—Karen, mueve esa caja un poco, y habrá una salida, esa salida conduce a una habitación de servicio que está cerca de las escaleras...—indica Johanna y ayuda a mover la caja.
—Vaya, este armario si me agrada—sonríe antes de entrar.
—No creí que esto fuera verdad...—dice Damián mientras intenta entrar al pasadizo. —Tu también
vendrás?—voltea a ver a Johanna.
—Sí, apresúrate.
Entran y cierra la puerta del armario, colocan la caja como estaba para cubrir la ruta y salen hacia el cuarto de limpieza, caen sobre escobas, recogedores y demás accesorios de limpieza.
—¡Vamos!—dice Johanna mientras los ayuda a levantarse.
Caminan hacia la salida, Karen pide un Uber con dirección a la clínica donde está Nicky, al mismo tiempo Johanna envía mensaje a Nataly para avisarle que encontró algo.
—Se te nota que definitivamente no has dormido—dice Damián mientras se acercan al auto.
Johanna se coloca unos lentes de sol. —¿Mejor?—pregunta antes de subirse al auto.
Dalila ríe y asiente.
Después de un largo trayecto y estar detenidos en el tráfico, finalmente llegan a la clínica. Nataly saluda a Karen y Damián.
—Gracias por venir chicos—Nataly sonríe.
—Ven vamos hablar. Ustedes—toma a Nadia y Raúl. —Quédense con mis amigos—los lleva a donde están Karen y Damián.
Johanna y Nataly se apartan de los chicos y se retiran a las escaleras. —Tengo información que creo nos ayudará a hundir aún más a Ángel, solo necesito decirle a papá que me ayude, aunque se molestara cuando se entere que me infiltre en la casa...—dice Johanna alentada porque su plan funcionó a la perfección.
—Aunque hablaste un poco rápido logre entender y descifrar lo que decían tus labios. ¿Estás hablando que Ángel asesino a una chica?..—ve la foto que lleva Johanna en su teléfono.
—Yo creo, si la chica desapareció y el tenía su foto, eran novios. Es lo más lógico... ¿no lo crees?—guarda su teléfono y guarda la laptop en la mochila.
—Habla de esto con papá, pregúntale de la chica...—suspira y jala a Johanna para regresar con los chicos.
—Hay algo más, Isabel, ella era amiga de esta chica, la chica se llamaba Danna. Tengo que contactar con Isabel y preguntarle por ella, una vez que lo haga iré con nuestro padre...—se detiene al ver que Nataly ríe. —¿Dije algo gracioso?
—Es que tú...—ríe. —Actúas como detective, que mal por la chica, al parecer llegamos literalmente después de que eso pasara, creo que sería mejor dejar esto atrás.
—Intentó ayudarnos, nos deshacemos de Ángel y ya jamás saldrá, o podemos extorsionarlo con exponer esa información y durará mucho tiempo en la cárcel... serán unas vacaciones muy largas para él...—agrega Johanna un poco molesta.
—Isabel alguna vez fue tu mejor amiga, tal vez por eso tu urgencia por ir a verla y de nuevo tener una amistad con ella... creo yo—dice Nataly mientras se acerca a dispensador de agua y toma un poco.
—No, no... bueno.. tengo intención de hablar con ella, pero me interesa más la información de su amiga y entonces cerrar todo esto—responde en un tono de confusión por lo que dijo Nataly.
Johanna se acerca a los chicos, les explica que irá a visitar a Isabella, solo necesita confirmar su dirección, Damián insiste en llevarla pero Johanna se niega. Johanna sabe la dirección, muchas cosas se mantienen como en su realidad. Pide el uber y de inmediato se dirige a casa de Isabella.
Al ingresar a la colonia le vienen antiguos recuerdos, recuerdos borrosos de su realidad.
—Llegamos a su destino—dice el chofer mientras detiene su auto frente a la casa.
Johanna se queda boquiabierta mirando la casa, pensando como todo sigue igual y nada cambio a diferencia de ellos, que ahora están en los cuerpos de dos chicas.
—¿Señorita?—inquiere el chofer al ver que Johanna no baja del auto.
Johanna de inmediato se reincorporará a la realidad y rápidamente toma su bolso. —Aquí tiene dinero... ¿cuanto fue del viaje?—dice mientras sostiene la cartera en sus manos.
El chofer la ve desconcertado. —El viaje ya está pagado—ríe. —Puede bajar, ¿esta bien?—frunce el ceño al ver su extraño comportamiento.
—Sí, sí estoy excelente—sonríe. —Gracias—baja del auto y camina hacia la casa.
"Bien, bien... espero no desmayarme por hacer esto... ¿por qué estoy nervioso?, ¿Nerviosa?"
Se acerca lentamente y toca el timbre, espera que salga la madre pero para su sorpresa es Isabella.
—Am hola... buenas tardes... ¡días! Ando algo confundida... mi he dormido y pues—ríe. —Hemos hablado algunas veces, soy Johanna, no sé si me recuerdes...—dice mientras ella está recargada en la puerta.
—Hmm ok, ok—ríe. —Más o menos te entendí. Pero si te recuerdo... dime que se te ofrece—sonríe.
—De hecho, vine hacerte unas preguntas sobre Hannya, me dijeron que tú eras muy amiga de ella, encontré información que quizás te interese...—comenta mientras muestra unas fotos que tomo de la casa de Ángel.
—Pasa Johanna...—abre la puerta y hace un ademán para que ingrese a la casa.
Rápidamente entra a la casa y pasa a la sala para sentarse.