El beso de la muerte

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Al ver la mirada que puso Maila sabía lo que iba a hacer , y no había forma de detenerla , así que en cuánto empezó a pegarse con esa chica me fui corriendo a la clase de dibujo técnico a por Lucius , él sabría cómo pararla. Al llegar vi que Lucius no se sorprendió pero hizo una cara de decepción.

- ¿Estás bien Justin? -dijo Megan

- Eh...si , claro -dije mientras sonreía- la que está recibiendo una paliza por mi 

es la que no está bien creo.

Lucius me sonrió y nos pusimos en marcha hacia donde se encontraba Maila.

Después de que nos la lleváramos de ahí , ella puso mala cara.

- Sé lo que me vais a decir y tenéis razón pero es que no me parece justo que aún haya personas así en el mundo , no lo puedo evitar. Y Justin , sé que eres pacifista y que no soportas una pelea pero ellos no son como tú y para que te dejen en paz hay que hablar el único idioma que entienden.

Cómo si lo hubiéramos ensayado nos miramos todos a los ojos y nos echamos a reír.

- Ya , pero la próxima vez avísanos y así te cubrimos las espaldas -dijo Lucius-

- Si , porque ya es imposible decirte que no te metas en líos -dijo Megan entre risas-

- Vale , pararé la próxima discusión y os haré una llamada perdida ¿no te jode?-dijo Maila

- No , pero ahora en serio Maila, sabes que no me gusta que me defiendan. 

Yo solo puedo , y si decido pasar de unos orangutanes sin cerebro , espero que respetes mi decisión.

- Vale , lo siento , yo también me he comportado como un orangután.

¿Me perdonas? 

- Claramente , anda ven dame un abrazo. 

 

Al llegar a casa saludé a mis padres y subí a mi habitación. Me quité el binder y volví a la realidad. ¿Era yo el verdadero problema? Desde que tengo uso de razón me he sentido un chico aunque me llamaran de otra forma , no creo que sea tan díficil de entender. ¿De verdad es necesario tener genitales o ser estéticamente como lo que se supone que es un chico para que yo lo sea?

Me acuerdo de como se dieron cuenta mis padres de que yo no estaba a gusto con mi cuerpo. Fue a los 12 años cuando me bajó la regla y se me empezaron a desarrollar los pechos. Lo que siempre he detestado de mi cuerpo son mis pechos así que cuando comenzaron a crecer me los empecé a vendar hasta tal punto en que me rozaban y me hacían heridas , ya que solamente me quitaba las vendas al ducharme y así me las cambiaba. Llevaba 2 años haciendo aquello hasta que un día mis padres Clarke y Roman estaban en el salón y escucharon un golpe en el piso de arriba. Al subir corriendo abrieron la puerta del baño y me encontraron en el suelo , me había desmayado del dolor al intentar volverme a vendar el pecho. Cuando desperté estaba en el hospital y mis padres estaban muy preocupados y nada más abrir los ojos llamaron a la doctora.

- Hola , ¿cómo te encuentras?

- Bien , pero no sé que hago aquí.

- Te has desmayado al sufrir una gran cantidad de estrés.

- Sabes que hay otras maneras de hacer esto.

- Es que me molesta el hecho de que no me siento cómodo teniéndolas , se que suena raro pero no me siento una chica y no sabía cómo decírselo a mis padres -dije con lágrimas en los ojos-  no quiero decepcionarlos.

- Antes de que te despertaras he hablado con ellos y les he explicado todas las opciones que existen , así que por ahora me retiraré ya que tenéis de lo que hablar. Ya te he dado el alta así que cuando tengas una respuesta puedes venir.

Cuando mis padres y yo llegamos a casa me abrazaron muy fuerte llorando como nunca los había visto.

- Lo sentimos tanto , no sabíamos por lo que estabas pasando. Sabes que puedes contar con nosotros para cualquier cosa , de verdad. -dijo mi padre-

- Ahora me siento un estúpido por no haber hablado antes con vosotros sobre esto.

- No cariño , ahora mismo los que son tontos somos nosotros , deberíamos habernos dado cuenta de que estabas sufriendo tanto tú sola , digo solo. -dijo Clarke-

Los abracé de nuevo y empecé a contarles cómo me había sentido esos años.

- Sé que puede sonar extraño pero es que no me siento una chica , ya que soy un chico y no es que me haya dado cuenta ahora sino que desde siempre lo he sido , pero no he tenido las fuerzas de decirlo. Todo empeoró cuando me empezaron a crecer los pechos ya que empecé a vendármelos. 

No es que odie mi cuerpo ni tampoco es que este incómodo con él , quiero decir , no quiero hormonarme ni hacerme ninguna operación para que me reasignen el género ya que un chico no es solo unos genitales. Pero lo que si me quisiera operar son los pechos , pero tranquilos me lo pagaré yo , ahorraré y en cuánto tenga el dinero lo haré. 

Al poder decir todo lo que sentía en voz alta me sentí en paz conmigo mismo.

- De verdad que no hay palabras para definir el orgullo que sentimos al saber que nuestro pequeño haya sido tan sincero con nosotros -dijo mamá

- Por favor hijo , no vuelvas a ocultarnos nada , y no es necesario que te lo pagues tú. Ahorraremos y en cuánto podamos pagarte la operación lo harás -dijo mi padre

Yo negué con la cabeza - No , es algo que quiero hacer por mi mismo.

- Hablando sobre eso , la doctora nos ha mencionado que podemos comprar un binder para que puedas estar más cómodo por ahora. -dijo mi madre 

- Vale -asentí mientras sonreía- Si no es mucho pedir , ¿me podéis llamar Justin?

Ellos asintieron.

- Por supuesto Justin -dijo mi madre 

- Pero puede que nos sea díficil al principio llamarte Justin , pedimos que no te enfades , porque nosotros llevamos 14 años llamándote de la manera equivocada - dijo Roman 

Y en un revoltijo de mocos, lágrimas y confesiones , mis padres comprendieron y me aceptaron tal y como soy.

Volviendo al día de hoy , si mis padres que me vieron nacer , crecer y pensar que era otra persona me han aceptado , el resto del mundo que ni me conoce ¿por qué les cuesta tanto entender quién soy?



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En el texto hay: amor imposible, lgbt, tragica

Editado: 20.09.2020

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