Los primeros años en el bunquer fueron duros pero logramos salir adelante. La delincuencia se mantenía a raya todo gracias a la idea de Octavia, luchar en el fozo de pelea. Los criminales luchaban por su vida para demostrar que pertenecen a Wonkru.
Fue una total injusticia, cada crimen era juzgado con el mismo cargo de culpabilidad. Nadie crítico el sistema por mas injusto y sanguinario qué fuera pues quién se oponía era condenado a muerte por Azgeda, principal sostenedor de la tiranía de Bloodreina.
—¿Bloodreina el vencedor gano su libertad?— pregunté mirando a mi co-líder de reojo. Las cosas estaban en manos de Octavia a la vista de todos pero casi nadie sabía que las decisiones las tomaba yo desde las sombras, excepto Indra y Gaia. Octavia sabía muy bien que una vez fuera del bunquer las cosas serían diferentes, más aún cuando Roan reclame lo que le pertenece por derecho. Por el momento tiene mi protección pero no se por cuánto tiempo lo podré sostener.
—Se salvará— gritos de júbilo retumbaban en aquel lugar. Parecía la antigua roma donde los gladiadores luchaban por su libertad y por ver quién era más fuerte.
(...)
—Tenemos un problema— mencionó Abby ingresando a la sala de mando. Me encontraba sentaba en la silla frente al escritorio mientras Octavia se miraba en el viejo espejo roto del lugar— La hidrografía comenzo a fallar, perdimos mucha comida
—¿Cuánto tiempo podemos sobrevivir?
—Sin proteínas no mucho— apenas han pasado dos años y todavía quedan tres para que la tierra sea habitable de nuevo no podemos darnos el lujo de morir cuando hemos sobrevivido tanto por llegar hasta aquí.
—Hay una fuente de proteínas, el fozo— mencionó Indra, enseguida comprend que se refería, debemos volvernos canibales para sobrevivir.
—Nos vemos en el comedor
Todos nos reunimos en el comedor. En cada plato se colocó un pedazo de carne cruda para ser digerida. Nadie quería hacerlo, lo cual es entendible pero no es una opción.
—Ellos murieron para que nosotros vivieramos— comenzó a decir Octavia mientras toma la carne en su manos y la alzó. Con temor lo dirigió a su boca pero antes de meterla a su boca la soltó y cayó de rodillas negando una y otra vez.
Miré a los demás tampoco querían comer y todo porque su líder era débil para hacerlo. Lorcan estaba muy molesto, ya habíamos tolerado la debilidad de Octavia por mucho tiempo no podíamos seguir así. Cada vez más el crimen aumenta, los conflictos entre los clanes comienzan de dislumbrarse otra vez. Si seguimos así volveremos a cómo era antes una confederación de 13 clanes autónomos sin unidad. Es hora de acomodar las cosas, de poner orden de una vez por otras por mas duras y extremas que sean las medidas.
—No... ¡No haré algo así!, Olie... No puedo
—Está bien O yo me encargaré— nunca podría obligarla hacer algo que no quisiera pero ya no se trata solo de ella. La tomé del brazo con fuerza para luego levantarla con búsquedad del suelo, esto ocasionó que la guardia personal de Bloodreina sacará sus armas al igual que Azgeda— tranquilos no le haré nada malo a su reina, come Octavia
—No... Olie ¡por favor! ¡NO!— agarré su cabello con fuerza, tiré hacía atrás su cabeza obligándole a abrir la boca y le metí la carne a la fuerza. Se resistió, intento escupirla y morderme pero hasta que no lo tragó no la deje libre.
—¡Si quieren vivir deberán comer! Honremos aquellos que dieron su vida por nosotros!— con una mirada toda Azgeda procedió a comer al igual que yo. Observé molesta a Octavia que lloraba en su asiento— ¡Te dije que nunca debés mostrar debilidad!
—Kane también se nego ¿le harás lo mismo?— su sarcasmo me dio a entender que no sentía rencor. Ella sabe muy bien que sólo con mano dura se puede mantener el orden en éste lugar.
—No, haré que ruege por más
(...)
Al día siguiente puse guardias de Azgeda en cada puerta del comedor. Octavia me había cedido su lugar en la mesa. Algunos me miraban con desconfianza pero no comentaron nada, me tienen miedo lo puedo ver. Y no es algo que me desagrade, todo lo contrario lo único que me molesta es que ella también lo siente, Kiara. Se ha apartado de mi nuevamente pero está vez no insistire, mi deber no es ella sino todo Wonkru.
—¡Me niego a comer!— al escuchar la quejosa voz de Marcus Kane me levanté de la mesa y me dirigí hacía el. Desvaine mi arco y lo apunté sin vacilar— Hazlo me harías un favor
—Se que no pondrás resistencia, pero haré que ruegues por más— tense mi arco y dispare justo en el brazo derecho de Abby. Todos me miraron con terror. Estaba atentando con la vida de nuestra propia doctora, pero nada de esto es mi culpa.
—¿¡Qué crees que haces!?— cuándo trató de ir ayudarla volví a tensar el arco y dispare en el hombro izquierdo de Indra. La guardia de Bloodreina intento hacer algo pero Octavia no se los permitió. Ni siquiera Indra se inmutó ante la flecha, ella entendía que era necesito doblegar a Kane para que los demás lo siguieran y comieran de una vez por todas— ¿¡Quieres comenzar una guerra!?
—Tú lo estas provocando yo no dígame "canciller" ¿comerá?— al ver de nuevo duda en su mirada, tense el arco y esta vez lo dirigí a Ethan. El niño de ahora catorce que Jaha había cuidado hasta su muerte, se qué lo aprecia mucho así como yo por lo que me duele tener que lastimado a el también, más cuándo se que eso ocasionará el odio de Kiara pero tuve que hacerlo no me dejo de otra.
—¡Ethan!, ¡Eres un monstruo Olivia! ¡te odio!— miré a Kiara sería. Su reacción fue la esperada sacó un arco y me apuntó a mí. Finn la detuvo antes de que disparará, pues sabía muy bien que sí lo hacía Azgeda la asesinaria.
—¿Ya eligió Kane?— seguía sin probar bocado, talvez porque cree que no soy capaz de matar a nadie. Hasta ahora solo los lastime levemente. No quería tener que llegar a esto menos enfrente de Kiara.