El Diario De Rem

Entrada 24 – El Nacimiento de Rem

Sin darme cuenta, viviendo la vida, siendo feliz, el tiempo voló.

Y cuando menos lo esperé… había pasado un año.

El tratamiento había terminado. Todo el esfuerzo, todo el llanto, toda la soledad… había dado frutos.

Me miré al espejo y no era ya más ese niño que todos conocieron.

Me vi. Sonreí. Toqué mi rostro. Toqué mi cuerpo. Era real.

No era un sueño. No era un deseo. Era yo.

Ya no tenía que ocultarlo. Ya no había miedo de salir a la calle y que me vieran. Ya no me escondía. Algo en mí cambió.

Llamé a mi madre. Hablamos por horas. Ella me miraba por cámara con lágrimas en los ojos y una sonrisa que parecía eterna. Me veía con orgullo, con esa mirada que solo una madre que ama de verdad puede dar.

Y yo… yo no sabía cómo agradecerle.

Aún triste, ella me confesó que se sentía culpable por haberme dejado años atrás. —"Siento que te abandoné…" —dijo. Pero yo la miré a los ojos y desde lo más profundo de mi alma, le dije:

"Gracias, mamá. No me abandonaste. Pero si así lo crees… gracias por ese abandono. Porque gracias a él, hoy estoy aquí. Hoy me siento completa. Hoy me siento feliz. Y tú… tú fuiste mi único apoyo. Siempre creíste en mí. Me aceptaste. Me ayudaste.

Gracias a ti… hoy nació Rem."




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.