Llegamos a la casa de Hans, tire la mochila y me adentre a la habitación que él señalo, ingrese y cerré la puerta.
Antes de que Gill estuviera histérica la llame y dije que me quedaría en casa de Hans, mencione que no se preocupara y que me encontraba bien. Al colgar me derrumbarme al lado de la cama y no pude contenerme, lloré y lo maldije hasta quedarme dormida.
Al despertar me encontraba en la cama y rodeada por los brazos de Hans, me levanté rápidamente y me dirigí al baño.
Mientras me miraba al espejo y lavaba mi rostro, me sorprendí no solo por lo roja que estaba, sino también porque podría robarle el papel a la protagonista de una película de terror.
Entre tanto, detrás de la puerta se escucho
-Estas bien, iré a preparar el desayuno-
-Lo estoy, gracias por preocuparte- respondí
Al salir ya más o menos presentable alguien me tomo por detrás, era Hans no sabía cómo responder, pero sentir el calor de alguien me hacía pensar que no estaba sola, asombrada por el trato dije:
-Puedes soltarme-
-Perdón, quise verificar si de verdad estabas bien-
-Bueno, ahora si paso a retirarme, tomate tu tiempo-
Mientras él se dirigía a la cocina, yo me quede sentada en la habitación pensando en que iba hacer a partir de ahora, tendría que verlo todos los días, la maldita de Rose ahora reiría con gusto y les diría a todos…
Tenía miedo de volver hacer aquella sumisa collet que estaba poco a poco enterrando, di un golpe a la cama y me envolví en la sabana. Pronto me sumergí en mis pensamientos….
- “¡Ey!”, piensas derrumbarte ahora que has dado pasos agigantados en tu vida, puede que sea difícil y doloroso, pero no es el fin del mundo, si un imbécil se va es porque alguien mejor llega-
-Y si llega otro baboso – dije
-No seas negativa Collet, muchas veces quise derrumbarme ante tanto dolor, pero no lo hice sabes ¿Por qué?
- ¿Por qué? - le dije
A lo que él respondió – porque hay personas que si te aman y estarán para ti
-Bajemos a comer eso si nos hace bien, vamos si no te levantas te cargare hasta allá-
-Vale, vamos-
Mientras comía me acorde de la escuela
- ¡Mierda llego tarde! -
-Alístate como puedas, hay algo de ropa de una acompañante de Denovan-dijo
-No me mires así, hubo una noche que el imbécil trajo a alguien y se durmió en la habitación donde tu dormiste, bueno ambos-
-Oye tú, me hiciste dormir en donde hicieron sus porquerías-
-Por supuesto que no, cambie las sábanas, no soy tan sucio-
-Y el colchón-
- “Ummm “solo me faltaría ese-
-Basta, luego hablamos de eso, llama a Gill y dile que me alcance mis materias de hoy, dile que la esperamos en la escuela porfi-
-Ok señorita– dice con sonrisa burlona y menciona ¿Algo más?
-Espéreme en su auto, bajo en seguida-
Mientras me vestía, observaba que las prendas no estaban nada mal comparando a mi antigua ropa, había algo de maquillaje en una caja, me miré al espejo y dije:
-Hice lo mejor que pude –
Hanssen me llevo a la escuela, Gill había llegado antes que nosotros, se encontraba en la puerta principal conversando con el portero para que nos dejara ingresar y de esa manera justificar mi tardanza, aunque aun así tendría que limpiar el salón, no me importaba. Por otro lado, yo me despedía de Hanssen con un beso en la mejilla.
Al ingresar al salón el docente de Historia estaba hablando sobre el tema de historia universal acerca de los Grandes filósofos de la humanidad …… así transcurrió sus tres horas y al finalizar dejo 5 páginas del cuaderno de trabajo, algunas investigaciones y lecturas para reforzar el tema, puesto que la evolución seria la próxima semana.
Después de su clase había receso.
>> maldita sea mi suerte<< pensé
Se acercaron las 4 y me restregaron en la cara que había sido una tonta al caer en la trampa de Greg, el no cambiaría a menos que Rose se lo ordenara.
-Eso no es cierto- dijo Greg
Prácticamente me arrastro fuera del salón y me llevo a la parte trasera de la plataforma donde se realizaba educación física.
-Basta, suéltame ahora mismo-grite
-Collet escucha, no sé qué viste, pero no es cierto-
-Ayer ella me llamo para hablar sobre la conversación que tuvo con mis padres, ya que ellos le habían asegurado que no la dejaría. Además, prometió que no interferiría entre nosotros, siempre y cuando vaya antes que todos a la reunión grupal-
-Y tú le creíste-
- En su momento no, pero haría lo que fuera para que nos dejen en paz-
-Amor entiende, lo hice por nosotros-