Los días después de Praimfaya fueron los mas difícil de todos. La tensión entre los clanes comenzó hacerse mas fuerte. Octavia no confiaba en sí misma para gobernarlos, teme equivocarse y la comprendo. Nunca tuvo que ver por la vida de los demás sólo por la suya, pues de eso se encargaba su hermano. Desde que nació, Bellamy siempre estuvo a su lado para guiarla. Ahora sin el, se siente perdida, pero no la dejaré caer tan fácilmente en la oscuridad.
—No puedo, mi sangre es roja y siempre será roja
—Eres la campeona, nos salvaste a todos— menciona Indra entregándole los símbolos y ropajes de la comandante que O se negaba aceptar por miedo. Gaia tampoco ayudaba mucho, su fe no se lo permitía, pero según Indra era necesario para unir a los clanes.
—Sólo una comandante nos ayudará
Replicó Gaia para luego irse molesta de la sala de mando. Ya no hay comandante alguna, no una legítima al menos. Antes estuve dispuesta a ponerme la flama para unir a todos los clanes pero ahora que todos saben la procedencia de mí sangre negra nadie me seguirá, excepto Azgeda. Aún no puedo creer lo que hizo Roan, me nombró líder de la Nación Hielo.
—El tiempo de las comandantes ya pasó, ahora es tu tiempo Octavia debes guiarlos— comenté parandome al lado de Octavia, iba a estar a su lado y apoyarla en todo. Miré a Indra buscando su apoyo también, nos necesita a ambas. Sin Bellamy somos las únicas en quién O confía
—Azgeda sabe que Roan esta vivo, querrán matarme y apoderarse del bunquer
Con Octavia decidimos ocultar la información de que Roan sobrevivió al conclave hasta que pasará Praimfaya, pues no sabíamos lo que Azgeda hubiera hecho al respeto. Hicimos bien entonces pero ahora las cosas se complicaron, aún no han hecho nada pues se los ordene pero no se cuánto durará, hay quiénes me ven como una usurparadora aún cuándo fue el mismo rey Roan quién me nombró su sucesora.
—No permitiré que Azgeda te haga algo
—¿Octavia?— Kane, Jaha y Abby, junto con una Skaikru de la estación granja entraron. O los había mandado a llamar para analizar la productividad de la comida y el agua ahora que la población del bunquer había triplicado— ella es Cooper, está a cargo de la hidrogranja
—¿Por cuánto años tendremos recursos?— preguntó Octavia, pero Cooper no le respondió. Ni siquiera volteó a verla. Sólo me miraba a mí lo que me incómodo un poco e hizo enojar a Octavia, nadie la respetaba— ¡Respondeme!
—No tengo nada que hablar contigo, traidora— Jaha la hizo tranquilizarse, yo hice lo mismo con Octavia cuándo sacó su espada y le apuntó. Confío en que no sería capaz de hacerle daño pero en este momento esta muy nerviosa y que su propia gente no la apoyé en sus decisiones es duro para ella— la hidrogranja sólo resistirá dos años, felicidades campeona nos condenaste a todos
—Y la tierra se recuperará en cinco años, estamos perdidos— comentó Jaha, puede ser que meter a mil doscientas personas al bunquer fue mala idea, pero ni Octavia ni yo nos arrepentimos. Estas personas no merecían morir.
—¿Qué pasará si damos medias raciones?— pregunté mirando a Abby, nuestro cuerpo necesita la suficiente proteína para sobrevivir por cinco años, no nos queda otra opción.
—No nos gustará, pero sobreviviremos
(...)
Fui al comedor junto con Finn y Kiara, a pesar de todos los notaba tranquilos, felices de estar con vida. Jaha se sentó a nuestro lado junto con un niño de unos doce talvez trece años, hijo de uno de los skaikru que fueron sacrificados. Mi padre le prometió cuidarlo, me siento felíz por el. De alguna manera cuidar a éste niño lo ayuda a recordar a Wells.
—Hola soy Ethan, ¿eres la hija del tío Theo?— asentí mientras le sonreía, ya sabía quién era. Kiara no dejaba de hablar de él, le gusta. Pero parece que el pequeño Ethan aún no se da cuenta de eso.
—Soy Olivia y ella es mi amiga Kiara, ¿verdad que es muy hermosa?— solté una risita cuándo la pequeña rubia se sonrojo y salió rápidamente del lugar tropezándose varias veces en el camino— es algo tímida, y le gusta mucho la poesía
—¿Debo sentirme celoso?— comentó Finn también aguantándose las ganas de reír, más al ver la cara de confusión de Ethan. Los chicos son tan lentos a veces.
—¿Cómo le esta yendo a Octavia?
Preguntó Kane sentándose a nuestro lado. Negué suspirando, se niega a dirigirnos. El caos ya se presentó entre los clanes, se roban entre sí, pelean cómo sí fueran trece clanes separados bajo un mismo techo sin comprender que todos pertenecemos al mismo grupo ahora. Unificarlos no es sencillo y más cuando nuestra campeona se niega hacerlo.
—Si ella no puede, debes ser tu Olivia, has sido líder antes con los cien
—No, esos eran Bellamy y Clarke— cómo me gustaría que ellos estuvieran aquí, lo único bueno que hice por mí pueblo fue poder pactar con los terrestres, pero eso ya no tiene validez aquí.
—Pero a ti los terrestres te escucharán, Azgeda te nombró su líder
No se porque Roan hizo eso. Luego de hablar con Bellamy, Octavia tuvo la oportunidad de entrevistarse con Roan. Por lo que me contó se negaba a ir al espacio, utilizó una de las jeringas con sangre negra que habíamos dejado en la isla y ahora era un sangre negra cómo yo. Como rey de Azgeda se negaba a dejar a su pueblo, Clarke y Echo lo convencieron de irse, pero antes de eso me nombró a mi cómo su sucesora.
—¡Azgeda no me respeta! se niegan a seguirme
—Porque los rechazas, jamás te respetarán si tu no lo haces antes— me levanté molesta, yo no pedí nada de esto. No es mi culpa que no me sienta preparada, y si aún así lo aceptará ¿de que serviría?, Azgeda seguiría siendo otro clan separado del resto, no es lo que necesitamos ahora— Olivia...
—Encárguese de su pueblo, déjeme gobernar al mío a mi antojó