Tyler estaba muy confudido con todo. Y tenía preguntas como; a) ¿quién era Tomás? b) ¿Quién era el abuelo de Emily? y c) ¿quién era Emily Walker?
Y también... qué pasó con su madre. Lo peor de todo es que Tyler no sabía por dónde averiguar. A quién preguntarle. O qué hacer.
Recordó a Victoria.
✦✦✦
Se escuchó tres tipidos y luego, atendieron:
"Hola, ¿sí?" habló el chico del otro lado. "¡Vicky! Pará, quedate quieta que no voy a escuchar nada.""
"Hola, soy Tyler, el vecino de metros."
"Aaaah sí, Tyler. Vicky me habló de vos. ¿Querías algo? ¿Pasó algo?"
"Hablar con ustedes, ¿puede ser eso posible? ¿No joda, no?"
"Es 'jode' pero va bien eh." rió él. "Sí, dale, no hay problema. ¿En tu casa o venís a la nuestra?"
"En mi casa, por favor."
"Oka. Nos vemos ahí, capo." cortó.
Había cosas que a Tyler le estaba costando mucho entender y no sólo hablaba de la situación en sí sino del todo el lenguaje que estaba escuchando diariamente de la pareja. El castaño se sentía un poco triste de no aprender rápido. Es decir, le gustaban las palabras argentinas. Eran geniales y quería aprendelo ya.
Una hora después ellos estaban entrando a la casa de Tyler, éste los invitó a que se sienten en el sofá que estaba allí.
"Lo siento tanto por molestarlos. Es que estoy con la cabeza que me explota, realmente."
"No importa." dijo Agustín. Parecía mayor que Victoria, tenía el cabello de un color castaño acercándose a un rubio. "Vicky me habló de vos. ¿Te jode el acento?"
"No." negó él con su cabeza. "Me quiero acostumbrar a algunas palabras. Está bien." Se acomodó el pantalón desordenado. "Les serviré algo para tomar."
"Café con torta de chocolate." respondió Victoria.
"¿Me estás cargando? ¿Qué sabes vos si él tiene torta de chocolate?" dijo Agustín, un poco rojo. Le dió vergüenza que su novia sea tan directa. Tyler rió. Victoria carcajeó.
"Ay bueno. Dejá de retarme."
Tyler se rió mucho. "Está bien. Tengo torta pero de limón."
"Amo, dale." ella dijo.
Tyler comenzó a servir café y a traer torta de limón mientras hablaba. "Tengo unas dudas de éste lugar." Ellos se miraron entre sí. Ya estaba en pánico. "Digánme que esto no es una película de terror."
"No, es que, o sea" comenzó a decir Agustín. "Es complicado."
"Quiero saber."
"Hace unos tres años atrás pasó la mayoría de las cosas." habló Victoria. "Vivía una chica acá y su abuelo. Nosotros vinimos acá desde que teníamos dieciocho y veinte. Hace un tiempo, digamos. Tuvimos mucha suerte. De verdad, pero más o menos veíamos lo que pasaba por acá aunque estaba medio lejos. Los encontrabamos en cualquier lugar. ¿Entendés? El abuelo era re agresivo con la piba."
'Piba' creo que era chica.
"Sí." siguió Agustín. "Siempre estaba llorando, o la mandaba demasiado. Se creía superior el viejo ese. Un día me metí viste y le dije, ¿vos sos o te hacés? ¿Cómo la vas a tratar así delante de todos? ¿No te da la cabeza, no? Y bue, reaccionó re mal, no sé quién se pensaba que era, posta. Se creía que porque tenía toda la guita podía hacer lo que quiera. Y no es así."
'Posta', bueno, ya no sabía que era eso. Basta Tyler, concentrate.
"La chica estaba con alguien." dijo Agustin. "Andaba con un chico que parecía un poco mayor que ella pero no sé, ya ni idea de eso, cuestión que tenía una familia de porquería. Pero por lo que nosotros entendemos es que Tomás, el pibe, no estaba en muy buenas condiciones económicas viste, y nada el abuelo de ella era una basura."
"¿No sabes por qué se han mudado?"
"Es que no se sabe bien qué pasó." dijo Vicky. "El viejo está en la cárcel, según dicen, supuestamente mataron al chico que salía con... ¿cómo se llamaba la chica?" miró a su pareja.
"Emily." respondió Agustín. "Emily Walker se llamaba."
"¿Esto pasó en los medios?"
"Estuvieron unos días pero no decían mucho y después se olvidaron."
"Es horrible."
"Un re bajón." dijo Agustín. "La piba estaba todo el día mal. A veces, a la noche, tipo una, se esuchaba que ella se iba corriendo cerca del lago y no volvía y después andaba el viejo buscándolo. Viejo forro sorete. Lo odio. Que se pudra en cana."
"¿Nada más?" preguntó el castaño.
"Nada más. Después pasaron unos años, y no lo vimos más. A veces como que pásabamos para chusmear pero nada. O él no estaba o no sé... Y de un momento a otro, la casa estaba en venta."
Bueno, algo de información tenía. En realidad, más de la que esperaba.
"¿Por qué tanta curiosidad con esto?" preguntó Victoria. "¿Qué onda? ¿Conocías a alguno?"
"Realmente no." No quería decir nada sobre el diario. No entendía bien el por qué. "Solamente quería saber porque no sé... ¿Nadie sabe dónde se encuentra Emily?"
"A nadie le importa. Esa es la triste realidad."
"Eso es una tontería." se enojó. ¿Cómo es que a nadie le importaba qué es lo que le sucedía a una chica que sufrió la mayor parte de su vida? ¿De verdad a nadie le importaba o tenían miedo? Aunque no sabía muy bien de qué. "Bueno, gracias, quería saber de eso. Me ayudaron bastante."
"Ay más tiernis. De nada" sonrió Victoria. "Tyler, contanos de vos."
"Bueno, vengo de Inglaterra y creo que se nota, éstem..." pensó qué decir. No era muy interesante como ellos. "Viví con mamá unos años hasta que ella pudo comprarme una casa para que me vaya acostumbrando a vivir solo, supuestamente. Creo que no me quiere." rió. "Y... nada, pasaron los años, y estoy aquí."
"¿Estudiás algo?" preguntó Agustín.
"Terminé la universidad hace años. Estoy trabajando. Es decir, estoy tratando de instalarme pero ya había hablado con mi jefe. Me dedico a la administración."
"Qué aburrido." dijo ella. "O sea, yo hice eso en la secundaria. Te juro que lo odiaba."
Tyler carcajeó. "Siempre me gustó."
"Qué horror, bueno, ¿vivís solo ahora?"