CAPÍTULO OCHO
Alexandra
Han pasado varias semanas, desde aquel día en el que Cris me contó de su primera cita con Mía y, hasta ahora no lo e visto, pero hoy eso se terminará ya que me dijo que me tenía que decir algo muy importante...
Ale: me tengo que ir, adiós niños
Said: adiós, tonta
Erne: vete por la sombrita
Aurora: toma agua - me grita y yo rio
Solté el humo del cigarro y comencé a jugar mi extraño juego de no pisar las líneas que llegué a ver en la calle
Hasta que sin darme cuenta ya estaba en donde siempre me veía con Cristopher, y antes de que este llegara, tire el cigarrillo para después pisarlo...
Sabía que el olor no se iría, pero eso ya no me importaba
Cris: Lexa - escucho la voz de Cristopher y vi que venía a mí con una gran sonrisa en su rostro
Lexa: Cris, hola - digo feliz y cuando él se detiene frente a mí, arruga su nariz - ¿pasa algo? - pregunto un tanto nerviosa y su cara se torna fría
Cris: ¿fumas? - me pregunta seriamente
¿Cómo es qué me conoce tan bien?
Lexa: eso no importa, ¿qué es lo que me dirás? - pregunto, pero el niega
Cris: Alexandra, contéstame, ¿has fumado? - pregunta y yo cierro mis puños con fuerza
Lexa: si, ¿hay algún problema? - pregunto enfadada y el niega con enojo
Cris: por Dios Alexandra, ¡¡¿tienes el descaro de preguntar que si existe algún problema?!! - habla alterado - ¡tú no eres así!, ¡¡¿qué te pasa?!! - me grita
Lexa: ¡¡ESO A TI NO TE IMPORTA!!, ¡¡ES MI MALDITA VIDA NO LA TUYA!! - grito harta
Cris: ¡¡¡me preocupo por ti!!!
Lexa: entonces deja de hacerlo - digo seria - más bien, aléjate de mí - digo enojada y el me ve confundido
Cris: no hablas enserio
Lexa: lo hago; ya déjame en paz y deja de meterte en mi vida
Cris: te recuerdo que tú fuiste la que me pediste que no me alejara de ti
Lexa: ahora también soy yo la que te exige que te alejes - digo haciendo que me mire fríamente
Cris: bien, lo haré y también te pagaré todo lo que me prestaste para la operación de mi mamá, Alexandra - dice dándose la vuelta, pero antes de irse, habla - yo solo te iba a decir que Mía y yo ya somos pareja, y te daría las gracias por haberme dado tu apoyo, aunque ya veo que solo te acercaste a mí por lástima y que jamás te interese, adiós, Alexandra - dice para después irse
Llegué a mi casa y me encerré en mi habitación, recargándome en la puerta dejándome caer poco a poco hasta tocar el frío piso, y abrazándome a mí misma, dejando salir todo lo que sentía
Ale: ¿Por qué hiciste eso Alexandra?, ¡¡¿por qué lo alejaste de ti?!! - me pregunto a mí misma mientras siento un gran enojo hacia mí, soy una tonta...
¿¿Porque lo hice??
Una semana después
Veía a mis hermanos practicar baloncesto junto con sus demás compañeros, mientras que yo estaba sentada en las gradas esperando a que terminarán su entrenamiento, cuando escuche la voz de él...
Cris: Alexandra - me llama Cristopher y yo lo miré inmediatamente, quería abrazarlo y pedirle disculpas por todo lo que le había dicho, pero cuando vi cómo me veía, todo eso se esfumó - te quería traer el dinero que me prestaste para lo de mi mamá, aquí está todo - dice tendiéndome un sobre amarillo
Ale: ¿de dónde conseguiste todo este dinero? - susurro
Cris: eso no te interesa, cuéntalo, para que veas que si está completo - dice, pero cuando yo estoy a punto de tomarlo niego
Ale: jamás te lo pedí
Cris: no quiero deberte nada - habla, pero al ver que no lo tomaré suspira pesadamente - entonces has lo que quieras - dice y deja el dinero en la grada, para darse la vuelta e irse
Ale: Cristopher - lo llamo, pero el me ignora y sigue con su camino - Cris, no me dejes, por favor... - susurro sintiendo las lágrimas rodar por mis mejillas
Quiero que todo sea como antes, ¿por qué no puede ser así?...
(...)
Zai: ¡¡Charlie!! - le grita llamando la atención de todas las personas del centro comercial
Ale: cálmate, Zaira, no grites
Zai: me spoileo mi película favorita - se queja
Charlie: te juro que no sabía que no la habías visto - dice rápidamente y yo rio
Ale: son un caso perdido
Zai: bueno, pero vamos por un helado ¿sí? – pregunta, ladeando su cabeza
Char: yo también quiero, dos contra uno Alexa, vamos - dice y ambos me toman de mis brazos, trenzando los suyos con los míos y haciéndome caminar rápido mientras yo reía como loca
Ale: me van a tirar - me quejo, error gigante
Char: que la carguemos - dice y Zai asiente, entonces se detienen y uno toma una pierna mía y el otro la otra pierna, llevándome cargada; las personas nos miraban confundidas, otras riendo, pero no me importaba porque yo iba riendo sin vergüenza alguna
Ale: no me vayan a tirar - les advierto y ellos empiezan a ir más rápido, hasta que llegamos a el local donde vendían los helados y cuando me bajaron los tes comenzamos a reír - me duele la panza - me quejo mientras rio, y empezamos a escuchar las risas de otras personas