Prólogo

La amistad es una de las cosa más hermosas que te puede ocurrir. Tener a ese amigo o amiga siempre a tu lado, en las buenas y en las malas, cuando estés colapsando y cuando estés festejando. La persona que no dudará ni un segundo en lanzarse al pozo al ver que te estás ahogando.

Sin embargo, algunos piensan que ésta no existe, que solo es un engaño que puede llevarte a tu propia destrucción. Son seres humanos que consiguen tu confianza, y la usan a su favor para apuñalarte por la espalda. Todo depende de la suerte que tengas y de tu capacidad de leer a los demás.

Es tu decisión arriesgarte, no puedes permanecer encerrado en ti mismo por siempre, colocar un candado paara evitar el paso de las personas, del dolor, al igual que la felicidad.
La felicidad solo es algo efímero en tu vida. En un momento esta, y en unos segundos la tristeza ocupa su lugar burlandose de ti, haciendote creer que ella será tu compañera por tu vida entera, apagando tu brillante luz. Sin embargo, buscas la manera de hacerle ver que esta equivocada, y la humillas iluminando cada rastro de tu ser, apartandola por completo.

Quien diría que las buenas sensaciones pueden llevarte a la destreucción, a esto se le llama ironía de la vida. Cuando la amistad, el amor, la esperanza y la felicidad, te arrastran a una caída sin fondo, sin un atisbo de luz, rodeado de tus futuros compañeros de vida, tus demonios internos. Los cuales pueden poner fin a tu vida en el tiempo en que menos te lo esperes, cuando crean que ya es momento de destruirte.

Esto es lo que ocurrió con Logan, alguien que tuvo que aprender a lidiar con el dolor. Aprendió a luchar con sus miedos para no dejarse vencer, sin embargo, a esto no se le puede nombrar como un tarea fácil. Tendrá que buscar una manera de lograr salir ileso de esta batalla, fortalecer su escudo y enfrentarse cara a cara con todas las causas de su dolor.