1
LONDRES, INGLATERRA.
Bien, el piloto anunció que estaban a punto de aterrizar. El corazón de Raven comenzó a latir enloquecido, sus nervios estaban comenzando a aflorar; había estado tranquila durante el largo vuelo, repasando una y otra vez el plan. Pero ahora ya estaba allí, no había marcha atrás tenía que hacerlo. Así que trató de calmar su respiración y de tener pensamientos positivos. Era de madrugada y todo estaba helado, rogaba porque el 《pequeño atolondrado》 estuviera esperándola en el aeropuerto.
Apenas las puertas se abrieron pudo divisar esa cabellera naranja sobresaliendo entre todos los presentes, el ahora 《enorme atolondrado》 estaba allí y como si hubiera sido necesario, se puso de pie para que ella lo viera. Raven le sonrió mientras él se acercaba.
—Bienvenida, Maggie —dijo él mientras tomaba su equipaje.
—Gracias, Brian. Respeta el protocolo, soy Raven.
—Ok, lo haré ¿cómo fue el vuelo?
—Genial ¿Tú cómo estás?
—Más tranquilo ahora que estás aquí —dijo él con una sonrisa.
—¿Aseguraste la dirección?
—Sí, vamos al auto y hablaremos en la casa. El clima está horrible.
—Bien, vamos.
2
Podía verse a simple vista la belleza del lugar, aun en una noche tan fría y nublada, Londres era encantadora y Raven estaba fascinada por estar allí, aunque el motivo de su visita no hubiera sido el más grato. La fachada de la casa era preciosa, como todas las de la cuadra. Tenía una ubicación estratégicamente conveniente para el plan.
Apenas entraron, echó un vistazo y quedó maravillada, era un hermoso y cálido lugar.
El interior era amplio, y con varias habitaciones. Definitivamente los numerosos Collins y ella estarían cómodos allí.
Thunder llevó las maletas de Raven hasta su habitación, ella lo siguió.
—¿Te gusta?, Puedes cambiarla por la del final del pasillo si quieres. Luego que llegue Bunny, no te permitirá hacerlo.
—Esta habitación es genial, gracias. No estaré tanto tiempo aquí — dijo algo seria.
—Ojalá estas vacaciones se dieran bajo otras circunstancias — dijo Thunder afligido.
—Quizás la próxima —dijo ella, con una sonrisa.
—¿Estás segura de lo que vamos a hacer?
—Así es. Debo hacerlo —aseguró—. Tú puedes retractarte.
—Sabes que no haré eso. Cuentas conmigo —dijo él y sonrió tiernamente.
—Gracias, grandote… eres el mejor —lo abrazó — ahora a descansar, mañana haremos inteligencia.
—¡Eso es algo complicado para mí! —bromeó él —. Pero lo intentaré. Te veo por la mañana —caminó hacia la salida.
—¡Oh, Brian!, aguarda —dijo ella. Él se detuvo justo en la puerta y la miró.
—Dime.
—¿Qué hay de las naranjas?
—No te preocupes, hay suficientes.
—Ok, gracias— dijo ella y le sonrió.
—Y recuerda, soy Thunder, no rompas el protocolo —bromeó y salió de allí cerrando la puerta.
Raven sonrió por eso, se recostó en la cama mirando el techo y dejó salir un suspiro lleno de preocupación. Tenía que seguir adelante, aunque lamentaba tener que involucrar a Thunder en todo aquello. Se quedó dormida entre pensamientos y recuerdos sobre su hermano.
3
Soñaba con un día de verano, el sol iluminaba todo el lugar y podía sentir el calor abrasador sobre su piel. Caminaba por un prado de césped verde, había un gran sendero delimitado por árboles. Era un lugar conocido para ella, tenía la sensación de haber estado allí antes, definitivamente era algún lugar en Wayne o algún otro sitio cercano; a excepción de esta vez en Londres, ella jamás había salido de Nebraska. Escuchaba a una muchacha cantar a lo lejos, y a medida que continuaba caminando aquella melodía se hacía más fuerte y comenzaba a distinguir la letra de la canción, era Itsy Bitsy araña, le pareció un poco infantil, ya que a juzgar por el timbre de voz no se trataba de una niña pequeña. Sintió curiosidad y apresuró el paso, estando un poco más cerca escuchó reír a un muchacho y pudo reconocer aquella carcajada inmediatamente, era su hermano Charlie; así que corrió hacia el lugar y atravesó los árboles. Pocos metros más lejos, pudo ver a su hermano junto a Katy Simmons, quien cantaba cerca de un pozo mientras Charlie recogía enormes rocas y las arrojaba dentro.
—¡Charlie! ¿Qué están haciendo? —preguntó Raven, mientras se acercaba. Su hermano la miró con una gran sonrisa en el rostro.
—¡Acércate, Maggie! ¡es divertido! —dijo el muchacho y arrojó la enorme roca que cargaba dentro del pozo, para luego dejar salir una gran carcajada. Katy seguía cantando, mientras observaba hacia el interior del pozo, sonriendo.
Raven caminó hasta llegar al pozo, observo en su interior y pudo ver a Gina Morgan allí, estaba muerta. Charlie y Katy estaban sepultando su cadáver con esas rocas. Lejos de espantarse por aquella escena y salir de allí gritando, se quedó observando fijamente a la joven dentro del pozo. Su cabello rubio estaba manchado con la sangre que salía de su frente.
—¡Raven!— dijo Katy, la chica de Wayne la miró y la muchacha Simmons extendió su mano y le entregó una naranja—¡¡Hazlo!!— dijo, incitándola a arrojársela al cadáver.
Cuando Maggie volvió la vista dentro del pozo, Gina estaba halándola de los tobillos.
Se despertó sobresaltada al escuchar que golpeaban su puerta, era Thunder que le avisaba que el desayuno estaba listo. Se quedó unos minutos sentada en la cama, pensando en lo extraño y aterrador que había sido ese sueño, aun su corazón latía enloquecido por el susto que había pasado. Se quitó el pijama y bajó rumbo a la cocina, el fuego estaba encendido y había un delicioso olor a café en el aire.
—Espero que te guste, sabes que no soy el mejor preparando café— dijo el pelirrojo y le entregó la taza.
—Gracias, debiste despertarme antes así te ayudaba con el desayuno.