Kelly había comenzado a sentirse mal a media mañana, pero siendo que no tenía idea del porqué de su malestar, concluyó con rapidez que el señor abogado estaba teniendo un mal día, y no sabía ella qué tan malo. Sin embargo, y para asegurarse, hizo las llamadas habituales comenzando por su padre. Después que lo llamó a él, habló con sus hijos y con Alejandro, pero se quedó preocupada por su padre, pues lo notó deprimido después que le dijo que estaba teniendo problemas con su última esposa, sin embargo, como no especificó qué clase de problemas, ella los dedujo con rapidez, pues aquella era una mujer más joven que ella, así que estaba de pésimo humor cuando Marino fue a llevarle café. Marino era muy discreto, pero al notar el humor de Kelly, intentó informarse de la razón, porque siendo que Ángelo no estaba en casa y era el motivo usual, quiso saber si podía ayudar. No obstante, ni él ni nadie podría, pues era un asunto que no les concernía y eso incluía a la misma Kelly, así que abandonó el estudio de ella con expresión de pena.
Aquella respuesta alarmó a Bianco, porque conociendo a Kelly, y sabiendo lo que estaba ocurriendo en el despacho de Ángelo, sacó rápidas cuentas y dedujo que tendrían un día muy difícil por donde quiera que lo viesen. Sin embargo, quiso asegurarse del estado de Kelly y entró, aunque se llevaría una sorpresa al escucharla. Si bien Bianco coincidía con Marino en líneas generales, decidió obtener más información.
Mauro se tomó un minuto para hacer una búsqueda rápida de los informes que enviaban los agentes que estaban asignados a la custodia preventiva de la familia de Kelly, y aunque ellos solo se limitaban a una vigilancia lejana, rendían informes semanales, mismos que él se apresuró a enviar a Bianco.
Bianco escuchó lo más relevante del informe, y más tarde, después que Kelly recibió a los niños, los acompañó a almorzar, y subió a su habitación cuando ellos marcharon a sus actividades habituales, él conectó su portátil y leyó el informe extendido. Aunque seguía pensando que no debían meterse en aquello, igual se propuso ir a echar un vistazo en su próximo día libre, porque en verdad la descocada aquella estaba rifándose un balazo y su suerte era que no estuviese casada con ningún miembro de aquella familia, pero quizá no se considerase tan afortunada después que Bianco conversase con ella.
Entre tanto en El Valle, Ángelo había sido trasladado con urgencia a la UM y Pavel había hecho una evaluación más a propósito, pero luego de la misma nadie estaba especialmente feliz.
Si bien ya todos los miembros del GA habían sido puestos al tanto de la situación, solo unos pocos habían visto al personaje, de manera que, con el comentario de Piero, dedujeron que debía parecerse físicamente a Luciano; lo que no sabían, era que no solo se parecía como se parecían Giulio, Silvano y Ángelo al Del Piero original como llamaban a Nicola Del Piero, sino que era como ver al mismo Luciano y no estaban exagerando ni un poco.
Cuando llegaron a Punta Dorada, ya Alessandro lo había hecho también y se alarmó mucho al ver cómo traían a Ángelo, y escuchar el informal reporte de Pavel, no colaboró en nada a su tranquilidad. Como ya Mauro había hecho llevar a Camilo a la base, éste tampoco estaba especialmente tranquilo, y tanto él como Alessandro coincidieron en que, si bien la UM estaba muy bien equipada, lo mejor era trasladar a Ángelo a la clínica, pues allí disponían de una unidad de cuidados coronarios mucho más acorde con el problema actual. Y, aunque Pavel opinaba que no era necesario pues ni estaba tan mal como él mismo había creído en un inicio, ni eso iba a poner, al temperamental sujeto, especialmente contento.