Capítulo 18: Fuego y Sombra

Adeline

Estar sentada en mi cuarto es una bendición. Tiene vista a toda la manada y se siente alejado de los otros cuartos; por eso puedo respirar un poco. Pero en este momento todo se siente raro... como si algo estuviera a punto de estallar.

—Adeline —dice Luna desde la puerta—, quiero que me escuches bien. Hoy vendrá alguien muy distinto a nuestra especie; alguien con un carácter duro, casi imposible de doblegar. Amenazó a Káiser en el pasado, y no sabemos qué esperar.

Siento que mi corazón se acelera. Luna continúa:

—Puede que haya sangre hoy. Cuando lo saludes, hazlo con respeto, reverencia... y no le mires a los ojos.

Asiento, y la miro a ella, nerviosa.

—¿Conoces a esta persona? —pregunto.

—Sí —responde Luna—. Es un rey vampiro... su don le permite ver el pasado y el futuro. Su poder es enorme y su carácter... brutal.

—¿Y... un lobo y un vampiro pueden tener un hijo? —me atrevo a preguntar, recordando viejas historias.

Luna me mira seria:

—Sí, puede pasar... pero es raro. No más preguntas, ahora tenemos que bajar.

Siento un escalofrío recorrerme. Algo me dice que este encuentro cambiará todo.

Bajo las escaleras del castillo y me adentro en el jardín. El aire está tenso, y al instante siento la presencia de Vlad. Mi corazón late con fuerza. Nunca lo había visto tan intenso. Su mirada está llena de odio, y sé que todo ese rencor está dirigido a Káiser.

Vlad me ve y dice con voz dura:

—Levanta la cabeza, princesa. No permitas que te humillen. Nunca.

Obedezco, aunque el miedo y la confusión me hacen temblar. Su odio hacia Káiser es casi tangible, y yo me siento atrapada en medio Vlad avanza, y Káiser permanece firme, majestuoso, irradiando control absoluto.

—Káiser —gruñe Vlad—. No protegiste a Sophia. La dejaste sola, vulnerable. Ahora te atreves a llamarte rey y Alpha. ¿Crees que mereces ese título después de lo que permitiste?

Káiser lo mira con frialdad, cada músculo tenso:

—Vlad, tu odio no cambia los hechos. Todo está bajo mi mando. Tus recriminaciones no tienen poder aquí.

—¿No tienen poder? —responde Vlad, acercándose un paso más—. ¡No sabes la furia que despertaste en mí! ¡No sabes lo que es ver a tu propia sangre sufrir y que la justicia quede en palabras vacías!

Siento cómo el aire se corta con cada palabra. Káiser da un paso firme, imponente:

—Tu furia no me intimida. Soy rey, Alpha... y aquí mando yo.

El choque entre ambos es casi tangible. Vlad aprieta los puños, Káiser mantiene su fría autoridad. Cada palabra, cada mirada, cada respiración es un combate de poder y rencor.

de dos fuerzas que no puedo controlar.

Chloe se aproxima con una falsa seguridad:

—Alteza, puedo acompañarla —intenta decir, tratando de imponer autoridad.

Vlad la fulmina con la mirada.

—Débil y arrogante —susurra, cruel—. Aprende tu lugar.

Chloe baja la mirada, humillada frente a todos. Incluso Káiser, desde su trono, la observa con frialdad. Cada gesto de ella es una lección de cómo el poder y la dignidad no se negocian.

Káiser da un paso hacia Vlad, manteniendo su postura implacable. Su voz corta como un filo:

—Adeline, permanece a mi lado. No dejes que el odio de Vlad te distraiga. Mantén la cabeza erguida.

Observo cómo impone su autoridad sobre todos. Vlad es fuerte, cruel... pero Káiser no cede ni un centímetro. Cada palabra es un golpe, cada mirada un recordatorio de que aquí manda el Alpha rey.

Estoy paralizada, observando el enfrentamiento entre Vlad y Káiser. La humillación de Chloe, el odio de Vlad y el control absoluto de Káiser me aplastan... pero siento un fuego dentro de mí.

No es solo miedo. Es confusión, dolor... y una chispa que comienza a despertar en mi interior. Hoy veo el poder de los hombres, su crueldad, y comprendo que mi destino está ligado a ambos.

El viento nocturno me envuelve y un pensamiento surge en mi mente:

"Esto solo es el comienzo. Pronto, todo cambiará... y yo tendré que estar lista."

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Se que es corto pero algo es algo con respecto a al capitulo les debo mucho asi que espero que les guste la historia hasta ahora.