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Tiempo después la pobreza llegó a nuestro hogar, yo trabajaba en un circo y eso no me alcanzaba ya para sostener las nesecidades,como Emma había perdido su trabajo se fue a trabajar conmigo también y en el circo encontró un puesto, ella solo animaba o presentaba los espectáculos, a mi parecer no lo hacía tan mal y me parecía genial que ella estuviera en el circo, lo malo era que con ese sueldo no le alcanzaba para nada, y como si la maldita vida le pusiera ese destino, Freddy mi compañero (éramos trapecistas) decidió renunciar debido a problemas de salud, lo cual dejó esa bacante libre, y sin dudarlo, cuando Emma lo supo, tuvo una charla con el dueño del establecimiento ( nuestro jefe) y así ella se quedó con el puesto de Freddy,ella estaba feliz por haberlo conseguido,pero yo no quería que ella hiciera eso
Ella insistió tanto todo el dia que me convenció. Y por eso me maldigo hasta hoy, maldigo al estúpido de Juan por no haber pensado en ella si no solo en su bienestar y el dinero
Un día viernes teníamos una presentación, mi esposa había practicado un poco o al menos eso decía, antes de la presentación decidió irse a maquillar, yo también me fui a arreglarme, después de un momento, desde mi camerino escuché su canto ( el cual nunca había escuchado),su voz era angelical, cantaba hermoso, quedé sorprendido…era como que su voz me traía de vuelta los lindos recuerdos,donde ella siempre estuvo
Terminé de arreglarme y Salí del camerino,ella salía del suyo también y cuando la miré ya me di cuenta que la podía describir casi perfectamente, miré a sus ojos, ellos eran honestos, me hacían sentir en calma, me daban paz, su sonrisa era como la de una madre, esposa y una amiga, era una sonrisa que me daba la bienvenida, me hacía sentir vivo, en su cabello llevaba un moño de color blanco, el cual quedaba perfecto con su cabello negro, en sus mejillas y mentón había hecho alguna especie de rayas, y en su nariz un circulo de color rojo, además encima de sus cejas unos triángulos de color negro, sin maquillaje o con él era la mujer perfecta,al menos para mi
Me miró y con una cálida sonrisa me dijo:
Agarró mi mano y cantando esa canción me llevo hacia los columpios, esperando a que llegue nuestro turno, esperamos sentados en los filos de cada extremo,yo tenía miedo,pero en el otro lado Emma sonreía como si nada,estaba totalmente despreocupada.Cuando el grito de uno de los encargados nos hizo ponernos de pie
Subimos en los aparatos, en el momento de dar el salto,en tan solo en el primer vuelo sentí como el aparato que nos sostenía se descolgó y nos mandó a volar.
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Editado: 20.03.2019