Los recuerdos son de agua y a veces salen por los ojos
Jueves, 13 de julio
Efectivamente el día de hoy ha pasado con suma lentitud, Carlo no para de coquetearme e Ilan no para de mirarme, creo que estoy metida en un gran problema, Frank está celoso, Megan quiere que me vuelva puta, lo dejo claro con un: —Fóllatelos
Refiriéndose a Ilan y Carlo. Leny no para de enviar mensajes con las palabras: Sexo, fornicación, follar, coger. En serio estoy a punto de colapsar, mis amigas están extremadamente locas, sé que lo hacen solo para molestarme, pero joder
—Oh. Dios. Mío. Ilan no despega la mirada de ti, parece un halcón acechando a su presa—Susurra emocionada—. Pareciera que quisiera lanzarse encima de ti…—Sube y baja las cejas con picardía—. Quien sabes qué cosas querrá hacerte…
— ¡Megan! ¡Ya basta! —Exclamo avergonzada—. Pareces una gata en celo—Ella ríe, disfrutando la molestia que me causa
—Miau—Pestañea continuamente, okey luce realmente graciosa, suelto una carcajada, mientras seguimos caminando a la cafetería, maldición este día aún no termina
Cuando nos sentamos en la mesa con nuestras respectivas bandejas me emociono al recordar algo
—Hoy el pequeño Terry cumple siete meses—Digo con una tonta sonrisa, creo que mi hermano es lo mejor que ha podido pasarme, lo adoro locamente, siento que es mi hijo, río, en serio río ante ese pensamiento
—Adoras a ese niño—Me dice Meg con una mirada conmovida
—Ni te imaginas, daría mi vida por él
— ¡Hay que celebrar al pequeño! Cuando salgamos de clases vamos a una pastelería a comprar un pastel—Asiento continuamente, sé que Megan ama a Terry, lo adora con locura, lo ve como su pequeño hermano, me encanta eso
Frank se sienta junto a Megan dándome una fea mirada que hace que mi corazón se rompa, no me gusta cuando se molesta conmigo incluso por estupideces, Megan gime dolorosamente
—No me digas que están teniendo una crisis matrimonial—Dice frunciendo el ceño. Sí, así le llama ella
—Pregúntaselo a la señora Howland—Dice Frank encogiéndose de hombros llevando puré de papas a su boca
—Frank está celoso de Ilan—Digo mirándolo fijamente
— ¡Tonterías! No puedes compararte con Ilan, Frank
— ¡La traición destroza mi alma en este momento! —Se lamenta él—. Soy tan poco como para compararme con él—Murmura realmente afligido
Pero que tonto es mi mejor amigo
—Tú estúpido idiota—Lo señalo con los ojos entornados hacia él—. No puedes compararte con Ilan, porque es Ilan el que no te llega ni a los talones
—Pero si ya me estás cambiando por él…
— ¡Por supuesto que no! Eres mi mejor amigo Frank, no te cambiaría por nada, ni nadie—Digo sinceramente, Frank niega con la cabeza
—Eres una estúpida, idiota, enana, asquerosa, necia—Dice y odio sentirme mal
—Bueno… Eh… ¿Gracias?
—No te sientas mal, lo digo porque te amo
— ¡Me encanta tu amor! —Digo irónicamente
—Sabes que sí—Me guiña el ojo
Hemos superado otra crisis
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Miro en la vitrina los pequeños pasteles que son realmente tiernos, a Terry le encantan las cosas coloridas por lo que el pequeño mini cake que escojo lleva varios colores, la velita que Megan elije consiste en un palito de altura con el número 7 en la punta de color azul claro, sé que mamá estará sorprendida por esto, cuando nos dan el pedido nos dirigimos a mi casa, donde Melie se encuentra meciendo a Terry para que deje de llorar, el pequeño de ojos claros en cuando me ve llora para que lo cargue y en cuando lo hago cesa un poco el llanto
—Ha pasado el día fastidioso, no sé qué le pasa—Dice Melie, pobre chica, le sonrío para que no se preocupe, le digo que ya puede retirarse, veo a Megan volver a la sala después de haber ido a la cocina a guardar el mini cake y la vela. Veo los ojos llorosos de mi pequeño hermano y me dan ganas de llorar, hace siete meses lo tuve por primera vez en mis brazos, los que sale de sus labios en medio de un balbuceo hace que mis ojos se cristalicen y una sonrisa surque mi rostro
—Jey—Dice el bebé, ¡Su primera palabra! Quiero brincar de alegría al notar que es mi nombre, ha intentado decir mi nombre, Megan me mira fascinada
— ¡Oh, santa madre de los bebés hermosos! —Chillo con emoción, Megan ríe
— ¡Su primera palabra es tú nombre! —Dice ella con notable emoción—. James—Le dice a Terry, quien ríe
—Je-jey—Balbucea Terry, no hay palabras para explicar la emoción que siento justo ahora, quiero brincar y llorar de alegría
—Tú mamá estará celosa de que su primera palabra no sea “Mamá” —Dice mi amiga y no puedo evitar reír, la verdad estoy en shock, la primera palabra de la mayoría de los bebés en Mamá o papá y dadas las circunstancias siempre creí que la primera palabra de Terry sería: Mamá. Pero bueno, ya ven, mi hermanito va por lo grande y dijo mi nombre