De Nuevo Navidad

Capítulo 5

゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚ 

 

Jessica se levantó muy temprano a tomar una ducha, luego fue al cuarto de Tobías a despertarlo y prepararlo para el día. 

— Anda cariño. — Dijo mientras lo peinaba luego de hacer que el pequeño se bañara. — Voy a hacerte un desayuno riquísimo y luego venimos a arreglar tu cuarto. ¡Lo vamos a dejar hermoso! Ya verás. 

— Compraste muchas cosas. — Dijo el niño con seriedad. 

— Compré todo lo que necesitamos para que tú aprendas, te diviertas y no te aburras.  — Respondió la joven, guiñándole un ojo. 

Cuando llegaron a la cocina, Jéssica se sorprendió de encontrar ahí a Arturo, bebiendo café. El hombre estaba vestido de manera informal, con jeans y una camisa con las mangas dobladas hasta los codos, en lugar del traje de vestir y la corbata que usaba siempre en la oficina. 

— Buenos días. — Saludó él levantando la vista de su celular. 

— Buenos días. — Respondió Jéssica. — Toby, saluda a tu papá. 

El pequeño no dijo nada y bajó la vista en silencio. 

Jessi se agachó frente a él y lo tomó por los hombros. 

— Una persona bien educada, siempre responde a un saludo. — Le dijo al niño en voz baja. 

— Buenos días. — Musitó el pequeño, sin levantar la vista. 

Jessi lo besó en la mejilla y luego se levantó. 

Arturo asintió, aprobando su acción, luego habló. 

— Me temo que no hay absolutamente nada en la despensa. Así que te voy a agradecer que hagas una lista de lo que se necesite para que Tobías coma adecuadamente, iremos al supermercado a surtirnos. 

— Bien. — Asintió Jessica poniéndose a revisar los anaqueles y el refrigerador. 

— Contraté, con otra agencia, el servicio de limpieza. Vendrá gente tres días a la semana de entrada por salida, sólo a limpiar la casa. Si me haces el favor de supervisarlos te lo voy a agradecer. Tú te harás cargo de preparar la comida del niño, obviamente tu sueldo se va a incrementar con esta nueva obligación. 

— No es necesario. — Negó ella acercándose a la mesa. — No me incomoda cocinar. 

Arturo extendió hacia ella una carpeta que tenía frente a él. 

— Aquí están todos los documentos de Tobías que creo que puedes necesitar: Una copia del acta de nacimiento, la tarjeta del servicio de gastos médicos mayores, el directorio de médicos, clínicas y hospitales que proporciona la aseguradora y su cartilla de vacunación. Me temo que no tengo información sobre qué médicos lo han atendido con anterioridad, así que, por favor pídele a Blanca los datos del pediatra de su hijo y consíguele a Tobías una cita con él para una revisión general. Supongo que necesitará vitaminas, desparasitación y no sé qué más. 

— Bien, yo más tarde hablo con mamá Claus. — Asintió Jéssica. 

— Gracias. — Dijo él poniendo sobre la mesa un juego de llaves, una pequeña tarjeta y unos billetes. — Estas son las llaves de la casa, ayer hice cambiar todas las cerraduras por si Mayra o su gente se quedó con copias, en esta tarjeta está la nueva contraseña de la alarma y este es el dinero que gastaste ayer, más otra cantidad para los gastos que puedas tener con Tobías. Cada semana te asignaré la misma suma, si necesitas más dinero o cualquier otra cosa, llama a la oficina, ahí te anoté el número, si estoy ocupado dile a Adriana lo que necesites y ella se encargará.  

Se puso de pie y llevó su taza al fregadero. 

— Si están listos y no tienes ninguna pregunta, será mejor que nos vayamos de una vez. 

— Tobías no ha comido nada. — Dijo Jéssica con el ceño fruncido. 

— No hay nada en el refrigerador. — Señaló Arturo. — Ni siquiera un miserable bote de leche. Los voy a llevar a desayunar primero a algún restaurant y luego vamos de compras. ¿De acuerdo? 

Ella se giró hacia el pequeño con una gran sonrisa. 

— ¿Escuchaste Toby? ¡Vamos a ir a un restaurant a comer ricooo! ¿No te emociona eso? 

El pequeño sólo asintió con seriedad. 

 

゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚・。+☆+。・゚ 

 

Era poco más de medio día cuando regresaron a la casa cargados de bolsas y paquetes. Arturo, luego de llevarlos a desayunar a un restaurant con área infantil, le dijo a Jéssica que Tobías necesitaba más ropa, así que llevaron al niño a comprarle más pantalones, camisas y playeras, pijamas y abrigos, además de zapatos, tanto formales como zapatillas de deporte. También había insistido en comprarle un par de juegos de sábanas y un nuevo edredón. Por supuesto todo era mucho más caro y de mejor calidad de lo que le había comprado Jessica el día anterior. Pero la joven no comentó nada al respecto. 

Jessi guardó rápidamente todos los víveres en las alacenas y el refrigerador y se dirigió a la habitación de Toby, seguida por el niño llevando un rollo de bolsas negras para basura. Arturo los siguió en silencio, intrigado, llevando en sus manos las bolsas con la ropa nueva del pequeño. 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.