¡a bordo! y el secuestro

Zarpamos un miércoles 13 de marzo de 1939 a las 9:35 pm, nuestro camarote era muy bonito, algo pequeño, pero tenia las paredes recubiertas con madera en la cual se habían tallado figuras y diseños que lo hacia lucir muy elegante, además parecía tener algunos ensambles de marfil en forma de aves, y la tapicería en algunos pedazos era color carmín, hacia buen juego, aunque si, se veía algo viejo. pues bueno después de todo duraríamos algunos dias navegando, había que estar lo mas comodo posible.

A la mañana siguiente, mi padre nos acompaño a James y a mi a cubierta, para observar el mar y el amanecer y era increible, los rayos del sol reflejados en el mar atravesaban mis pupilas y creia que jamas habia visto algo tan hermoso.
después fuimos al salón principal, para desayunar. 
El cual estaba muy bien adornado, de un hermoso color perla. Ahí mi madre nos estaba esperando, había muchas mesas, pero la mitad del recinto estaba vacío, tal vez por que aún no se despertaban o no había muchos pasajeros a bordo. 

A las 9:30 am los meseros trajeron el desayuno, la verdad que ya habían tardado, y ya sentía que me moría de hambre. Nuestro menú esa mañana era
Pure de patata 
Filete de pescado
Pan 
Frutas
Te y café

Mi madre nos hizo rezar en silencio,y yo estaba a punto de terminar cuando una mujer con una voz casi gutural, como si tuviera varios días enferma interrumpio
- Buenos días, mi nombre es Romina Moore- Y Extendio la mano hacia mi madre seguido de mi padre para después saludarme a mi y a mi hermano
-¿puedo sentarme?-pregunto
-claro que si- asintió mi madre

-desea desayunar algo?- le pregunto mi padre
-gracias, pediré un te- respondió ella y llamo al mesero.

un hombre iba pasando por ahi-Albern, ven sientate con nosotros-le propuso ella a ese hombre como de unos 60 años -no,lo siento gracias- respondío el con un tono firme.               - insisto Albern, no seas tan amargado -  y después que el hombre dio un suspiro y cerró los ojos asintio   -Bueno esta bien- dijo resignado

  -Alber te presento al señor y la señora jones- dijo la señora Romina, despues de presentarnolo y decirnos que lo conocio antes de abordar mientras el le ayudo con su pesado equipaje.

Albern era hombre muy serio y tenia esa mirada de alguien que no quiere ver a nadie, lo se porque era la mirada que ponía mi madre en ocasiones, asi que durante todo el desayuno la anfitriona fue la señora Romina, o como dijo el mesero, Madame Romina.

 Madame Romina, era una mujer robusta y de alta estatura de algunos 50 y tantos años de edad, de cabello castaño con un diente roto y labios delgados. vestia un muy elegante abrigo negro, y un bolso muy grande, pero era educada y trasmitia una energía que animaba a cualquiera, 
durante todo el desayuno estuvo en nuestra mesa charlando con mis padres mas que nada y contando su vida, para mi parecía una mujer atribulada, tratando de ocultar con esa sonrisa algun dolor, nos hablo sobre su primer esposo quien la abandono a ella y a su primer hija, después su segundo esposo quien la engaño con una mucama, después sobre su tercer esposo quien fallecio mientras estaba con su amante... 
por dios jamas había escuchado de alguien que fuera traicionado tantas veces,: ¨pero bueno ya es cosa del pasado¨ decia al finalizar cada anecdota, sin embargo era mas que obvio, como eso la estaba matando.

Madame romina era una mujer sin filtro y atrevida, pero también conocía de discreción y sabia que merecia respeto. 
después del desayuno le dijo a mi madre si le gustaría dar un paseo por cubierta 
-me encantaría- respondio mi madre a su propuesta, y entonces los demas nos fuimos a los camarotes. 

durante cuatro días, todo fue normal, mi madre se hizo amiga de madame Romina y mi padre mi hermano y yo jugábamos, leíamos, y estudiábamos. en ese momento jamas me llegue a imaginar que toda esa paz cambiaria radicalmente.

7 días después de navegar sobre el atlantico, durante la mádruga del martes 21 de marzo dormiamos tranquilamente cuando un estruendo que parecia venir de cubierta nos desperto, mi padre sobresaltado salio a averiguar, y mi madre se quedo sentada sobre la cama mientras nos decia que guardaramos silencio, ideas locas empezaron a pasar por mi cabeza, me puse los zapatos cuando en eso entro mi padre corriendo cerrando la puerta tras de si, quedandose de pie recargado con cara de haber visto un fantasma, estaba a punto de preguntarle algo, cuando se escucharon disparos en el pasillo, -escondanse- dijo con voz baja 

-pero que esta pasando Jim- pregunto mi madre confusa. - escondanse muchachos, rapido- dijo sin responder, -ven amor- sostuvo dirigiendose a mi madre, yo le dije con voz de broma a mi hermano que ibamos a jugar, quien no queria por que tenia sueño, pero logre meterlo debajo de la cama, y yo estaba a punto de hacerlo, cuando se escucho un fuerte chasquido de metal rompiendose, abrieron la puerta de nuestro camarote con un disparo, era un hombre que daba temor al verlo algo grande quien portaba una gran arma, y parecia hebrio, ¿pero que está pasando? Me pregunte

-no lastime a mi familia por favor- suplico mi padre, pero fue en vano

 -callate- grito el hombre, dandole un disparo en el estómago, me quede perpeplejo, sin nada que hacer, escuchando como se le escapaba la vida a mi padre, mientras daba un suspiro dejando escapar un sonido de dolor reprimido que aun no puedo olvidar