que hice y mi consecuencia, parece que el karma no me soltara, solo espero que no me vaya peor.

Camino hacia lo que parece ser mi salón de clases, menos mal que las clases no duran tanto como cuando llegué a estudiar en bachillerato, pues aquí solo son 5 horas y además 1 hora de comida o descanso.

Un chico muy peculiar ahora me acompaña, me extraña que Anette jamás le mencionara en el tiempo que estuvimos hablando por redes sociales, pues es muy agradable, alegre y a la vez un poco extraño.

El trato de él hacía a mí, enfocándose en que soy una chica o "señorita" me hace ver cuánto cambió todo de un día a otro, lo drástico que mi vida dio un giro y fue como retroceder en un juego y perder ciertos beneficios, así me siento hoy y quizás por un buen tiempo...

En mi cabeza resuenan algunos momentos de mi pasado, en donde insulte o denigre a alguna chica, sin mencionar mis incidentes con los abusos, es curioso, pues ahora soy una de ellas y solo estoy rezando que ningún tipo me aplique lo mismo, a fin de cuentas que ahora yo estar de este lado.

No digo que odiaría a las chicas, pero en mi pasado, cuando mi carrera inició, yo pensé que podía tenerlo todo, y lo que no obtenía lo tomaba por la fuerza; fue ese el caso de las múltiples chicas con las cuales tuve una relación, si pagué dinero porque eso jamás saliera a la luz, y vaya que lo logré muy bien, pero siempre queda alguien que revela la verdad y pues en este caso fue la prima de Anette, quien me expuso con ella.

Increíble que una chica como ella, aunque ahora ocupó su cuerpo, haya planeado algo contra mí, y yo de tonto y sin saberlo, fui a ponerle en bandeja de plata mi sentencia, pues le di acceso a magia oscura, y me terminó dejando atrapada aquí, en el cuerpo de una chica, irónico.

Tomo asiento y colocó mi mochila a mi lado. Solo observo a mi alredor, con un poco de miedo por vivir esta nueva experiencia, pues yo no conozco a nadie, solo tengo las notas que se me dejaron en mi iPhone, y es todo lo que tengo para entregar este nuevo mundo.

Mi mejor amigo, se sienta a mi lado. —Parece que otra ves alguien se dio de baja, solamente somos unos 15 alumnos, contándonos a ti y a mí. Sin duda la carrera de enfermería no es lo más solicitado en nuestra ciudad—exclama para después voltear a verme.

Yo sonrío nerviosamente. —Sí... eso parece—contestó.

Suspira. —¿Y qué hiciste ayer que no tuvimos clases, te mandé mensaje... pero creo que no te llegaron—me cuestiona. —Sospecho que me tienes restringido, perra—suelta la carcajada mientras estamos sentados

Me sorprende un poco su forma de hablarme, pero parece que hay comunicación. Aunque sí, me debe sacar unos 25 centímetros en altura... si no es que más. Algo siempre odié en mi niñez fue tener poca estatura, con el tiempo crecí demasiado y eso era lo que más me gustaba.... Pero ahora me siento como una niña pequeña, pues veo todo en en grande. Y este chico es más alto que yo, no cabe duda... desde que le miré tuve que alzar la vista para hablarle.

Yo rio. —Creo que te dejaron en restringido, porque no miré tu chat en ningún lado—alzó mis manos como si yo no supiera nada.

Agudiza su mirada después de mi respuesta. Yo solo río. —Es que la persona encargada de mi cuenta a veces hace movimientos bruscos—bromeó un poco mientras sacó mi iPhone y revisó.

Él me ve con tristeza. —¿Así es como le pagas la amistad a tu mejor amigo?—pregunta con una voz apagada.

Uno que otro alumno pasa por nuestros asientos, pues algunos comienza a tomar su lugar y colocar su mochila y sacar su laptop.

Ruedo mis ojos y rio. —No seas exagerado—contestó sin verle porque estoy buscando su chat mi Instagram, al no encontrarlo, reviso los restringidos, y en efecto ahí está. Ingresó y lo primero que hago es enviar un emoji de corazón rojo.

—Listo, fue una falla del sistema—miento mientras me salgo del chat e ingresó a mi pantalla inicial para ver lo que publican mis amigas y amigos, tengo una cantidad buena de seguidores, y también sigo a muchas personas.

Kevin me ve con incredulidad. —Sí, claro. Falla en el sistema—alega mientras ríe. —Maldita—agrega.

Mientras le escucho me saca una sonrisa,pero al mismo tiempo veo una serie de fotografías de "Jacob", pasándola súper bien, bebiendo arriba de un jet privado y mientras está escribiendo algo. Mi expresión de seriedad se hace evidente. —Sí, maldita—afirmó mientras toca la campana y escucho ingresar a la maestra que impartirá la clase, junto al resto de alumnos, algunos no los había visto, pues estaban con audífonos o tomando apuntes.

Yo sonrío a quienes me saludan, solamente me limito a vivar mi boca y devolver el saludo.

Una chica de tés morena y cabello lacio se acerca a mí, yo me muestro un poco distante cuando ella se acerca a mi rostro. Sonríe. —¿Qué te pasa?... te voy a saludar—y se acerca bruscamente para besar mi mejilla.

Supongo que esta debe ser la chica que se mencionó en las notas relacionadas a mi vida, Ivannia Gallardo, una amiga cercana de nuestra universidad.

El resto de compañeros toman asiento, y la maestra comienza a hablar del tema que quedó pendiente en la clase pasada, que fue relacionado a la inyección y cómo aplicarla.

Veo que enciende el monitor y muestra una clase de fotografías, aunque avisa que pronto en nuestras prácticas lo haremos con pacientes reales, y explica las cosas que no debemos hacer, o lastimaremos al paciente.

—Algunas personas se lo merecen—se burla un chico mientras está tomando apuntes.

Ivannia sonríe. —Te voy a picar así, a ver si te gusta, Álvaro —le contesta con una sonrisa mientras el chico se ríe.