Veía a través de mi ventana, niños pasaban corriendo y sus madres gritaban que pararán o se caerían.
Estaba concentrada viendo ningún punto fijo, cuando escucho hablar a mi mamá.
- Maeli, necesito algo de la tienda, ¿puedes ir? -
- A si, ¿qué necesitas? -
- Un refresco, coca cola, ya sabes el de dos litros, uno de sabor tú lo escoges y tostadas
- mjm ahorita vengo -
- si, con cuidado -
Me dispuse a tomar el dinero y comenzar mi ruta, no queda lejos la tienda por lo que no tardaría mucho.
A menos que hubiera mucha gente.
Cuando por fin vi que estaba cerca, sentí que no tenía el control de mis pies y caí.
Es normal que tropiece, tengo mis pies torpes, pero esta vez fue diferente.
No sentí que fue mi culpa.
Todo se puso oscuro.
........
Desperté en un cuarto, blanco, y con mucha luz, desorientada, me dolía la cabeza y no podía moverme.
Solo sentía como un doctor hacía cosas pero no alcanzaba a ver bien que hacía.
Duro un rato así hasta que decidió hablar para pedirme estar boca arriba, hice mucho esfuerzo para poder darme la vuelta, me sentía débil.
- Te voy a pedir que hagas fuerza con tus brazos y piernas, ponlas en mi mano y puja, primero las manos
- mmjm -
- Vamos haz fuerza, no te preocupes por mi -
- estoy haciendo fuerza -
- un poco más, toda la fuerza -
- es toda la fuerza -
- vale esta bien, no te presiones, ahora lo demás -
Lo mismo paso con lo demás.
Estaba débil y sentía mi mano izquierda extraña.
Deje de prestar atención a mi alrededor para centrar mi vista en mi mano.
No podía mover un dedo.
-Hija -
La voz de mamá se hizo presente, tenía presente pequeñas lágrimas en los ojos, como si los hubiera limpiado antes, se acercó a abrazarme.
- ¿qué fue lo que pasó mami?, siento mi mano extraña, no puedo mover mi dedo chiquito -
- tú... cuando ibas a la tienda, caíste inconsciente y no despertabas, así que te trajeron al hospital -
-.... -
- el doctor te hizo unos estudios, una electromiografía y otras cosas con nombres extraños. -
- ¿tengo algo malo? -
- una enfermedad... que.... -
No pudo continuar con lo que decía por qué le ganó el llanto
- me... me voy a... ¿morir? -
- n- no es solo que... -
De nuevo, llanto
Está comenzando a asustarme
- Disculpe señora, si quiere yo le explico, podría dejarme con su hija un momento -
- si -
El doctor acompañó a mi mamá hasta la puerta para después voltear a verme serio, se sentó aún lado en una pequeña banca y comenzó a hablar después de un pequeño rato.
- Es algo fuerte lo que te voy a decir, entonces quiero que me digas cuando estés lista para decírtelo -
No podía con la intriga, tal vez tenía una enfermedad terminal y yo ni en cuenta, así que no paso mucho cuando conteste
- estoy lista -
- tienes esclerosis lateral amiotrófica -
- y... eso es? -
- una enfermedad cerebral y muscular que impide controlar el movimiento de los músculos, con el tiempo perderás la habilidad del movimiento, como hablar, caminar, tragar, todo lo que puedes mover, brazo, piernas, cuello, manos, se pierde, queda inmóvil -
- pero... tiene cura.... verdad? -
- hay tratamientos que hacen el proceso más lento, pero no se ha logrado encontrar una cura -
- ah... -
- te dejo sola para que lo asimiles, si tienes una duda o necesitas algo llama a las enfermeras con ese timbre -
-... gracias -
- es fea la vida verdad? -
- eh? -
- la vida, da enfermedades a la gente que no merece sufrir, ya sabes la gente buena sufre por una enfermedad mientras que los malos y desgraciados viven la vida loca... Gabriel, mucho gusto -
- Maeli, igual, mucho gusto -
Estrechamos manos y se sentó en donde antes estaba el doctor
- También estás enfermo? -
- oh, yo no, gracias a Dios no, yo vengo a hacer compañía a gente que esta enfermita... como tú -
- no estoy enferma -
- oh, y que fue lo que dijo el doctor hace un momento? -
- yo, eh... espera... ¿Estabas escuchando? -
- son cuartos compartidos que esperabas, aquí solo te dividen unas cortinas y ya -
- ay noooo, pensé que estaba sola -
- si bueno, no estabas sola, yo estuve aquí todo el tiempo, no te preocupes no había nadie más -
- entonces también estás enfermo -
- nah, ya te lo dije, vengo a hacer compañía a las personas -
- no pareces ese tipo de personas -
- a sí?, y que tipo de persona parezco -
- no te acerques tanto... -
- ah, perdón no me di cuenta de que me acerque mucho -
No pensé que me fuera a hacer caso, en cuanto dijo eso regreso al asiento
- si, no... no pasa nada -
- no has dicho que tipo de persona parezco -
- oh... bueno, yo que sé, ¿qué tipo de persona eres? -
- tampoco lo sé -
- jumm -
- ¿quieres ser mi amiga?, ya somos amigos, a que hora vas a casa para acompañar a ti y a tu mamá, también podríamos ir por un helado, los helados son buenos para quitar penas, como cuando te quitan un diente y vas por una nieve de limón -
- ey, ey, estás hablando muy rápido, no se te entiende -
- ay, la costumbre, te decía que a que hora sales para acompañarte a ti a tu mamá, y que si querías ir por un helado para ahogar penas, somos amigos, tenemos que salir a pasear como los amigos, no tenemos mucho de conocernos pero ya te quiero -
- comenzaste a hablar rápido a la mitad de lo que estabas diciendo -
- perdoooon -
- hija, ¿ya te lo dijo el doctor? -
- si mamá -
- bueno, ¿quién es él? -
- mucho gusto señora, soy Gabriel, mejor amigo de su hija -
- oh, mucho gusto, mi hija nunca me habló de ti -
- oh, ¿no lo hiciste?, después de tantos años de amistad, me hieres, ¿escuchas mi corazón rompiéndose? -
- pero nos acabamos de conocer... -
- shh, shhh, no digas nada, si no me quieres solo dímelo.. -
- hija, porque no me hablaste de él, ya viste le rompiste el corazón -
- Mamá!, es verdad, apenas nos conocimos -
- ay, ya sé, era juego, se que nunca has tenido amigos -
- MAMÁ!
- ay, yo igual, chócalas, es señal de que somos el uno para el otro, eres mi primera amiga, te amo, nunca lo olvides, que emoción!, nunca me separaré de ti, me tendrás más pegado que un chicle en el pantalón, cada que vayas a un lado ahí estaré -
- eso suena algo turbio... -
- mejor vámonos hija, es rarito tu amigo -
- oiga era broma, no me dejen, les invito un helado! -
- Volviste a hablar rápido! -
- sorryyyy -