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Llevo días en los que las clases eran tan largas y aburridas que lo único que me apetece es que llegue sábado y así poder salir, nunca he sido de sacar dieces en mi boletín , siempre he sido de la media , pero han pasado semanas desde que vino Sasha, y no lo había vuelto a llamar ya que no entendía la razón de tener tantas ganas de verlo. Sé que me ha salvado dos veces pero me siento tranquila y completa cuando Sasha está conmigo, es extraño, pero es una conexión muy especial. 

 
Tenía que concentrarme , quedaban aún 3 semanas para las vacaciones de Navidad y no quería suspender en el boletín, así que por mucho que me apeteciera ver a Sasha esperaría un poco más y dejaré de salir para no distraerme.

Realmente yo aún no tenía claro que iba a hacer en un futuro, me cogí el bachillerato de ciencias a pesar de ser malísima en física y química pero era la que tenía más salidas profesionales , de todos modos no sé qué quiero hacer con mi vida . Mis amigos lo tiene tan claro: doctor, dibujante de cómics,diseñador, veterinario,cirujana y yo aún no tengo ni idea y eso a veces me hace sentir inútil como si no encajara en ningún lugar. Siempre he pensado que con el tiempo se me iluminaria una bombilla como en los dibujos animados y sabría que hacer con mi futuro pero eso aún no me ha ocurrido y me tiene frustrada.

-Maila,¿ todo bien?- Justin interrumpió mis pensamientos

-Si claro, pero sabes que no entiendo nada de química

-Te veías muy distraída, ya te lo sonsacaré...Ahora presta atención, o sino no te repetiré la clase-dijo sonriendo

Asentí girando los ojos e intenté escuchar al profesor.

Al salir de la clase un grupo de personas de otras clases empezaron a gritar en dirección de Justin y yo.

-Travestí asquerosa

-Tú no eres un hombre ni eres nada, zorra de mierda.

Justin me cogió del brazo y negó con la cabeza intentando detenerme pero no voy a permitir que digan esas cosas.

Me solté de su agarre suavemente

-Lo siento-dije mirándolo a los ojos- pero no me puedo quedarme sin hacer nada mientras te insultan.

Me acerqué furiosa hacia el grupo,cogí a la chica que había gritado la primera, le cogí del cuello de la camisa y le di un puñetazo en la mandíbula, ella se cayó al suelo insultándome mientras el novio de ésta me empujó y devolvió el puñetazo. Caí al suelo y me empezó a dar patadas en el estómago.

-Lesbiana repelente , deja de defender a tu novia. Ha sido la primera en salir corriendo. Date por vencida.-dijo mientras paraba de pegarme.

Sabía porque Justin había salido corriendo y lo mejor era terminar antes de que vinieran.
Me levanté.

-No es mi novia, ya que es un chico trans, en todo caso seria mi novio, dejadle en paz. Se llama Justin y no "zorra", ni asquerosa ni ninguna mierda que se te pase por la puta cabeza a ti y a tus putos amigos.

-Anda vete antes de que te metas en más líos, preciosa.

Me acerqué a él despacio mientras lo miraba a los ojos.

-¿Qué pasa ahora me vas a besar o qué?-dijo con una sonrisa socarrona.

Mientras me acercaba sonreía, hasta que lo cogí del cuello y le di un rodillazo en los huevos.

-Problemas vais a tener tú y tus amigos como os acerquéis o insultéis a Justin.- dije mientras se retorcía de dolor en el suelo. Me acerqué para susurrarle- Precioso.

El resto del grupo que había ido a socorrer a la chica del suelo, se quedaron mirando todo hasta que el chico ese cayó al suelo. Otra dos personas se dirigieron hacia mí con ganas de pegarme.

Me quedé de pie esperando a que me vinieran a golpear pero nunca llegó, ya que Lucius, Justin y Megan aparecieron.

-¿Otra vez metida en líos hermanita?-dijo Lucius mientras paraba el puñetazo que iba directo hacia mi cara.

-Bueno algo así.

-Mirad no se que habrá hecho esta macarra pero no queremos líos y tampoco creo que queráis líos con nosotros- dijo Lucius con una mirada que ponía solo a las personas que les quería meter miedo.

Los del grupo asintieron algunos con resentimiento y otros indiferentes. Y cuando mis amigos me estaban sacando a rastras de allí, se oyó la voz de la chica a la que le había pegado un puñetazo.

-La próxima vez, me aseguraré de que nadie te salve.

Megan se dio la vuelta y añadió- Esperemos que no seas tú la que se quede sola.

Sabía que era lo que me esperaba ahora, tampoco ha sido la primera vez que pasa esto , mis amigos me echarían la bronca, se enfadarían por el moratón que me quedaría en la cara y lo mismo va a pasar en cuanto llegue a casa con mis padres.