Por primera vez en años parece que RedCell ha perdido la estabilidad que tanto presumía, pero no es lo único que ha ocultado. Pero lejos del sarcasmo esto no es nada común, si la empresa se está derrumbando a pedazos sería casi imposible que las victimas incluyeran a los líderes de esta. No tengo tiempo para analizar la estabilidad de RedCell al tener a la asistente y esposa del jefe de RedCell convertida en un monstruo que mataría de un infarto a cualquier persona con aracnofobia. Su rostro se ha dividido de oreja a oreja como la dalia negra, pero en este caso es porque a la mujer le han salido unos enormes colmillos como para atravesarme el cuello y su piel se ha tornado de un tono gris que la hace ver como una estatua viviente. Creo que sus brazos y sus piernas se han dividido en dos, teniendo ocho patas que terminan en una garra arriba de dos o tres dedos y en la parte de su espalda se ondean unos tentáculos de color verde pálido que avientan gotas de ácido. No creo que sea posible esquivarla y explotar las instalaciones, por lo que pelear con ella es obligatorio si no queremos fallar en el intento.
— Creo que nosotros acabaremos con eso y no los guardias— bromea Allen viendo como los soldados corren y algunos lloran escondidos detrás de una pared o escondidos en los baños.
— Lo malo es que ya no tenemos una ventaja— le digo a Allen mientras los cuatro vamos retrocediendo—. Luchar con veinte soldados no era nada, ahora tenemos que pelear contra un monstruo-araña.
John lanza un potente rayo hacía la criatura, que nombro como la Reina Arácnida por la forma tan similar a una araña, y esta suelta un horrible chillido peor que rayar un pizarrón con un tenedor. Y mientras Allen lanza un enorme trozo de hormigón a la cara yo utilizo mi súper-velocidad para correr hacia atrás de la reina arácnida y salto hacía su espalda desde la pared justo a tiempo para que el trozo de hormigón se impacte contra la cara de la reina arácnida. Y vuelvo a saltar hacía un lado tras hacerle una señal a CJ y esta hace la cara de la mujer mutada explote en pedazos, exponiendo su cráneo y parte de sus músculos faciales que ahora son verdes. En este punto tengo que materializar unas dagas de pixeles, algo muy útil. Las dagas van saliendo de las palmas de mis manos, y cuando siento que ya están flotando en mis manos aviento las dagas sin piedad a la Reina Arácnida, controlo las dagas con mi telequinesis para que caigan a la espalda de la criatura para que corten algunos tentáculos, logrando que tres tentáculos caigan al suelo y deshaciéndose al instante en un charco de ácido. Por lo menos le hicimos daño sin recibir una herida, eso es algo bueno o algo malo si tomo en cuenta que ahora me falta enfrentarme con veinte soldados y posiblemente a más científicos mutados si es que hay un ataque afuera como lo decía el sistema de seguridad de esa computadora. Debemos mejorar la estrategia si no queremos que esa cosa horrible.
— Logramos hacerle daño, eso significa que no estamos perdiendo— dice John con un gran optimismo—. Unos dos o tres ataques a esa cosa y oficialmente ganaremos la batalla.
Entre mi arsenal de poderes solo dos pueden servirme y no han sido afectados por la extracción de la sustancia vital en mi sangre es mi súper-velocidad y la telequinesis, pues tele-transportarme por los cables no ayudaría mucho a derrotar a esa criatura que antes era una mujer que contribuía a querer matarme, lo que no ha cambiado mucho al querer matarme por supervivencia o por ser una amenaza. Para el segundo golpe grupal Allen y CJ juntan un trozo de cemento con forma de un asteroide y con una bola de energía, pero como CJ no puede dejar que Allen lo aviente hacía la Reina Arácnida o si no explotará, con mi telequinesia lo lanzo hacia la criatura y John le impacta un rayo para que explote. La Reina Arácnida ha perdido dos patas, la mejor ventaja que hemos tenido hasta el momento al quitarle mucha movilidad al ser las patas de atrás y haciendo que agache más la cabeza para poder vernos. El siguiente golpe debe de ser aún mejor, así que esta vez se me ocurre la idea de correr alrededor de ella para frenarla mientras John le dispara un montón de rayos y CJ genera na explosión grande. En el cine y televisión suelen ilustrarlo como la peor acción que alguien puede hacer, provocando un desastroso viaje en el tiempo que cambia el presente para mal o el fin del mundo en algunos programas extremistas, pero si no impido que esa criatura siga acechándonos hasta la muerte no creo que podamos escapar. Corro con la mayor velocidad que puedo y rodeo a la Reina Arácnida, que trata de tocarme y por suerte al intentarlo se destruye una de sus garras, haciéndose polvo al instante. Al ver que tengo a la bestia atrapada, John aprovecha y le lanza un potente rayo al igual que CJ lanzando una bola de energía que explota en la cara de la Reina Arácnida y dos de sus tentáculos caen al suelo, dejando un solo tentáculo a la vez que una parte de su cráneo cae al suelo y se desintegra al caer en un charco de ácido. John está en lo correcto, tenemos esta pelea ganada si seguimos así. Y si sus tentáculos son su punto débil entonces solo falta un golpe para derrotar a la criatura, pero por precaución prefiero reducir a la Reina Arácnida cenizas para evitar que se regenere, si es que puede hacerlo, o debilitarla y que siga viva. No puedo ver que están planeando al estar suspendido en el tiempo o algo por el estilo, pero del otro lado del pasillo y donde posiblemente está la salida de las instalaciones se ve un gran resplandor amarillo, parecido al de una explosión. Aprovecho que posiblemente le disparan a la Reina Arácnida y paro de correr, deslizándome hacía atrás de la criatura y cerca del lugar donde posiblemente John descubrió al clon de Hannah. Mi teoría era correcta y del otro lado un grupo de chicos le disparan a la Reina Arácnida y destruyéndola por completa con la ayuda de un enorme lanzamisiles.