Digimon R3

Capítulo XXVI: Juego de ajedrez

     Tres días pasó Nene en cama a causa de un resfriado.

     Lelouch la acompañaba todo el tiempo que sus deberes en el consejo estudiantil de la Ashford Academy le permitiera. La chica se sintió bastante animada el día que Milly Ashford organizó un día de campo en interiores para ir a visitarla. Incluso se presentó Shirley Fenette, quien llevó un pastel especial de doble chocolate que con cubierta de cerezas decía con letra estilizada: Mejórate pronto. Gracias a que Lelouch intervino, no se invitó a Suzaku Kururugi, pero no se pudo evitar que Kallen estuviera presente. Con todo, todo fue risas y diversión.

     A Nene le agradaban bastante los amigos de Lelouch, incluso Shirley a pesar de las miradas que le lanzaba al muchacho y la forma en la que se sonrojaba cuando Milly la descubría. A excepción de la hostilidad de Kallen y el latente peligro que representaba Suzaku, Nene se sentía tan parte del grupo que comenzó a aportar ideas para futuros eventos de la Ashford Academy. Claro que se ofendía ante la xenofobia que Nina presentaba contra los Elevens, pero no podía hacer nada al respecto y simplemente lo aceptaba.

     Nunally también participó en aquél día de campo en interiores y obsequió a todos los amigos de su hermano un pequeño Cutemon fabricado en origami. Una figura más que se sumó a la colección que Nene resguardaba en una repisa. Milly exclamó emocionada que Nunally tenía mucho talento y una gran creatividad para imaginar semejantes creaturas extrañas. La pequeña respondió que lo había logrado gracias a las descripciones de Nene y la creativa, gracias a que Lelouch dio una explicación muy convincente, resultó ser ella.

     Cuando el consejo estudiantil no estaba presente, Nunally conversaba con Nene mientras seguían fabricando figuras. La segunda noche en cama por el resfriado, la chica comenzó a leerle un libro de cuentos a Nunally. Cuando la lectura se tornó aburrida, decidió contarle su historia en el Mundo Digital, aunque todo fuera como si le estuviera relatando un cuento de ciencia ficción así que hacía breves pausas para añadirle algo más interesante a la historia, como agrandar el ejército de Taiki Kudou o decir que Kiriha Aonuma era un caballero de dorada armadura.

     Kiriha…

     Aquella misma noche, Nene no dejó de pensar en aquél muchacho. Recordó vívidamente aquél día, un año atrás, en el que dio una serie de conciertos en Japón y sus amigos estuvieron en primera fila. Tras el último concierto, Kiriha la visitó en su camerino y le dio un ramo de flores junto con una invitación.

     —¿Quisieras salir conmigo?  —le preguntó.

     Ella accedió, y pasaron una noche en extremo divertida.

     Pero estando ahí, en una habitación de la mansión Ashford, rodeada de las atenciones de Lelouch, el recuerdo de la cita con Kiriha se le antojaba demasiado distante. Ni siquiera podía recordar a ciencia cierta cuándo fue que comenzó a gustarle el muchacho rubio y cómo fue que esos pensamientos se esfumaron. Intentó recordar cada rasgo del rostro de Kiriha, pero en su mente sólo podía ver a un muchacho de ojos púrpura y cabello negro.

     Se fue a dormir aquél día, plenamente consciente de que Kiriha ya era parte de su pasado.

 

     —¿Infiltrarte en los Caballeros Negros?

     Cuando Akari mencionó aquella posibilidad durante el desayuno, todos reaccionaron mal. Zenjirou se atragantó con un trago de jugo de naranja, Tagiru casi se ahogó con un trozo de pan, Kiriha tuvo dificultades para pasar el bocado que masticaba, a Ren se le cayó el bocado de arroz que llevaba en los palillos, Ryouma se ahogaba con un trago de café y Taiki escupió un buen trago de frío jugo de manzana. Ella se hundió en su asiento cuando Shoutmon y el resto de la comitiva comenzaron con los reclamos.

     —¡Podría ser peligroso!  —decía Shoutmon.

     —¿Y si vuelven a atarte, como cuando estuvimos en la bodega?  —decía Gumdramon.

     Taiki limpió sus labios con una servilleta y se hizo el silencio cuando todos vieron la mirada seria que el muchacho le dedicaba a Akari. Ella se hundió aún más en su asiento.

     —¿Qué ganarías con unirte a Zero?  —le preguntó.

     Para todos fue imposible decir si Taiki estaba molesto, angustiado, indignado o si al menos intentaba mostrar alguna emoción.



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En el texto hay: crossover, digimon, code geass

Editado: 10.03.2019

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