Destino de Sangre (libro 10. Nueva Generación)

Cap. 8 Complicaciones

 

Punta Dorada, octubre 2011

Ángelo y Kelly regresaron para gran alegría de Damila y de los chicos, porque aunque todos estaban muy felices por el matrimonio, por mucho que Giulio, Francesca y los demás, se habían esforzado por distraer a Damila, no hubo caso y ella echaba mucho de menos a la pareja.

Kelly llegó apenas con tiempo para acompañar a Damila a hacer las compras de última hora, pues en breve comenzaba la universidad, y aunque Ángelo no entendía por qué razón Giulio y Nino no se habían encargado de aquello, Enzo le hizo ver que era algo que la niña se había acostumbrado a hacer con su madre, así que cuando Nino lo había sugerido, casi resulta apaleado por Damila.

Llegó el gran día del inicio de las actividades universitarias de Damila, y de Ángelo para abajo, todos estaban casi tan emocionados como la misma Damila, de manera que el primer día de clases llevaba una exageradísima escolta, aunque ella les había dicho que no era necesario.

  • Ya no voy a la escuela, Ma  --  había dicho Damila a la hora del desayuno
  • Lo sé, pero no vas a negarme la alegría de acompañarte en tu primer día --  le dijo ella
  • Y supongo que no me lo vas a negar a mí tampoco  --  agregó Ángelo
  • De acuerdo, pero…
  • Eh, eh  --  la detuvo Giulio  --  no hay manera de que permita que mi novia llegué sin mí a su primer día de clases

Finalmente, Damila no había podido evitar que todos se apuntaran para acompañarla, pero poco antes de salir, Luigi se le acercó.

  • Yo no voy a incomodarte con mi presencia, pero promete que si necesitas cualquier cosa, y por cualquier cosa me estoy refiriendo desde un café hasta que vaya a romperle la cara a cualquier infeliz, me llamarás  --  le dijo y ella rio
  • Seguro
  • Bien, entonces buena suerte Sofía  --  dicho esto le dio la espalda para marcharse
  • ¡Ey!  --  lo detuvo ella  --  ¿Solo así? ¿No me darás un beso?
  • Me gusta la cabeza donde la tengo, niña  --  dijo él sin volverse  -- y tampoco me agrada la invasión a mi espacio personal  --  agregó y Damila volvió a reír

La relación entre Luigi y Damila era extraña, y en opinión de Hans, se correspondía con la extrañeza que era el individuo aquel. Luigi se preocupaba por todo lo concerniente a Damila, pero hablaban poco, y menos desde que el noviazgo entre ella y Giulio se había hecho efectivo. Sin embargo, Giulio había tenido que hacer un  esfuerzo enorme para no ahorcarlo, porque, aunque lo veía muy pocas veces al lado de Damila, cuando esto sucedía tenía que aguantarse, ya que la primera vez que se había metido, había tenido una horrorosa discusión con Damila que había terminado con ella lanzándole la puerta en la cara. En esa oportunidad Giulio había querido apalear a Luigi, pero Fredo intervino haciéndole ver que en realidad su primo no había hecho nada. Por lo anterior, y aunque Luigi seguía siendo el ser maligno que había sido siempre y disfrutaba horrores con la incomodidad de Giulio, por algún motivo que Hans había concluido que sería el de no causarle problemas a Damila, había limitado sus conversaciones con ella.

Antes de que salieran hacia la universidad, Ángelo llamó a Gianpaolo y el chico se preparó para una cesión de recomendaciones y amenazas, parecida a la que lo había sometido Giulio la noche pasada.

  • Fiore, no tengo ninguna queja de su desempeño, pero supongo que está usted consciente que el ambiente en el que estarán ahora es muy diferente al de la escuela, de manera que tendrá que extremar su atención
  • Sí señor  --  contestó Ginpaolo cuando él hizo silencio, pero aun agregó algo más
  • Como dije, hasta ahora estoy satisfecho con su desempeño, espero no tener motivos para cambiar de opinión  --  dicho esto le indicó que podía retirarse, pero antes de llegar a la puerta lo detuvo  --  Fiore  --  y él se giró  --  aunque usted y yo sabemos que no es así, a todos los efectos prácticos es mi hija, no lo olvide
  • No lo haré, señor  --  después de eso sí se marchó e iba pensando que en conjunto le había ido mucho mejor con Ángelo que con su sobrino

Francesca había sido matriculada en la misma universidad, pero en su caso para continuar con la carrera de Contaduría que era la que había iniciado en El Valle, y el GE de Francesca, recibió más o menos las mismas pordenes que Gianpaolo cuando fue llamado al estudio de Ángelo.

  • Tarella, recuerde que la señorita es una Rossi, y que me responde con su vida por su seguridad – le dijo Ángelo
  • Sí, señor

Al mismo tiempo y al igual que Damila, Francesca había iniciado también sus actividades en la academia de artes, y sus esfuerzos de haberse pasado todas las vacaciones ensayando con el violín, habían rendido sus frutos, pues cuando se presentó a la audición, fue admitida en la orquesta, de manera que pasaba incluso más tiempo que Damila en la academia, pues aparte de continuar con sus clases de violín, tenía ensayos con la orquesta.

A finales de octubre, Damila llegó una noche con mucho escándalo, y  aunque en líneas generales eso era lo usual, antes de pasar al comedor lograron enterarse del motivo para el alboroto de ese día.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.