El lado oscuro del amor

Capítulo 10: Fue un error

Nick

Doy dos pasos y me detengo mirando toda la sangre que hay en el suelo, es demasiada y el solo hecho de pensar que puede ser de Kathleen me aterra, aprieto mis dientes caminando por el lugar hasta que encuentro otra puerta y salgo a la parte de atrás, más árboles me dan la bienvenida, ya casi es de noche, seguro estuvieron aquí, pero tuvieron que irse pero por qué? La respuesta es clara cuando a unos metros veo algo y me acerco, hay un hombre en el suelo muerto por un disparo, lo que puede significar que Jason está vivo y que Kathleen también, pero uno de ellos parece estar muy malherido y por el bien de Jason espero que sea él porque si dejó que hirieran a mi esposa le meteré un tiro aunque vaya a la cárcel.

—Ya mandé a buscar más hombres, señor —se acerca uno de los policías —vamos a buscarlos por todo el bosque y no saldremos sin ellos

—Mis hijos aún están en la escuela —murmuro recordando ahora a estos —dile a alguien que vaya a por ellos —él asiente

—Usted podría volver y

—No saldré de aquí sin mi mujer —lo miro —deje de decir estupideces —él solo asiente

—¿Alguna idea de quien pueda ser él? —niego cuando señala al hombre en el suelo —y no sabe tampoco para quien podría trabajar?

—No

—¿Seguro?

—¿Si fueras Jason a donde irías? —cambio de tema, él mira hacia todos lados y luego de dar un largo suspiro señala hacia mi derecha

—Si caminas por ahí saldrías a la carretera —asiento —Jason sabe eso

—Entonces iremos por ahí —miro el arma en mi mano —nos dividiremos por si acaso fue a otro sitio, reparte a tus hombres, yo tomaré ese camino

—Si señor —respiro hondo mirando hacia ahí, deseando encontrar pronto a Kathleen, si toda esa sangre es de ella eso no es nada bueno, se está desangrando y si es de Jason tampoco es bueno, esas personas aún están seguramente buscándolos y si él muere Kathleen no tendrá ninguna posibilidad, ella es mujer, es débil y cobarde, jamás sobreviviría en este bosque con hombres armados buscándola, ni siquiera sabe usar un arma, bufo y cuando el policía con el que antes hablaba se acerca a mí con dos más, comienzo a caminar con rapidez y al igual que ellos con mi arma en alto, uno de ellos me pasa una linterna y la tomo aunque ahora mismo no la necesito.

—Seguro estaban en la cabaña —dice uno de los policías —quizás tuvieron que salir de ahí cuando los encontraron

—Jason disparó a ese sujeto y pudieron huir

—Al menos sabemos que están vivos —aprieto mis dientes y me detengo

—¡Kathleen! —grito a toda voz deseando ser escuchado

—¿Qué demonios haces? —miro mal a quien me habla —pueden escucharnos y

—Kathleen y Jason no están lejos, uno de ellos está malherido, me escucharán

—Quienes lo persiguen también

—Entonces sabrán que ya no están solos y me van a escuchar, se irán teniendo miedo y encontraremos a Kathleen y a Jason antes de que uno de ellos muera —me acerco a este —estoy seguro de lo que digo

—O podrían atacarnos

—No han podido con dos, no son muchos —sonrío —lo haremos a mi manera agente porque no voy a estar horas buscando a ciegas pensando que mi mujer está herida y puede morir en cualquier momento, prefiero no perder el maldito tiempo y si tengo que atraer a lo que quieren matarla hacia mí para salvarla lo haré, no me importa.

—Señor

—¡Kathleen! —lo ignoro y sigo gritando el nombre de ella comenzando a caminar de nuevo —¡Jason! ¡Kathleen!

★★★

Kathleen

Mi pie me duele, pero no me detengo, seguimos caminando rápido alejándonos cada vez más de la cabaña en la que estábamos, nos encontraron, pero Jason fue bastante rápido y una vez más salvó nuestras vidas, a pesar del miedo me es imposible olvidarme del beso que nos dimos, beso que duró demasiado y si no hubiese sido por ese hombre que nos encontró hubiéramos seguido basándonos, no sé en que momento bajé la guardia, pero ocurrió y decir que no me gustó sería mentira, fue magnífico, no fue como los besos de Nick los cuales recibo por obligación, sentí tantas cosas que aún no logro describirlas todas. Me detengo cuando Jason lo hace, pero este simplemente se sienta recostado a un árbol, miro hacia todos lado y me acerco a él.

—Ya no puedo —dice con sus ojos cerrados, su herida está sangrando un poco y está muy pálido

—Jason —mis manos van a su rostro —no podemos quedarnos aquí

—Amé besarte —él sonríe y abre sus ojos —y ahora mismo es lo único que deseo hacer Kath

—Fue un error —alejo mis manos de su rostro, me mira confundido —lo siento, no puede repetirse, debemos olvidarlo

—¿Cómo le dices eso a alguien que está muriendo?

—No digas eso —él ríe

—No voy a olvidarlo hermosa, besas demasiado bien

—Jason estoy casada y no voy a dejar de estarlo —él tensa su mandíbula —por favor, deja de jugar así conmigo.

—No estoy jugando Kathleen, desde el día en que te vi por primera vez no logro sacarte de mi cabeza y ahora con ese beso es peor —una de sus manos va a la parte de atrás de mi cabeza —te deseo —él me acerca a su rostro

—Jason

—Y sé que también me deseas —mi respiración se vuelve un desastre estando tan cerca de su boca, sus labios rozan los míos y creo que mi corazón saldrá de mi pecho.

—¡Kathleen! —escucho mi nombre y me alejo

—Es Nick —sonrío feliz por primera vez de escucharlo —están aquí —me pongo de pie y miro hacia todos lados —¡Estamos aquí!

—¡Kath!

—Nick estamos aquí —sigo gritando hasta que le veo y este corre hacia mí, segundos tarda en abrazarme

—Al fin te encuentro maldita sea —él me mira con rapidez —no estás herida

—Es Jason, él —miro a este —Jason —susurro arrodillándome, este no se mueve y sus ojos están cerrados —Jason abre los ojos —pido con desespero tocando su rostro

—Debemos llevarlo ya a un hospital —escucho que dicen y Nick me aleja de él mientras mis lágrimas salen como una cascada de mis ojos.

—Kathleen —levanto la mirada cuando Nick me habla —vamos a la casa




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